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46 SALMOS 46
DIOS
NUESTRA PROTECCIÓN Y FORTALEZA
Solo tenemos una fuente verdadera y suficiente de seguridad, que
es Dios, y este es un texto al cual cientos de hombres y mujeres de fe
recurrimos continuamente por ayuda en momentos de dificultad y de prueba; es
otro gran canto de liberación y victoria entonado por Israel cuando cruzaron el
Mar Rojo, Éxodo
15:21, fue la celebración de una gran victoria después de cruzar el mar.
1. Dios, única
seguridad verdadera, Dios es
nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. Por
tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida y se traspasen los montes al
corazón del mar; aunque bramen y se turben sus aguas, y tiemblen los montes a
causa de su braveza. Salmos 46:1-3.
Cuando hay guerras, los gobiernos pueden fallar, pero nuestro
Padre celestial acudirá en nuestro rescate ante los desastres y amenazas que vengan
en contra de nuestras vidas y nuestros hogares; cuando estamos enfermos o somos
traicionados, Dios será el único en el que podremos tener confianza para hallar
cuidado y sanidad.
El mundo con todo su avance científico y su conocimiento no nos
brinda seguridad alguna, en la convulsión del mundo actual, algo que nos pueda
dañar puede suceder en cualquier momento, a menos que nos pongamos en las manos
del Eterno y Todopoderoso Señor del universo, solo Él tiene todo el dominio y
poder para escondernos del mal y darnos vida abundante; la humanidad necesita urgentemente
volverse a Dios, porque solo en Él se puede hallar descanso y seguridad, no
solo para el alma, sino también alivio para el cuerpo y paz para el espíritu.
Este salmo es una eterna y magnifica palabra de confianza en Dios
y fe en su palabra, necesitamos continuamente su liberación milagrosa de los
enemigos que continuamente se levantan en contra de la vida y la paz; esos espíritus
adversarios que usan personas sin Dios para causar estragos y dificultades a la
sociedad porque el enemigo vino para hurtar, matar, robar y destruir.
Los salmos son los escritos más fuertes en guerra espiritual,
cantos de oración, intercesión, batalla y victoria que todo hijo de Dios debe conocer
y confesar para perseverar mientras esperamos la intervención divina y su
venida gloriosa, porque solo la supremacía de la grandeza del Creador podrá
levantar su mano para aplastar al adversario.
2. Ríos que oxigenan y
producen vida, Del río
sus corrientes alegran la ciudad de Dios, el santuario de la morada del
Altísimos Dios está en medio de ella, no será conmovida, Salmos 46:4-5.
Hay ríos que ahogan y matan, hay corrientes que arrastran y
confunden, pero los ríos de Dios son exclusivos en fluir vida, desde su
santuario brota extraordinario y sobrenatural el río de su gloria vivificante,
sus aguas son salutíferas y son aguas que santifican, Ezequiel
47:1-10.
Los ríos de Dios son llenura y presencia de su Santo Espíritu que fluye para proveernos
aire que oxigena nuestras cargadas almas. Si estamos en las manos del Alto y
Sublime, estaremos seguros en su moradas de gloria, por lo tanto no seremos
sacudidos de los recios vientos ni los vendavales de la vida terrenal que
continuamente amenazan con destruirnos.
3. Su cuidado es permanente, Dios dará
ayudará al clarear la mañana, Jehová de los ejércitos está con nosotros;
nuestro refugio es el Dios de Jacob, Vs.6b y 7, Él nos cuidará en todo
momento, es una promesa latente de cuidado que el Buen Pastor dedica a su
rebaño, En paz nos acostamos, y en paz dormimos, porque solo el Señor, nos
hace descansar seguros, Salmos 4:8.
Esto nos da seguridad para declarar su amor benefactor y su
misericordia salvadora, Mientras tanto pongamos la mirada
en las cosas de arriba, no en las de la tierra, porque hemos muerto al mundo y nuestra
vida está escondida con Cristo en Dios, Colosenses 3:2. Sus poderosos y
escrutadores ojos, siempre nos observan con tierna mirada, custodiándonos a
cada paso que damos, Salmos 34:15.
4. Dios es soberano, Bramaron las
naciones, titubearon los reinos; dio Él su voz, se derritió la tierra…Venid, y
ved las obras de Jehová que ha puesto asolamientos en la tierra, Salmos 46:6 y
8. Esto
nos habla de la soberanía y autoridad de Dios para efectuar sus juicios y
gobernar su creación, Él ha formado todo con leyes naturales que mueven no solo
el espacio sideral, sino también la naturaleza entera a la voluntad de Él,
aunque muchos intelectuales se lo acrediten solo a fuerzas meramente cósmicas y
naturales, el Creador sigue al mando de su creación.
Este texto es una figura apocalíptica para una sociedad
desordenada, un mundo desviado y confundido y una humanidad que se ha olvidado
de su Creador, una raza que sufre las consecuencias de su pecado; la maldad
hace que la creación gima con dolores de parto; es la mano del hombre la que trae
destrucción y muerte sobre todo lo bueno, perfecto y hermoso que Dios ha creado.
5. Dios es nuestra paz y
libertador, Jehová de
los ejércitos está con nosotros, nuestro refugio es el Dios de Jacob; que hace
cesar las guerras, corta la lanza y quema los carros en el fuego, Salmos 46:7 y
9. El
Gran varón de guerra es nuestro Creador, su liberación es real y segura. Una
vez que Él emite sus juicios y suceden eventos apocalípticos, el resultado
final será triunfo y paz para el justo y honor para el Santo.
Nuestra vida es una continua lucha personal y social que con el
mundo nos oprime el alma y nos enferma el cuerpo; el tiempo corre veloz y nos
exige más de lo que podemos dar, pero hay una batalla más fuerte, la
espiritual, en esa continua lid se suscitan cambios, se producen inseguridades
y se crean temores; todo lo cual nos hace volver a Dios para aferrarnos más a
Él y a su poder amoroso, perdonador y salvador, sin Él nada podemos ni nada
somos, Juan 15:5.
Y confiar en nosotros mismos es un descalabro, debemos depender
totalmente de nuestro Hacedor para dar Pasos
firmes de fe en la toma de decisiones seguras y sabias, Salmos
37:6 y Proverbios 3:5-7. Sin embargo, tenemos poder en nuestra boca para vencer todo lo
adverso, podemos llevar nuestros pensamientos cautivos a la obediencia en
Cristo, tenemos autoridad para derrotar con su palabra todos los temores y
echar fuera todos los dardos de fuego del maligno, Lo que
cada uno habla determina la vida y la muerte; que tiemblen, los que no miden
las consecuencias de sus palabras, Proverbios 18:21.
6. Reposar confiadamente
en Dios, Estén
quietos y conozcan que YO SOY Dios; seré exaltado entre las naciones; enaltecido
seré en la tierra, Jehová de los ejércitos está con nosotros; nuestro refugio
es el Dios de Jacob, Salmos 46:10-11.
Dios es poderoso guerrero que pelea por ti y por mí en medio de
las batallas; tal es su fuerza y su poder a favor de su pueblo que lo enfatiza
dos veces en este salmo Vs. 7 y 14, el
carácter de nuestro Dios es de guerrero violento cuando se trata de defender a
los suyos, por lo tanto no debiéramos temer ante los acontecimientos actuales
porque no peleamos solos, son más los que están con nosotros, y nadie nos podrá
hacer frente en todos los días de nuestra vida.
Dios está de nuestro lado, Él es nuestro refugio, nuestra
fortaleza Él será nuestro auxilio inmediato en la aflicción y el peligro, Su
presencia y su amor son gigantes ante cualquier dolor o lucha que podamos
enfrentar. No tememos lo que el impío umagine que puede hacer; aunque se mueva
la tierra y se agiten las aguas, Nuestro Dios, YHWH Gibbor-Sabaot destruirá
toda maldad y todo plan maligno que se levante contra sus hijos porque Él es
nuestro Padre; Él destruirá a los enemigos de nuestra paz,
Romanos 16:20.
En la hora más oscura cuando el enemigo avanza como inundación de
muchas aguas, Dios dará su voz, rugirá el León de la tribu de Judá y se
derretirá la tierra bajo sus pies para hundir al enemigo, entonces el remanente
santo y fiel cantará alabanzas diciendo: Jehová de los ejércitos está por
nosotros como poderoso gigante y ha vencido al enemigo que no pudo prevalecer
contra el pueblo del Altísimo.
Debemos persevera en oración por una fe fuerte, sólida y arraigada
en nuestro corazón, para que en medio de este mundo lleno de peligros y amenazas,
estemos firmes y confiados bajo las Alas del Aliento de vida, dependiendo
del Guerrero de guerreros, porque nuestra confianza no se forja en nada
perecedero, sino el Eterno Vencedor del calvario. Su grandeza y su poder nos dan
la seguridad, la alegría y la paz necesarias, a pesar de lo que pueda suceder, Juan 14:27, Amén. Con Cristo somos
más que vencedores.
Mg.
MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino.
