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13 ene 2017

LECCIÓN #9-LA BIBLIA-DISCIPULADO A LAS NACIONES




9. MANUAL Y GUÍA MÁXIMA DEL BUEN CIUDADANO

Toda la Escritura es inspirada por Dios, útil para enseñar; para redargüir, para corregir; para instruir en justicia, con el fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra, 2 Timoteo 3:16-17.

Se ha hablado y se sigue hablando acerca de la Biblia, para muchos es un enigma, para otros es un invento humano, para más de uno, un libro como cualquiera, para los intelectuales del mundo es un conjunto de escritos que manipulan a la gente para volverlos tontos, pero para los verdaderos hijos de Dios, nacidos de nuevo en Jesucristo, la Biblia es la palabra de Dios, es definitivamente única e irremplazable para que podamos andar por la vida con fe, libertad y seguridad.

El Eterno Dios Creador nos dejó sus instrucciones para aconsejarnos, para darnos sabiduría, para animarnos cuando estamos tristes, para consolarnos cuando  lloramos, para conocer a Dios, para enseñarnos a adorarlo y para proveer esperanza en tiempos de duda y para darnos deleite en momentos de gozo y agradecimiento, la palabra de Dios tiene poder para edificar vidas, cambiar corazón y salvar almas.

Todo productor y creador de un invento, emite un manual y guía para los que se benefician de su producto, del mismo modo el Autor de la vida y Creador del universo, dejó la guía perfecta para todos los que quieran creerle y seguir sus instrucciones.

La biblia es el manual y guía máxima de vida, instrucción y revelación de Dios dada a los seres humanos para hacerlos obreros aprobados y ciudadanos del cielo. Dios dejó este manual de vida para que la raza humana llegue a ser un buen ciudadano en la tierra y fiel servidor del Reino de Dios, Filipenses 3:20-21.

Biblia viene del griego biblos que significa libros, su nombre se desprende del antiguo puerto fenicio que llevaba ese nombre, por allí llegaba el papiro importado desde Egipto para hacer los manuscritos antiguos. El tema principal de la biblia es la redención de los seres humanos y el personaje central es Jesucristo. Fue inspirada por el E.S. para nuestra edificación, santificación y conocimiento de Dios.

La biblia fue escrita por más de 40 autores en diferentes estados de ánimo, pero iluminados por Dios mismo a lo largo de 60 generaciones, hombres de todas las clases sociales, incluyendo reyes, campesinos, profesionales, pescadores, poetas, estadistas, eruditos, etc., y se le conoce como las Sagradas Escrituras o palabra de Dios; consta de 66 libros en tres idiomas: Arameo, Hebreo y Griego, fue creada en diferentes épocas y lugares, Porque es Dios, por su bondadosa voluntad, quien hace nacer entre los seres humanos los buenos deseos y quien ayuda a llevarlos a cabo, Filipenses 2:13. Parafraseado mío

La biblia está compuesta por el Antiguo Testamento (AT) con 39 libros y el Nuevo Testamento (NT) con 27 libros. El AT narra la historia del pueblo de Israel y el tratado de Dios con ellos para nuestro ejemplo; el NT relata la vida de un Hombre, Jesucristo, enviado por el Padre para salvar a la humanidad confirmando lo profetizado en el AT con respecto a Él.

Los textos bíblicos cubren un período aproximado de 1.600 años y escritores de distintas organizaciones y grupos de su tiempo. A pesar de todo esto, la biblia guarda una unidad temática donde el Autor principal es Dios. Él inspiró a todos esos escritores haciendo reflexionar y transformando a quien la lee, la estudia, la medita y la pone en práctica. La biblia reforma de adentro hacia afuera y hace de todos los que la atesoran, nuevas personas. La biblia es la guía máxima y manual del triunfador que hay en todo hombre con corazón sensible a su Creador.

Los libros del Canon sagrado se clasifican en: Pentateuco (Génesis a Deuteronomio); Históricos (Josué a Ester); poéticos (Job a Cantares) y proféticos, compuesto por profetas mayores (Isaías a Daniel) y profetas menores (Oseas a Malaquías) que completan 39 libros en total. El Canon o regla sagrada se ha tomado para proveer una lista autorizada de los libros pertenecientes tanto al AT como al NT.

Los primeros cinco libros del AT fueron escritos por Moisés, se cree que alrededor de 1.440 a.C., llamado el Pentateuco: Génesis es el libro de los orígenes porque habla de la creación, el pecado, la redención, el hombre y la nación escogida por Dios; Éxodo narra la liberación del pueblo de Dios, de la esclavitud de Egipto, y allí les da la ley; Levítico enseña acerca de las leyes sacerdotales para la santidad y la adoración mediante el sacrificio y la purificación; Números muestra la constante desobediencia del pueblo de Israel que vagó errante por el desierto durante 40 años, y Deuteronomio, llamado la segunda ley porque Dios le recuerda toda la ley  al pueblo, narra los grandes discursos de Moisés para prepara a la  nación de Israel en su entrada a la Tierra Prometida. Los siguientes doce (12) libros del AT, llamados históricos, fueron escritos entre 1100-600 a.C., aproximadamente; describen las relaciones de Dios con su pueblo, la nación hebrea o pueblo judío y son: Josué, Rut, 1 y 2 de Samuel, 1 y 2 de Reyes, 1 y 2 de Crónicas; Esdras, Nehemías y Ester.

Los cinco libros siguientes, llamados poéticos describen a manera de poesía y cánticos la grandeza de Dios y su trato con los hombres. Son Job, Salmos, Proverbios, Eclesiastés y Cantares. Seguidamente están los cinco libros de los Profetas mayores: Isaías, Jeremías, Lamentaciones, Ezequiel y Daniel; los últimos doce, los de los profetas menores son los más cortos: Oseas, Joel, Amós, Abdías, Jonás, Miqueas, Nahum, Habacuc, Sofonías, Hageo, Zacarías y Malaquías.

Por su parte el NT o Nuevo Pacto, revela el actual y vigente pacto del Eterno con toda la raza humana, por medio de Jesucristo Redentor de todo ser humano. En el NT encontramos la vida hermosa de Jesús de Nazaret. Él es el principio y origen de un estilo de vida santa en la tierra, en medio de todos los altibajos que da la vida, porque solo Jesucristo es el Camino de salvación; el NT consigna instrucciones de sabiduría para la vida, porque es el Manuel de Dios para sus hijos en el cual Él mismo se nos revele y se da a conocer.

Los libros del NT son 27; los primeros son Históricos conformados por los Evangelios de Mateo, Marcos, Lucas, Juan y los Hechos de los Apóstoles que muchos llaman Hechos del Espíritu Santo. Los 21 libros siguientes son las Cartas o Epístolas Paulinas y las Epístolas Generales a Saber: Romanos; 1 y 2 de Corintios, Gálatas, Efesios, Filipenses, Colosenses, 1 y 2 de Tesalonicenses, 1 y 2 de Timoteo, Tito, Filemón, Hebreos, Santiago, 1 y 2 de Pedro, luego 1, 2 y 3 de Juan, Judas y el libro Profético de Apocalipsis.

La biblia es única en su continuidad y en su circulación a través de los siglos al ser el libro más vendido y solicitado; única traducida a todos los idiomas y hoy sigue siendo traducida en muchos dialectos y lenguas. Es el libro más leído, estudiado, analizado y criticado; es única en supervivencia en medio de la crítica y la persecución, única en sus enseñanzas y ejemplos de vida; única en su influencia histórica sobre la demás literatura universal, pues se habla de ella y se le cita en miles de textos. Es única en su precisión histórica y sus profecías cumplidas, llegando a ser de satisfacción para el erudito.

La Palabra de Dios siempre a la mano. Hebreos 4:12;
La biblioteca divina y eterna, Mateo 24:35
La voz de Dios, que se deja oír en todo tiempo, Salmos 119:105;
El Manual de Vida e instrucción del creyente, 2 Timoteo 3:16-17;
Consolación de Dios en tiempo de angustia, Isaías 41:10-15;
El máximo tesoro de autoridad divina sobre el mal, Lucas 10:19;
Único libro que nos confronta con el pecado, nos corrige y lleva al cambio, 2 Timoteo 3:16.
Único libro que forma en principios, crea virtudes y origina valores, Proverbios;
La Máxima guía de sabiduría para una vida con propósito, Salmos 119:30, Prov. 21:21
Alimento para el alma, salud para cuerpo y luz al espíritu, Mateo 4:4 y 1 Pedro 2:2;
Posee el fundamento de la fe y la verdadera paz, Juan 16:33; 

Los escritos de Dios que iluminan nuestro camino al bien-estar, Salmos 16:11;
Sabiduría de Dios para hacernos prudentes, Salmos 119:130, Mateo 7:24-25;
La única que conduce al camino de libertad verdadera, Juan 8:31-32;
Endulza y alegra nuestra vida diaria aún en medio del dolor, Salmos 119:103;
El faro en el Camino de salvación y vida eterna, Juan 5:24, Proverbios 8:35.
La Revelación del Dios  Padre, Hijo y Espíritu Santo, Juan 1:1-28, 5:39, Isaías 53.

La biblia es poder cuando la ponemos en obra, cobra vida ejerciendo impacto en el corazón y el alma, Hechos 4:12; hoy días es imperativo y sabio mostrar con responsabilidad la palabra de Dios viviéndola personalmente, adoptando sus parámetros de moralidad en las relaciones humanas para atraer a muchos a Cristo. A continuación se surgieren algunas formas de profundizar la biblia para recordarla y aplicarla:

Escuchándola:   Oírla en las enseñanzas de la predicación, Romanos 10:17.
Leyéndola: De manera continua, diaria y tomando apuntes, Deuteronomio 17:19.
Estudiándola: Analizar sus enseñanzas y ejemplo dirigido por un tutor, Proveedores 2.
Meditándola: Dándole vueltas en nuestra mente, haciéndola una forma de vida, Josué 1.
Memorizándola: Recordándola para confesarla y echar mano de sus promesas en momentos cruciales de nuestra vida, como arma de guerra contra el enemigo, Salmos 119:11.
Obedeciéndola: Prestando atención a los mandatos de Dios, Deuteronomio 28:1-14, Mateo 7:2

Viviéndola: Hacer y obedecer la palabra de Dios, Romanos 2:13, Santiago 1:22-25, y
Compartiéndola:  Dándola a conocer con hechos, palabras y estilo de vida, Proverbios 18:16.

Debemos leer la biblia para ser sabios, Salmos 19:7; creerla para ser salvos, Juan 5:39; practicarla para ser santos, Efesios 5:26; apropiarla para ser sanos, Salmos 107:20; confesarla para ser libres, Efesios 6:17 y enseñarla para cumplir la Gran Comisión, Éxodo 18:20 y Tito 1:19.

Somos verdaderos cristianos y discípulos del Señor si tenemos convicción firme de la biblia en la práctica, Santiago 1:22-25. Pero sean hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándose a ustedes mismos; porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que mira su rostro en un espejo. Él se considera a sí mismo y se va, luego olvida cómo era. Más el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oídos olvidadizo, sino hacedor de la obra, este será bienaventurado en lo que hace. (Negrillas de la autora).

La palabra de Dios no ha sido dada para aumentar el intelecto, sino para adquirir sabiduría en el camino de perfección de nuestro corazón buscando alcanzar el carácter y la estatura de Jesús el Maestro de maestros. Todo el que escucha mi enseñanza y la sigue es sabio, como la persona que construye su casa sobre una roca sólida, Mateo 7:24, NTV. Y Jesús dijo: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda la palabra que salga de la boca de Dios, Mateo 4:4.DHH.

Lo que nos hace personas de calidad, puras, y sabias no es todo lo que oímos, leemos o estudiamos, es la palabra de Dios puesta en práctica en nuestro andar diario, llevándola de los espiritual a lo natural. ¡Oh, cuánto amo yo tu ley! Todo el día es ella mi meditación, Salmos 119:97. BDLA.

En el AT se dice que el pueblo recibía la palabra en las asambleas, en las celebraciones de sus fiestas solemnes quizá no tan frecuente como nosotros, pero dedicaban tiempo en recordar y meditar en sus enseñanzas escriturales para luego compartirla con la familia y los vecinos. Esta forma de aprendizaje pasaba de generación en generación. Esdras, trajo la ley delante de la congregación…leyó en el libro…desde el alba hasta el mediodía…en presencia de todos,,; y los oídos de todo el pueblo estaban atentos al libro de la ley, Nehemías 8:1-3.

La palabra nos ha sido dada para producir en nosotros amor y santidad, para que seamos diferentes al común del mundo, Hebreos 13:20-21. Así que si la palabra de Dios no está produciendo fruto en nuestra vida, lo único que estamos haciendo es ser entrenados y no edificados ni formados; y esa no es la voluntad divina. Dios no quiere cabezones intelectuales, sino corazones entendidos, rendidos y dependientes de su amorosa soberanía; aptos para servir y vivir a plenitud en el ejemplo de Cristo; Dios tampoco quiere que nos saturemos de su palabra mecánicamente, sino que nos transformemos en ella cotidianamente para mostrar su cariño y portando su presencia con afecto a todo lugar.

Sería conveniente preguntarnos regularmente: ¿Qué está trayendo la palabra de Dios a mi vida en este tiempo? ¿Qué cambios necesito realizar para que se haga realidad en mi esta verdad de Dios? No te distraigas con otras palabras que no sea a revelada por el Espíritu Santo, porque solo la palabra que sale de Dios debe marcar tu vida. Busca el consejo de Dios mediante el estudio juicioso de la biblia. Apóyate en personas con las cuales puedas estudiarla regularmente. No hace falta que alguien sea Phd, es voluntad, tiempo, disposición y perseverancia lo que necesitamos para conocer a Dios a través de su palabra, la biblia.

Como peregrinos que comparten un mismo camino, dialoguemos, animémonos y apoyémonos mutuamente con la impartición mutua en la meditación de las Escrituras. Recibamos con mansedumbre la palabra que otros nos comparten y cultivemos un corazón enseñable, dispuestos a ser corregidos, moldeados y tratados, por el mejor Padre. Recobremos el sentido de pensar y meditar en las Escrituras; meditar implica volver el pensamiento una y otra vez sobre lo que ella nos dice, enseña y advierte, Por esto, despojémonos de toda inmundicia y de la maldad que tanto abunda, para que podamos recibir con humildad la palabra sembrada en nuestros corazones, la cual tiene poder para salvarnos, Santiago 1:2.

Cuando vivimos la palabra se produce una revolución en el interior del yo, psique, alma o corazón, nos hacemos servidores sencillos y afectuosos incondicionales, aunque a algunos les parezca “poco razonable en algunos casos”, Deuteronomio 29:29. Un aspecto vital al leer, estudiar y meditar en la palabra, es encontrar ayuda, revelación y dirección del ES cuando oramos con los textos bíblicos.
Cuando oramos hablamos con Dios, cuando leemos la Biblia, Dios habla con nosotros, Mateo 4:4. “No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.” En esta porción hay dos tipos de alimento para el ser humano: El pan como alimento físico y la Palabra de Dios como alimento espiritual para fortalecer y santificar el alma. Así como necesitamos alimentos tres veces al día para vivir, igualmente debemos alimentar el espíritu y el alma con la Palabra de Dios para que cada día Dios complete su obra en nosotros. “…Sed hacedores de la Palabra y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos” Santiago 1:22 y Filipenses 1:6.

Establezca prioridades, aparte tiempo para leer y meditar en la Biblia, ore al leerla, pida sabiduría, dirección y revelación del ES para entender y hacer lo que Dios quiere que haga. Por experiencia personal se que no hay nada que pueda cambiar nuestro ánimo, salud y circunstancias, como la palabra de Dios confesada y vivida, Hebreos 4:12. A continuación se consignan algunas sugerencias para asimilar la palabra de Dios en nuestra vida 
Mediante la observación panorámica, un solo libro a la vez, leyéndolo varias veces, tomando nota, reflexionando y aceptando las advertencias y promesas que están allí; acudiendo a otras versiones y una concordancia bíblica para ampliar la comprensión del texto.
Buscar la interpretación y comprensión de ella con la ayuda del Espíritu Santo. Él es el mejor maestro guía que da revelación al corazón. Ayudarnos con otros libros cristianos como Diccionarios Bíblicos, Manuales, Atlas, Enciclopedias, Comentarios y algunos libros seculares referentes a biografías o  estudio de personajes y temas bíblicos.
Aceptación y aplicación práctica. Leer la Biblia con corazón dispuesto para recibir de Dios y confrontándote para que se produzcan cambios radicales y visibles en tu carácter y manera de vivir para hacerte ejemplo de ciudadano con vida digna de imitar. ¡Aleluya! 
Toma notas, haz apuntes para un mejor aprendizaje y apropiación de la Palabra. En una pequeña libreta o taco de papel, anota por una cara el versículo bíblico y al respaldo el contenido bíblico y/o el autor a que corresponda; léelos, medítalos, analízalos, recuérdalos durante el día, ponlos en práctica, compártelos y confiésalos en voz alta en momentos claves y precisos de tu vida diaria según las circunstancias por las cuales estés pasando. ¡Te aseguro que verás la gloria de Dios! No pases ningún día sin buscar en el “Manual del fabricante”, desconocer el contenido del mensaje Bíblico es caminar a ciegas por la vida, y “Una dosis diaria de la Biblia, mantiene al diablo alejado de ti”. 

“No te preocupes por lo que no entiendas de la Biblia. Preocúpate por aquello que sí entiendes, pero no lo aplicas en tu vida.”- Corrie Ten Boom.



REFUERZO 9- EL MANUAL Y GUÍA MÁXIMO DEL BUEN CIUDADANO

1. ¿Cómo aprendió y habló Pablo las cosas de Dios?  Hechos 9:6, Gálatas 1:11-24,1 Corintios 2:6-       13

2. ¿De qué manera nos entregó Dios su Palabra? 2 Pedro 1: 20- 21.________________ 

3. ¿Qué mandó Dios hacer a los profetas? Jeremías 30:1-2  e Isaías 30:8? __________

4. ¿Por qué podemos estar seguros en cuanto a la Palabra de Dios? _______________

a.     Proverbios 30:5.____________________________________________________

b.     Salmos 111:7-8. ____________________________________________________

c.     1 Pedro 1:24-25. ___________________________________________________

5. ¿Cuáles son algunos de los beneficios que nos proporciona la Palabra de Dios?

a.     Salmos 119:105.___________________________________________________

b.     Juan 15:3. _______________________________________________________

c.     Jeremías 15:16.__________________________________________________

d.     Salmos 119:165. __________________________________________________

e.     Salmos 119:42. ___________________________________________________

6.  ¿Qué nos ha dado Dios con su Palabra?  2 Pedro 1: 3-4?____________________
  
7.  ¿Cómo demostró Cristo el poder de la Palabra? Mateo 4:3-11________________

8. ¿Qué es lo que lleva a una persona que caiga en error y pecado? Mateo 22:29.____
9. Cómo se describe la Palabra de Dios en las siguientes citas bíblicas.
a.     Salmos 119:103 ___________________________________________________

b.     Efesios 6:17______________________________________________________

c.     Jeremías 23:29. __________________________________________________

d.      Hebreos 4:12 (Memorizar)__________________________________________

10. ¿Qué sucederá a quienes rechacen a Jesucristo y su Palabra? ______________

a.     Juan 12:48 _____________________________________________________

b.     Proverbios 13:13 ________________________________________________
11. Si permanecemos en su Palabra ¿qué nos promete Dios? Juan 14:23. ________

12. ¿Qué puede hacer la Palabra de Dios en la vida de una persona?
    
a.     2 Timoteo 3:15.______________________________________________
b.     Santiago 1: 21. _____________________________________________

13. ¿Cómo puede una persona limpiar su vida? Salmo 119:9. ________________

14. ¿Qué espera Dios a través de su palabra en la vida de un cristiano? 2 Pedro 3:18.

15. Describa el poder de la palabra de Dios en el creyente. Juan 8:31-32 __________

16. Mencione la clase de corazón que escucha y aplica la palabra de Dios. Lucas 8:15.

17. Explique lo que debe hacer un predicador al proclamar la Palabra, Nehemías 8:8.

18. Mencione las promesas y advertencias del Señor en los siguientes textos bíblicos:

a.     Juan 15:11 y 16:33________________________________________________

b.     Apocalipsis 22:18-19 _____________________________________________

19. Anote las razones por las cuales debemos leer cada día la Biblia. Deuteronomio 17:19.

20. Explique Apocalipsis 1:3.____________________________________________

21. ¿Cómo debemos buscar la Palabra? Proverbios 2:4 ______________________

22. ¿Cuál debe ser nuestra meta y actitud al estudiar la Palabra? 2 Timoteo 2:15. 

23. Escriba al frente de cada verso lo que Dios quiere que hagamos con su Palabra.

  1. Deuteronomio 11:18.____________________________________________

  1. Proverbios 7:3b._______________________________________________

24. ¿Cómo nos ayuda la palabra contra la tentación? 1 Corintios 10:5. _________

25. Explique Colosenses 3:16._________________________________________

26. Escriba las bendiciones de meditar en la Palabra de Dios. Salmos 1:2-3 y 119:104.

27. ¿Cómo nos ayuda la palabra de Dios? 1 Pedro 3:15. ___________________

28. ¿Qué dijo Cristo acerca de las Escrituras? Lucas 24:44. _________________

29. ¿Cómo usará Dios su Palabra al final del tiempo?  Lucas 11:51 y Mateo 23:35.