Seguidores. Indica que te gusta

24 feb 2019

ORAR ES PODER TRANSFORMADOR Y RESPUESTA


ORAR ES PODER TRANSFORMARDOR Y RESPUESTA 

En Cuanto a mí, que el Señor me libre de pecar contra Él dejando de rogar por ustedes. Antes bien, les enseñaré a comportarse de manera buena y recta, 1 Samuel 12:23.
Oren por nosotros, que estamos seguros de tener conciencia tranquila, ya que queremos portarnos bien en todo. Pido especialmente sus oraciones para que Dios me permita volver a estar pronto con ustedes, Hechos 13:18-19.
Como hijos de Dios nacidos de nuevo en Jesucristo, tenemos poder transformador si echamos mano de las armas espirituales que Dios nos ha equipado en su palabra; la oración es fundamento esencial en nuestra vida espiritual; la oración dirigida al Padre en el nombre de Jsucristo y de acuerdo a su voluntad es el primer medio relacional con nuestro Hacedor; cuando suplicamos y hablamos con El espontáneamente, estamos orando, cuando rogamos por otros, estamos intercediendo, conscientes de la realidad de guerra que enfrentamos y la eternidad que viviremos. Una espiritualudad conectada al reino de Dios nos permite crecer en dependencia y gobierno de Dios en buscando su reino y su justicia y todo lo demás será añadido, Mateo 6:33. Interceder es una bella forma de ser usados por Dios a favor de otros.
Mientras oramos reflexionamos y pensamos lo que decimos, esto nos permite someter y amoldar nuestra voluntad a la del Eterno para pedir como conviene bajo la unción del Espiritu. La oración eleva nuestros pensamientos humanos para unirlos a los pensamientos divinos demostrando nuestra confianza en que El es una realidad viva y eterna mientras nosotros somos temporales, aprendemos humildad y aclaramos que nada bueno alcanzaremos por nuestro propio esfuerzo que es individualista y mezquino, por lo tanto necesitamos del Todopoderoso Dios para transformar nuestra vida y cambiar la atmósfera que nos rodea con las instrucciones, consejos, mandatos, advertencias y armas espirituales que tenemos en El Manual de Vida dado por el Padre. Somos ramas del Gran Árbol y dependemos del alimento de su sabia gloriosa, Juan 15:5.
Orar es guerrear, interceder, confesar promesas, cantar y adorar en el Espíritu confesando versiculos de advertencia y sentencia contra todo mal, son armas de guerra que impactan la atmosfera y conmueven el mundo espiritual, son armas vitales del cristiano todo en el nombre y poder de Jesucristo invocando su sangre, asi siempre obtendremos respuesta y veremos maravillas, milagros y prodios; nuestra responsabilidad es actuar en fe y tocar el corazón del Padre para que su mano se mueva bendiciendo, liberando, sanando, restaurando, protegiendo, renovabdo y transformanado ambientes, situaciones, personas y hasta impactando familias y naciones, porque hay peligro y ataque de las tinieblas. Nuestro ministerio es sacerdotal por ser redimidos y justificados en la sangre del Cordero y en Abba Padre somos sus atalayas, Porque los ojos del Eterno están sobre los justos, y sus oídos atentos a sus oraciones, 1 Pedro 3:12.
Aunque nuestro Creador conoce de manera exacta y pormenorizada toda nuestra vida, como Padre  nuestro, Él desea que le hablemos y le contemos todo con corazón abierto y espontáneo. Él obra ante nuestras oraciones y todo yugo y barrera se rompen con el poder de su mano y su palabra. Jesucristo se refirió a la oración cuando dijo: Todo aquel que pide, recibe; el que busca,  halla; y al que llama, se le abrirá, Mateo 7:8.
Nuestro Salvador rompió el velo y nos abrió libre acceso al Padre, estableciendo una continua  relación personal, familiar y social renovadora en los cielos y en la tierra; una vida espiritual conectada a Dios nos ayuda a librar nuestras batallas y nos afianza en la fe, para derribar gigantes, potestades y grandes muros e impedimentos de maldad, porque a un corazón contrito y humillado, Dios no desprecia, Abba Padre nos habla cuando escudriñamos su palaba, y nosotros cuando oramos le hablamos a El; Él presta particular atención a cada uno de sus hijos, Y antes que clamen, responderé YO; mientras aún hablan, YO habré oído. Isaías 65:24. Tenemos responsabilidad en el cambio de la atmósfera y la transformacion de los tiempos; ¡hacemos nuestra parte, Dios hace lo suyo! No tenemos excusa.
Dios nos hizo semejantes a El, por lo tanto ejerzamos autoridad y poder haciendo lo que tenemos que hacer delante de Dios para que haya el impacto espiritual  que esperamos sobre las vidas, las familias y las naciones a la manera del Creador y Salvador. Nuestro sometimiento, rendición y humillación al Eterno hace que las tinieblas cedan y huyan; todo nuestro ser se descarga y nuestro corazón se desarma del yo viciado fortaleciendo nuestra nueva naturaleza en Cristo; la presencia de Elohim se agranda en nosotros, haciéndonos gigantes de la fe y luminares contra las tinieblas, en la realidad del Dios vivo, soberano y hacedor de maravillas ante nuestros ojos, Y esta es la confianza que tenemos en YHWH, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, Él  nos oye. Y si sabemos que Él nos oye en cualquier cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho, 1 Juan5:14-15.
Es urgente ser verdaderamente espirituales guerreros y soldados que vigilan en la linea de batalla como nunca antes, es ahora, es ya, continuamente y cada vez que respiramos; nuestra vida espiritual y el uso de las armas deben ser parte de nuestro caminar duario, guardando nuestra alma, dando fruto, renovados y mejores cada día en 7n continuo cambio de stmosfera y transformacion del ambiente en el cual viv8mos y nos movemos, haciendo frente al ataque oscuro, los momentos complejos actuales, proféticos y dramáticos que vive la humanidad y la tierra para que lo que parece imposible se haga posible en Dios y nuestro compromiso como hijos y discipulos seguidores del Maestro. Porque la fe agrada a Dios y llama las cosas que no son como si ya fueran, Romanos 4 y Hebreos 11.
Es un privilegio ser parte de las vidas  transformadas, familias unidas y naciones llenas de la gloria de Dios, aunque haya enemigos que obstaculicen la obra, vestimos la armadura de guerreros en la presencia del Comandante en Jefe para enfrentar las duras pruebas, los momentos amargos y vencer la traicionera tentación asidos de su mano. Lo crucial de todo esto es obedecer, ser santos, mansos y humildes de corazón, en su perfecta, buena y agradable voluntad, esto sí que tiene poder transformador de la atmósfera terrenal, evidenciando cambio celestial en Jesucristo, Enséñame a hacer tu voluntad, porque Tú eres mi Dios; tu Buen Espíritu me guie a tierra firme, Salmos 143:10.
Todos tenemos las mismas 24 horas, y tenemos akgo para bendecir, seamos siervos útiles puesto que vivimos momentos de cruda maldad, amenazas y peligros latentes porque la humanidad ha escogido hacer lo suyo y no se sujeta ni obedece a Aquel que nos amó y nos sigue amando; honremos a Dios, dejemos de pensar y fabricar nuestros propios planes, que sea Dios quien marque nuestro derrotero mientras oramos,  intercedemos, ayunamos, usamos nuestras armas y vivimos la autoridad y el poder espiritual con que el Creador del universo nos equipó, Y cuando te hayan sucedido estas cosas, haz lo que te viniere a la mano, porque Dios está contigo. 1 Samuel 10:7. ...Según tus fuerzas, porque no hay actividad, ni propósito, ni conocimiento de sabiduria después de la muerte. Eclesiastés 9:10..
Aprovechemos cada momento que podamos orando y clamando, activos espiritualmente por todo lo que está sucediendo entre la gente, en el mundo, los países, los gobiernos y la corteza terrestre; necesitamos con urgencia impactar los aires para que haya sanidad, liberación, despertar y avivamiento espiritual. Abandonemos el sueño, la pereza, la inercia y la apatía, seamos ese cordel de tres dobleces que impide rupturas y grietas. Uno solo puede ser vencido, pero dos podrán resistir mejor. Además la cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente, Eclesiastés 4:12. ¡Señor, que venga tu reino y que se haga tu voluntad aquí en la tierra como en el cielo! Que nuestra espiritualidad santa transforme vidas, renueva la Iglesia, despierta naciones y cambie la atmósfera terrenal y sea el Creador nuestro Gobernante, Rey, SEÑOR y Dios. Oremos todo el tiempo, es nuestra tarea.
Cuando oremos:
  1. Sometamos la voz del ego-yo a la Voz del Eterno, Gálatas 2:20
  2. Silenciemos la voz del mundo, con la palabra m predicada y enseñada, 1 Juan 2:15.
  3. Acallemos la voz de satanás con la palabra de Dios vivida y confesada, Santiago 4:7.
  4. Escuchemos la voz del Espíritu Santo y no la de los extraños, Romanos 8:26.
  5. Guardemos silencio cuando Dios habla y oremos en el Espíritu porque Él coloca el querer como el hacer en nuestro corazón, Filipenses 2:13.
Perseveren en la oración, velando en ella con acción de gracias, Colosenses 4:2 y Santiago 5:13.
Mg. MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino.