Y Él te pondrá en alto sobre todas las naciones que ha hecho para alabanza, renombre y honor, y serás un pueblo consagrado al Eterno, tu Dios, como Él lo ha dicho. Deuteronomio 26:19.
Y los llamarán pueblo santo, redimidos de YHWH, y a ti te llamarán nación deseada y no abandonada. Isaías 62:12.
Y dijo a la gente del pueblo: Fortalezcamos estas ciudades y hagamos alrededor de ellas, torres, puertas y barras, porque el país todavía está en nuestro poder. Porque hemos buscado al SEÑOR nuestro Dios, Él nos ha dado paz con todos nuestros vecinos. Por lo tanto, llevaremos con éxito la construcción, 2 Crónicas 14:7.
Trabajemos por la paz de esta nación donde Dios nos ha puesto, oremos porque haya personas que actúen con justicia y temor de Dios, incluídos cada uno de nosotros. Jeremías 29:7.
Dios no hace diferencia entre una persona y otra, sino que en cualquier nación acepta a los que lo reverencian y hacen lo bueno. Hechos 10:34-35.
Por favor intercedamos juntos a favor de nuestra patria, arrepintámonos, limpiémonos y seamos santos para que nuestras plegarias sen escuchadas y respondidas: SEÑOR, Dios grande y temible, hemos pecado, hemos cometido iniquidad, hemos hecho impíamente, y hemos sido rebeldes y nos hemos apartado de tus mandamientos y de tus ordenanzas.
Tuya es SEÑOR la justicia, y nuestra la confusión de rostro, como en el día de hoy lleva todo hombre de tu pueblo, y los moradores de esta tierra, los de cerca y los de lejos, en todas las tierras donde nos has puesto…Oh SEÑOR, nuestra es la confusión de rostro, de nuestros gobernantes, y principales y de nuestros padres, porque contra Ti hemos pecamos.
De Ti SEÑOR y Dios es el tener misericordia y perdonar, aunque contra Ti hemos pecado, y no obedecimos a tu voz para andar en tus leyes que pusiste delante de nosotros por medio de tus siervos los profetas. Todo tu pueblo traspasó tu ley apartándose para no obedecer tu voz; por lo cual ha caído sobre nosotros todo este mal de gobiernos corruptos y gente violenta que no se duele del pobre, del indefenso y desvalido; porque a Ti hemos fallamos. Por lo tanto, YHWH ha permitido injusticia sobre este pueblo; porque justo es nuestro Dios en todas sus obras que ha hecho, pues hemos sido rebeldes a su voz.
Ahora Tú SEÑOR, que sacaste a tu pueblo de la cautividad con mano poderosa, y te hiciste renombre, cual lo tienes hoy; perdonamos SEÑOR y limpia nuestra impiedad. Oh SEÑOR Dios todopoderoso, conforme a todos tus actos de justicia, apártese ahora tu ira y tu furor de sobre tu nación, y tu santo monte, porque a causa de nuestra desobediencia y por la maldad de nuestros antepasados y gobernantes tu pueblo hoy es oprobio de los impíos y zarandeado por las tinieblas.
Elohim, Dios de las venganzas muéstrate, porque Tú eres el Juez del mundo y abogado de los justos, levántate contra los soberbios y orgullosos y dales conforme a sus obras. ¿Hasta cuándo los impíos se saldrán con la suya? Todos ellos son insolentes y altaneros, son unos fanfarrones que se creen grandes y fuertes sin Ti, por eso Oh Dios, ellos destrozan a tu pueblo y humillan a los justos; matan al pobre, a la viuda y al campesino, creen que Tú no los ves y que estás tan ocupado que no te das cuenta.
Pero esta gente torpe debe entender, ¿acaso no habrá de oír el que hizo los oídos? Y ¿acaso no ha de ver su maldad el que ha formado los ojos? ¿acaso no ha de castigar el que corrige a las naciones? ¿y acaso no ha de saber Aquel que instruye en sabiduría al hombre? ¿Acaso no ha de castigar el Todopoderoso que corrige a las naciones? ¿Y acaso no ha de saber el que instruye en la ciencia al hombre? El SEÑOR nuestro Dios sabe que el hombre no sabe sino hacer el mal y cometer tonterías; por eso te pedimos Dios y SEÑOR de esta nación, instruye, corrige y disciplina a cada uno como Tú bien lo sabes porque escudriñas los corazones.
Ahora pues, SEÑOR nuestro, oye la oración de tus siervos y los ruegos que hacemos delante de Ti; pues feliz es aquel a quien tu corriges, danos tus enseñanzas para que respiremos tranquilidad en esta tierra bendita de Colombia, mientras al malvado se le prepara su fosa; Tú, amado Dios no abandonarás a tu pueblo ni dejarás solos a los tuyos; por amor a tu nombre has justicia en los tribunales y en los sectores del gobierno para que los hombres honrados se multipliquen y se reduzca la injusticia y la corrupción; solo Tú Dios omnipotente te puedes levantar para defendernos de tanta locura gubernamental y para que no se dicten leyes impías en contra de tu pueblo, los pobres y los necesitados; que tu amor y tu misericordia vengan a ser nuestra ayuda, en medio de las preocupaciones que se agolpan en medio de esta tierra, danos consuelo y libertad para que nosotros proclamemos tu gloria.
Tú eres Dios santo y no puedes ser amigo de jueces injustos, los cuales se venden, actúan mal y contradicen tu ley y tus principios, y quienes conspiran solo para su provecho y condenan al inocente; pero tu Dios santo y fuerte, eres nuestro refugio, la roca firme donde me siento seguro, y la mano poderosa que nos defiende; tu SEÑOR harás que los malvados sean destruidos por su propio pecado, Tú mismo los destruirás.
Abba Padre, en el nombre de Jesucristo, haz que tu rostro resplandezca sobre tu nación, sobre tu remanente en este país. Inclina, oh Dios mío tu oído, y oye; abre tus ojos, y mira nuestra angustia, y la nación sobre la cual tu nombre es invocado, porque estamos elevando nuestros ruegos confiados en tu justicia y la muchedumbre de tus misericordias. Oye, oh SEÑOR, Dios nuestro perdónanos; presta oídos a nuestros ruegos, haznos justicia y no te tardes, por amor a ti mismo, Dios nuestro, porque estamos invocando tu nombre en esta nación y en medio de tu pueblo, líbranos y danos tu libertad, en el nombre de Cristo Jesús.
No permitas que los ataques del gobierno y la gente impía continúen; Ayúdanos conforme te pedimos en oración y ayuno en tu presencia ¡oh Dios! Que seamos santos en Ti y jueces contra toda maldad para impedir que las tinieblas y sus instrumentos sigan robando, que no haya más asesinatos y no haya más vandalismo, corrupción ni destrucción en nuestro país, en el nombre de Jesucristo, así sea, Amén. Oración basada en Daniel 9 y Salmos 94.
Ustedes den a cada uno lo que le deben: paguen los impuestos y demás, pagos a quien corresponda, y den respeto y honra a los que tienen autoridad delegada en Dios. Romanos 13:7.
Lic. MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino.
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