ÚLTIMOS TIEMPOS Y SUS ACONTECIMIENTOS
Todo ser humano es como la hierba; y
su grandeza es como las flores; la hierba se seca, y las flores se caen, pero
la palabra de Dios permanece para siempre, 1 Pedro 1:24-25.
Clama a Mí, y YO te responderé, y te
enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces, Jeremías 33:3.
Es
hora, de que los que conocemos al Señor alcemos la voz para traer una palabra
de esperanza y de consuelo a todos aquellos que no conocen a Dios, y hacerles
saber lo que nuestro amado salvador dejó muy claro en su bendita palabra, su
evangelio de vida y salvación, Él habló acerca de estos sucesos, los
acontecimientos nos muestran en que parte de la profecía estamos viviendo.
Ante
tantas tragedias y desastres que están ocurriendo en el mundo habrá muchos
seres humanos hoy en día, que mañana se lamentarán, cuando nuestro Rey Eterno,
el Señor Jesucristo regrese, porque se verán obligados a aceptar que ya es
demasiado tarde para ellos. Cuando tuvieron oportunidad de ser salvos,
ignoraron a Dios y la verdad que Él reveló, estarán del lado izquierdo, del
lado de las cabras, del lado equivocado cuando suene la trompeta final.
Es maravilloso observar la naturaleza que continuamente adora y reconoce a su Creador, dándole ejemplo a los seres humanos que Dios es digno de toda nuestra atención, de todo nuestro amor y reconocimiento: Cantad a Jehová cántico nuevo; cantad a Jehová, toda la tierra. Cantad a Jehová, bendecid su nombre, anunciad de día en día su salvación.
Hay
un huracán más grande y peligroso que Harbey, Irma y María, se llama el pecado,
porque la paga del pecado es muerte, pero el regalo de Dios es vida eterna en
Cristo Jesús, Romanos 6:26. Las consecuencias del pecado son desastrosas, no solo
en el ser humano sino en toda la tierra; solo hay un refugio seguro para el ser
humana y un orden perfecto para la naturaleza, nuestro Señor Jesucristo. Él
quiere salvar a todos los que se arrepienten y abandonan su vida de pecado; es
así como Dios quiere salvarnos del mal, Dios desea que estemos seguros y
tengamos vida eterna, porque no envío Dios a su Hijo al
mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por Él, Juan 3:17.
No rechaces a Cristo, todo lo que está sucediendo en el planeta es consecuencia de que el ser humano le dio la espalda a su Creador y los que lo han conocido se han alejado de Él, pero aún hay esperanza, y si estamos en Cristo, Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. Por lo tanto no temeremos, aunque la tierra sea removida, y se traspasen los montes al corazón del mar; aunque bramen y se turben sus aguas, y tiemblen los montes a causa de su braveza, Salmos 46:1-3.
Es maravilloso observar la naturaleza que continuamente adora y reconoce a su Creador, dándole ejemplo a los seres humanos que Dios es digno de toda nuestra atención, de todo nuestro amor y reconocimiento: Cantad a Jehová cántico nuevo; cantad a Jehová, toda la tierra. Cantad a Jehová, bendecid su nombre, anunciad de día en día su salvación.
Proclamad entre las naciones su
gloria, en todos los pueblos sus maravillas. Porque grande es el Señor, y digno
de suprema alabanza; temible sobre todos los dioses. Porque todos los dioses de
los pueblos son solo ídolos; pero Dios hizo los cielos. Alabanza y
magnificencia delante de Él; poder y gloria en su santuario.
Tributad al Señor, oh familias de los
pueblos, dad a Jehová la gloria y el poder. Dad al Señor la honra debida a su
nombre; traed ofrendas, y venid a sus atrios. Adorad a Jehová en la hermosura
de la santidad, temed delante de Él toda la tierra. Decid entre las naciones;
Jehová reina. También afirmó el mundo, no será conmovido; juzgará a los pueblos
con justicia.
Alégrense los cielos, y gócese la
tierra, brame el mar y su plenitud. Regocíjese el campo, y todo lo que en él
está; entonces todos los árboles del bosque rebosarán de contento. Delante del
creador que vino; porque vino a juzgar la tierra, juzgará al mundo con
justicia, y a los pueblos con su verdad, Salmos 96.
No rechaces a Cristo, todo lo que está sucediendo en el planeta es consecuencia de que el ser humano le dio la espalda a su Creador y los que lo han conocido se han alejado de Él, pero aún hay esperanza, y si estamos en Cristo, Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. Por lo tanto no temeremos, aunque la tierra sea removida, y se traspasen los montes al corazón del mar; aunque bramen y se turben sus aguas, y tiemblen los montes a causa de su braveza, Salmos 46:1-3.
Busca
a Dios, reconoce que sólo Él puede salvarte y darte vida, reconoce que eres un
pecador, Busquen a Jehová mientras pueda ser hallado, llámenlo mientras
aún está cercano, Isaías 55:6. Arrepiéntete y dile: Ten
piedad de mí, oh Dios; conforme a la multitud de tus piedades borra mis
rebeliones. Lávame más y más de mi maldad, y límpiame de mi pecado. Porque yo
reconozco mis rebeliones, y mi pecado está siempre delante de mí. Contra Ti,
contra Ti, solo he pecado, y he hecho lo malo delante de tus ojos…Purifícame
con hisopo, y seré limpio; lávame y seré más blanco que la nieve, porque al
corazón arrepentido y humillado, no despreciarás, Tú, Oh Dios, Salmos 51:1-4, 7 y
17.
No
debemos sorprendernos de los acontecimientos que estamos viendo sobre la tierra
porque todo ya está escrito, Y oirán de guerras y rumores de
guerra; miren bien y no se atemoricen, porque es necesario que todo esto
acontezca; pero aún no es el fin. Porque se levantará nación contra nación, y
reino contra reino; y habrá pestes, y hambres y terremotos en diferentes
lugares. Y todo esto será principio de dolores…Principio de dolores
quiere decir que vendrá algo más fuerte. Pero será predicado este
evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y
entonces vendrá el fin, Mateo 24: 5-7 y 14. Primero debemos predicar y
adorar provocando un avivamiento
permitiendo que el Espíritu Santo nos llene de su fruto y avive sus dones en
nosotros, para que muchos sean salvos.
La
creación está gimiendo, y ninguno estamos exentos de su furia, Porque
sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto
hasta ahora; y no solo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las
primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos,
esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo, Romanos 8:22-23.Porque
habrá entonces gran tribulación, cual no la ha habido, desde el principio del
mundo, hasta ahora, ni la habrá, Mateo 24:21.
Este
es el momento apremiante de que el pueblo de Dios se levante y obedezca la Gran
Comisión que Cristo nos dejó, Esto será ocasión para dar testimonio,
Lucas 21:13, , lo que indica que
debemos andar en santidad, porque El Señor viene por un remanente santo.
Porque aún la tierra lo pide, exigiéndonos obediencia y rendición a Dios, Porque
el anhelo ardiente de la creación es aguardar la manifestación de los hijos de
Dios, porque la creación fue sujeta a vanidad, no por propia voluntad, sino por
causa del que la sujeto a esperanza,; porque también la creación misma será
libertada de la esclavitud de la corrupción, a la libertad gloriosa de los
hijos de Dios, Romanos 8:19-21.
Todo
lo que está aconteciendo ante nuestros ojos es comprobación del escenario
profético y el mundo está a punto de entrar en mayores cambios climático
extremos y modificaciones violentas de las placas terráqueas, eventos que solo
los podremos afrontar a través de nuestro Señor Jesucristo, viviendo para Él y
estando en Él. Porque el Señor mismo con voz de mando,
con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los
muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que
hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para
recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con Él. 1 Tesalonicenses
4:16-17.
¿Por
qué es necesario morir al pecado que combate en los sentidos? Porque
la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios, ni la corrupción
heredará la incorrupción. Aquí hay un misterio, en un abrir y cerrar de
ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán
resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados, 1 Corintios
15:50-52.
Sin
embargo, en medio de tantas cosas tremendas y dantescas que acontecen y
acontecerán, el amor de Dios permanece fiel y su presencia incomparable
alentándonos y fortaleciendo nuestra fe, No se turbe su corazón;
crean en Dios, crean también en Mí. En la casa de mi Padre muchas moradas hay;
si no fuera verdad, YO no se los hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar
para ustedes; Y si YO vuelvo al Padre es para prepararles lugar, porque vendré
otra vez, y los tomaré por Mí mismo, para que donde YO estoy, ustedes también
estén, Juan 14:27.
Todo
nos está impulsando a ser verdaderamente obedientes y ser verdaderos discípulos
de Cristo, Tú pues hijo mio, esfuérzate en la gracia que es en
Cristo Jesús. Lo que has oído de mi ante muchos testigos, esto encarga a
hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros. Tú, pues, sufre
penalidades como buen soldado de Jesucristo, 2 Timoteo 2:1-2. No podemos quedarnos con
los brazos cruzados, es tiempo de orar y actuar al mismo tiempo, clamando,
ayunando y separándonos para Dios, que con su ayuda y dirección pregonemos el
mensaje del Evangelio de la cruz que da vida no solo abundante en esta tierra,
sino vida eterna en el cielo.
Hoy es el momento de salir a las calles, a los parques y a todo lugar de la
tierra, mañana podría ser demasiado tarde, porque tuve hambre, y no
me diste de comer; tuve sed, y me diste de beber; fui forastero, y no me
hospedaste, estuve desnudo, y no me cubriste; enfermo, y en la cárcel, y no me
visitaste, diga leyendo en Mateo 25:42-46.
Dios no solo le habla a su Iglesia, también
Dios le está hablando a los que no tienen a Cristo en su corazón como Señor y Salvador, por favor, no endurezcan su corazón, busquen la gracia y la
misericordia del Creador, antes que sea usted víctima de la furia de la naturaleza,
puesto que cada dia será más frecuente, fuerte y destructivo, El
tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado, arrepiéntanse y crean
en el evangelio, Marcos 1:15.
El
tiempo de la gracia está llegando a su final, HOY podría ser nuestro último
día, ninguno tenemos la vida comprada ni asegurada en esta tierra, quizá mañana
muchos no podrán abrir sus ojos, por eso debemos buscar la gracia, la
misericordia y el perdón de Dios, HOY es el día de arrepentimiento, AHORA es el momento de
que abandones tu vida de pecado y te rindas a Dios buscando su rostro y su presencia, Busquen
a Dios mientras puede ser hallado, búsquenlo ahora que está cercano. Que el
impío deje su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Dios,
porque Él tendrá misericordia, y nuestro Dios será amplio para perdonar, Isaías
55:6-7.
Solo la sangre que Cristo derramó en la cruz del Calvario nos puede limpiar de todo pecado y maldad,
porque
si andamos en Luz, como Dios está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la
sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado, Si decimos que no
tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en
nosotros. Si confesamos nuestros pecados (a Dios)Él
es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad, 1 Juan 1:7-9.
Ningún
ídolo podrá salvarte, sólo Cristo, Y si confiesas con tu boca que Jesús es
el Señor, y crees en tu corazón que Dios lo levantó de los muertos, será salvo.Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para
salvación, Romanos 10:9-10.
La creación no tiene tal espíritu de rebeldía que hay en el corazón humano, la creación se sujeta a su Creador, es por eso que toda
la palabra de Dios, en especial el Salmo 96 nos describe la creación que
estalla en cánticos de alegría por el retorno del Señor que viene a liberarla de la maldad que se ha aumentado sobre la tierra.
La tierra gime porque está bajo maldición debido a la caída del hombre, por eso han venido las tormentas, los huracanes, las inundaciones, los terremotos y el hambre unido a las sequías y los incendios forestales, esto es lo que hará que las personas tomen conciencia de su necesidad de Dios, se arrepientan y lo amen; solo así todo lo torcido se enderezará de nuevo. Voz que clama en el desierto: preparad camino al Señor; enderezad calzada en la soledad a nuestro Dios. Todo valle sea alzado, y bájese todo monte y collado; y lo torcido se enderece, y lo áspero se allane, Isaías 40:3-4. Entonces ¿por qué hemos de atemorizarnos y quedarnos callados?
La tierra gime porque está bajo maldición debido a la caída del hombre, por eso han venido las tormentas, los huracanes, las inundaciones, los terremotos y el hambre unido a las sequías y los incendios forestales, esto es lo que hará que las personas tomen conciencia de su necesidad de Dios, se arrepientan y lo amen; solo así todo lo torcido se enderezará de nuevo. Voz que clama en el desierto: preparad camino al Señor; enderezad calzada en la soledad a nuestro Dios. Todo valle sea alzado, y bájese todo monte y collado; y lo torcido se enderece, y lo áspero se allane, Isaías 40:3-4. Entonces ¿por qué hemos de atemorizarnos y quedarnos callados?
¿Cree
usted que Dios creó la tierra para causar estas tragedias? Bueno, pues Dios creó
una tierra hermosa, tranquila, llena de vida, de días soleados y una
temperatura agradable para todos, Él lo hizo todo hermoso en su tiempo, Cantares 3:11. Antes del Diluvio nunca había llovido sobre la tierra, no habían tormentas ni huracanes. La arqueología y la
ciencia han descubierto en los fósiles congelados, animales con alimento sin digerir
en sus estómagos, esto evidencia un clima tropical en el pasado. También declara que la tierra en tiempos pasados permanecía verticalmente fija en su
eje y no inclinada como ahora. Esa inclinación es la que causa las estaciones y
los climas diversos, unos fríos y otros calientes.
Tampoco
nuestro calendario es el mismo, la órbita de la tierra alrededor del sol,
requiere que sea ajustada con un día adicional cada cuatro años, por eso el bisiesto,
excepto cuando se comienza un nuevo siglo. ¿Acaso no podría nuestro omnipotente
Dios Creador, haber hecho todas las cosas equilibradas, tranquilas y en orden?
Pero cuando el pecado entró
al mundo todo cambió para nuestro dolor. Algunos cambios fueron inmediatos,
como los espinos, los cardos, las fieras, la enfermedad y la muerte. Otros
cambios han venido progresivamente, como la reducción de los años de vida de
los seres humanos. Otros cambios han sido ocasionados por cataclismos como la
separación de la tierra en diversos continentes, otros han sido cambios
sutiles, como la remoción de la capa de vapor del agua, que en algún tiempo
protegía a los habitantes de la tierra contra los dañinos rayos solares, lo
cual lo declara la Biblia en su libro más antiguo, Job 36:27-29.
El pecado afectó y
sigue afectando nuestro planeta tierra, deformó y sigue cambiando el ambiente
ideal y perfecto con que el Creador lo planeó y lo hizo para la vida del sello de
su creación, que somos las personas que Él formó a su imagen y semejanza.
La
tierra y el universo fueron creados en armonía perfecta con Dios, pero el
pecado lo desordenó todo, la tierra se hizo un lugar retorcido, gimiendo y lleno de mala
hierba, infestada de enfermedades, fieras, animales ponzoñosos y venenosos,
por eso la tierra periódicamente desate su frustración a través de los
movimientos furiosos que devastan y destruyen todo a su paso.
Pero la Biblia nos llena de
fe y esperanza, porque pronto todo cambiará, cuando Dios empiece a poner todas
las cosas en su lugar, de la misma forma como Él las creó, Él está preparando
todo para establecer su Reino, cuando aparezca el Hijo de Dios en las nubes
para arrebatar a su Novia, la Iglesia, el remanente santo que ha sido fiel y ha
permanecido unida a Cristo a pesar de todo:
Vi un cielo nuevo y una tierra nueva;
porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más.
Y yo Juan ví la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo de Dios,
dispuesta como una esposa ataviada para su marido. Y oí una gran voz del cielo
que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y Él morará con ellos;
y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios. Enjugará
Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más
llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron. Y el que estaba
sentado en el trono dijo: He aquí, YO hago nuevas todas las cosas. Y me dijo:
Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas, Apocalípsis 21:1-5.
Porque con alegría
saldrán, y con paz serán vueltos; los
montes y los collados levantarán cánticos delante de ustedes, y todos los
árboles del campo darán palmadas de aplauso, Isaías 55:12. Con nuestros propios
ojos veremos la maravilla de la creación tal como Dios la creó, liberada de las
ataduras y las maldiciones del pecado y de la manipulación de las tinieblas,
mostrándose tal como era cuando Dios puso por primera vez al ser humano sobre
ella, antes que satanás interviniera, Por eso también se
estremece mi corazón, y salta de su lugar, Job 37:1.
OREMOS: Señor Jesús te damos gracias
por tu sacrificio en la cruz, gracias por derramar tu sangre para limpiarme de
todo pecado; me arrepiento de mi maldad y rebeldía contigo Señor, desde HOY me
rindo a Ti y declaro con mi boca que eres mi Salvador porque lo creo en mi
corazón. Señor Jesús te pido que escribas mi nombre en el libro de la vida y
que me llenes con tu Santo Espíritu. Ayúdame a estar preparado para cuando Tú
vengas en el arrebatamiento por tu pueblo santo, yo quiero irme contigo en las
nubes, si no vienes antes por mi, quiero estar contigo por la eternidad en las
moradas celestiales que fuiste a preparar para nosotros, te lo pido Padre en el
nombre de nuestro Señor Jesucristo, Amen.