No hay brujería que funcione contra el pueblo de Dios. ¡Miren todo lo bueno que el Eterno ha hecho por su pueblo! He aquí que esta nación se levanta como leona, y como león que se yergue; no se echará a descansar hasta que haya vencido a sus enemigos, Números 23:23-24.
Cachorro de león es mi pueblo, devora la presa y subsiste; se agacha, se echa en el suelo como lo hace un león grande. ¿Y quién se atreverá a molestarlo? Génesis 49:9.
Su rugido es como de leona, ruge como leoncillo, gruñe y atrapa la presa, y se la lleva sin que nadie la pueda librar. Isaías 5:29.
Cuando Dios mira a su pueblo, Él ve a su Hijo en cada uno de los miembros del cuerpo de Cristo, pero hay muchos que aparecen escondidos y lejanos de su presencia, porque le han dado la espalda a su Rey, al León de la Tribu de Judá, pues se han ido al mundo, se han aletargado y como presa de aquel aparente león rugiente, han amado más las tinieblas que la luz con sus malas obras, Juan 3:19; esos se han dejado cazar de los deleites y mentiras del mundo, que oscurece no solo la coherencia de la fe y buen juicio, sino que han desviado su camino de la Luz Eterna. Así que, arrepiéntanse y conviértanse, para que sean borrados sus pecados; y vengan de la presencia del SEÑOR tiempos de refrigerio. Y Él Padre enviará a Jesucristo como les fue anunciado. Hechos 3:19-20.
Frente a la guerra de las naciones, el sufrmiento familiar, el dolor y el vacío personal del corazón, es hora es levantarnos en oración, ayuno y clamor, pues no nos queda más que ser verdaderos hijos de Dios, volviéndonos a Cristo de corazón para tener nuevas fuerzas, ser salvos y guardados y continuar en la lucha con el alivio de la protección y la paz que solo Dios puede darnos; no hay porque tener miedo, ni huir, ni escondernos, ni retroceder ante el peligro inminente de los enemigos que avasallan, levantémonos como valientes y temibles leones como lo es el León de la tribu de Judá; en Dios somos leones y leonas de fuerza incontenible, fe inamovible y poder imparable para vencer la maldad con el bien, el miedo con valentía, la falsedad con la verdad, la muerte con la vida, la debilidad con la fuerza, la guerra con la paz, el odio con amor, y el dolor con consuelo y esperanza. Sean sobrios, y velen; porque su adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar. 1 Pedro 5:8-9.
Somos más que vencedores en Cristo Jesús, SEÑOR nuestro, Él es nuestra fuerza y somos sabios en su Espíriru para discernir la luz de la tinieblas, dar la batalla y actuar a favor de la vida, y así alcanzar libertad en justicia; la Iglesia de Jesucristo como leona valiente se levanta, sale a la caza, vigila, y lucha unida por el bien de las familias, nuestra nación y la tierra, todos juntos en la fuerza del Valiente Varón de guerra, dando la batalla de la fe en clamor por nuestros cachorros, trabajando y cuidando a los más pequeños y tiernos de la manada. He aquí este pueblo se levanta amenazante como leona, y se yergue como león, no se echará hasta que devore la presa y beba la sangre de los enemigos que haya matado. Números 23:24.
Ser genuinos, fieles y aguerridos es una decisión y una determinación para valientes, no para cobardes; muchos tienen que abandonar la comodidad y el amañé al pecado para vivir una vida imparable de limpieza, rectitud y oración porque somos la familia de Dios, y los genuinos ciudadanos del reino son soldados de corage y valentía, que como leones corren y alcanzan la presa y la destruyen para habitar a plenitud en la selva del mundo; somos de los que no dejan de luchar, pues NO somos cobardes ni débiles pusilánimes de doble ánimo; si el León ruge tras la presa, la Leona de Dios ruge y da el ataque contra los que ponen trampas y acechan en la oscuridad, pues en el mundo abundan los malvados como Caín y traicioneros como Judas, y si los ladrones del oscuro desierto no paran su acechanza contra la manada del León, las leonas como centinelas 24/7, están en la brecha y al servicio del Rey León que ya venció al que tenía el imperio de la muerte. ¿Y tú, Puedes cazar la presa para la leona, o saciar el apetito de los leoncillos? Job 38:39.
Los leones defienden su territorio, mientras las leonas atentas, despiertas, activas y vigilantes corren tras de la presa para alimentar y resguardar a los cachorros; el panorama de los leones en la dura selva, es un hermoso cuadro para el pueblo de Dios en este tiempo en que nuestra nación Colombia y muchas más naciones sufren la cruel embestida de las fieras que acechan en la oscuridad del mundo; es hora de levantarnos unidos a Jesucristo, para que venga su reino y su justicia, y que se haga su voluntad en esta tierra; no durmamos, luchemos por la vida, la paz y la libertad, y si alguno se queda echado mirando y esperando que lo alimenten, ese está destinado a perecer; es necesario que todos hagamos nuestra parte y actuemos. Un león perece por falta de presa, haciendo que los cachorros y las leonas se dispersen. Job 4:11.
Si en las Escrituras se compara al SEÑOR con un león, y se le llama León de la Tribu de Judá, es precisamente por su fuerza y valentía de guerrero, que con poder y fuerza luchó en el Calvario para vencer al diablo resucitando victorioso; la responsabilidad de la Iglesia leona es morir a este mundo, y en el ámbito espiritual resplandecer y brillar como lo hace el Rey que también es Sol de Justicia; con ese mismo carácter debemos ser sus fieros leones que no se amedrentan ante el peligro, sino que somos incontenibles; si el león en la selva es el rey de los animales, Jesucristo es Rey y SEÑOR que tiene el dominio y destruye las maquinaciones del que aparenta ser león, pero es lobo rapaz, que busca a quien devorar. Huye el impío sin que nadie lo persiga; Mas el justo está confiado como un león. Proverbios 28:1.
Jesucristo con su señorio, autoridad y poder, le arrebató la cautividad, al falso león, llamado diablo; nuestro SEÑOR padeció una sola vez por los pecados de la humanidad, murió en su humanidad de Hijo del Hombre, pero ha sido vivificado por el Espíritu como Rey de reyes y SEÑOR de señores, porque Él tuvo el coraje del amor sacrificial, yendo hasta las profundidades de la tierra a predicar y salvar los espíritus encarcelados que desobedecieron hasta los días de Noé y murieron antes que apareciera nuestro Gran Rey. 1 Pedro 3:18-20. Con su poder y autoridad de Rey, es quien nos debe gobernar y defender, no el mundo, y nosotros debemos responderle a Él como sus redimidos. Cristo subió porque primero bajó a las profundidades de la tierra. Efesios 4:9.
Si el León de la tribu de Judá es feroz contra el mal y las tinieblas, su leona, la Iglesia, debe ser el brazo armado de la justicia del Padre, porque aunque Él es grande, fuerte y valiente, es movido a misericordia para salvar y liberar a su manada de leones, leonas y cachorrillos; pero todos debemos arrepentirnos dejando la vida de pecado, humillados ante Él para ser salvados y guardados de tanta maldad, amenazas y peligros de este mundo cruel; el León vendrá a pelear por su leona y nos liberará de aquella fiera que roba, mata y destruye. Uno de los ancianos me dijo: No llores: porque ha triunfado el León de la tribu de Judá, la raíz de David, y Él abrirá el libro con sus sellos. Apocalipsis 5:5.
Somos pueblo que representa al Eterno en este mundo, Él es nuestra prioridad, paremonos firmes en la fe del Hijo de Dios, porque a Él pertenecemos, pues nos compro con su sangre, y tal es el Padre, tal son los hijos, No temas manada pequeña, porque a su Padre le ha placido darles el reino. Lucas 12:32. Todos en el mundo tienen dificultades y sufrimientos, pero el Dios Padre protegerá, al humilde de fe obediente, corazón dispuesto y manos limpias; el león en la Biblia no es solo una metáfora, es una realidad latente del poderoso amor del Cristo resucitado, que conquistó la vida con sacrificio, dolor y sangre, luchando contra el falso y cruel león destructor y homicida; Cristo con contundente victoria, anticipó nuestra resurrección y vida eterna. Por cuanto has guardado mi palabra con paciencia. YO también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para poner a prueba a la humanidad. Apocalipsis 3:10.
Hay dos reinos: en uno Gobierna el amor y el Sol de Justicia, el León de la tribu de Judá, y en el otro impera el odio del lobo rapaz, que corrompe y falsea ser león que ruge, pero en realidad gruñe con venganza; así que mientras el León, Mesías Rey, exhibe y proclama su señorío, y realeza majestuosa, salvífica y redentora, satanás maquina, roba, mata y dertruye acechando vidas desde la oscuridad y fría noche que vive el mundo. Así que, seamos sobrios y velemos, porque nuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar. 1 Pedro 5:8.
Nada ni nadie puede resistir la fuerza imparable e incontenible del León de Judá, Arieh Yehuda, que reina, gobierna y protege tiernamente su manada, su tribu, su familia real de sacerdotes y nación de gente santa, porque finalmente subiremos con El, como su novia y esposa; este León fija sus fronteras y límites y está atento al peligro que pueden correr sus leonas, leones y leoncillos, Él no permitirá que el rugiente falso se acerque; y si el Rey León avisa el peligro, sus leones y leonas se levantan, se preparan y se alistan para cubrir la brecha y los flancos más débiles, y debemos entrenarnos para el último tiempo; aprender a batallar valientemente y con mano dura contra la maldad del impío; será un trabajo duro contra las puertas del infierno que no prevalecerán contra la fiera leona del SEÑOR. Como osa privada de sus cachorros, me enfrentaré a ellos y les desgarraré el pecho, allí los devoraré como leona, y los desgarraré como una bestia salvaje. Oseas 13:8.
Somos el pueblo Jayalim, soldados de Cristo, una fuerza militar poderosa y grande en YHVH Sabaot, El Varón de guerra; desde remprano y sin cesar Dios llama a su pueblo leona, labi leviah y Ariéh, Ariel, el león de Dios que como nación valiente, a manera de leona, sale a buscar la presa, eso es estar despiertos para enfrentar el peligro y las fuerzas del infierno que amenazan debilitar la fe con ataques mortales; así que, parémonos para salir a la batalla, suscitando una estampida espiritual que haga temblar el infierno, mientras se avivan los que han de ser salvos; con la ayuda del Espíritu Santo, purífiquémonos, para que su fuego consumidor destruya toda acechanza del adversario, en la prueba que vendrá segura sobre el mundo entero; respondamos valerosa y resueltamente, sin ningún miedo; aunque muchos no vean claro porque están ajenos a la cobertura del Rey, algo paradójico, como si Dios dijera: te miro pero no te veo. Porque sus pecados han hecho separación entre Dios y los hombres, Isaías 59:2; muchos siguen alejados de Dios y no ven el peligro. ¿Qué fue de la guarida de los leones y de la cueva de los leoncillos, donde el león, la leona y sus cachorros se guarecían sin que nadie los perturbara? Nahum 2:11.
Vienen tiempos cuando el lobo aparientando ser león gruñirá escupiendo engaño, confusión, división e inseguridad contra la leona de YHVH Sabaot, el usurpador, ladrón, engañador y homicida es un vagabundo errante que acecha todo el tiempo a la manada pequeña, ese insiste en acabar con el Rey León, porque siempre ha codiciado el trono y usurpa los flancos intentando apoderarse de la leona; ese león que gruñe se fija en cierta clase de leones: en los cobardes y pusilánimes que se echan a dormir y son simples espectadores, no hacen nada pero reclaman sus derechos porque son mantenidos, con ellos el lobo agranda su oscura manada apóstata para salir a robar, matar y destruir; el falso león siempre está hambriento y airado, es un sucio y verdadero enemigo de la vida y de la fe, obtiene todo por la fuerza y la violencia, creando guerra fratricida entre los leones y separa los cachorros de la manada para matarlos. Porque no has entendido la voz del SEÑOR, y tan pronto como te apartes de Él, un león te matará…1 Reyes 20:36.
Iglesia y Leona del SEÑOR, levántate, mira el peligro que se acecha, saca la suciedad de tu vida y cuida tu familia, para que tu atmósfera y contorno se limpien de iniquidad, desorden e injusticia por el pecado repetido de generación en generación, sufriendo lo que hoy vemos en la sociedad y el gobierno corrupto de gente que vive sin Dios y sin ley, unos fulanos que van por la senda ancha, donde todos se corrompen y compiten intentando quedarse en cualquier manada; el pueblo de Dios debe enfrentar esto para frenar y limitar tanta maldad sobre la tierra, NO participes ni celebres las cosas del mundo que Dios aborrece porque son contrarias a la palabra y los principios del Rey. ¿Qué era tu madre? Una leona entre leones. Echada en medio de leoncillos, ella crió a sus cachorros…Ezequiel 19:2-19.
Todo lo que sucede en el mundo es anormal y antídiseño, pero llevando al cumplimiento profético con el aumento de la maldad, la multiplicación de las aberraciones y ampliación de los caminos torcidos, esa es la razón por la cual debemos prepararnos y cuidarnos del león rugiente que busca saciar sus instintos, el diablo es acérrimo adversario, el principal oponente que ataca y bombardea el bien y la justicia sin parar; el león de apariencia es una fiera indómita que no selecciona a sus víctimas, ataca a todos, y los que caen, es porque se parecen a él; pero los leones y leonas del Altísimo velan y prevalecen. Así será el resto de mi pueblo entre las gentes, en medio de muchos pueblos, como el león entre las bestias de la montaña; como el cachorro del león entre las manadas, el cual pasa, pisa, arrebata y no hay quien escape. Miqueas 5:8.
Antes que el tiempo apremie, que leona se yerga, ruja, pelee y arrebate, para que venga la liberación, para que se desaten los nudos, se rompan las cadenas y se pudran los yugos; si Dios ve frutos dignos de arrepentimiento, experimentaremos el glorioso mover del Espíritu Santo, porque el pueblo santo será apartado de los juicios que han de venir para el mundo, porque así dice el SEÑOR: YO iré delante de ti, y enderezaré los lugares torcidos; quebrantaré puertas de bronce, y cerrojos de hierro haré pedazos; y te daré los tesoros escondidos, y los secretos muy guardados, para que sepas que YO SOY YHVH, el Dios de Israel, que te pongo nombre, Isaías 45: 2-3. YO rugiré como el león y ustedes me obedecerán...sus descendientes vendrán a Mí, vendrán temblando como las aves que vienen del oeste, y YO los llevaré a su casa...YO SOY el Dios de Israel. Oseas 10:11.
Adquiramos la fuerza, la fiereza y valentía del León para rugir en santidad contra el maligno y con grandes rugidos de oración en santidad atemoricemos y hagamos huir al rugiente, para que la leona experimente su victoria; la leona del SEÑOR debe despertar y arrebatar las almas en este tiempo porque tenemos los genes del León Eterno que despedaza al dragón, mientras la leona cuida a los pequeños, y enseña a los más jóvenes, da testimonio a los adultos, y lleva la gloria de Dios a los rincones de la tierra. Y así dice el SEÑOR: Este pueblo se levantará como una leona, se pondrá de pie como un león que no descansa hasta devorar su presa y derribar a los enemigos de Dios. Números 23:23-24.
Si queremos evitar los desastres de las fieras salvajes y malignas del mundo, rujamos con el poder del Leon de Judá, con fe obediente, pureza consagración y fidelidad; la leona es el animal que defiende sus cachorros con fiereza, ella no descansa hasta que caza la presa y trae comida a los cachorros, así honra al león de la manada, así debe hacer la leona de Cristo. Tú y yo somos la leona que se levanta para honrar al León de la Tribu de Judá, yendo por la presa, iremos a rescatar a cientos de leocillos de las fauces del rugiente y no descansaremos hasta traer a miles ante la presencia del Rey. Ustedes son como una manada de leones, listos para arrebatar la presa. Mi pueblo no descansará hasta ver vencido a su enemigo. Números 23:24.
Tenemos
que ser feroces e implacables contra el mal, violentos contra la injusticia, firmes
contra la incredulidad, duros contra el engaño y lo que se opone a Dios y su
evangelio. No podemos quedarnos quietos cuando muchos están cayendo y mueren cazados en las fauces del
rugiente, y muchos podrían ser sorprendidos. Vendré repentinamente, como un león que sale
de los matorrales y se lanza a los lugares donde siempre hay pasto fresco, haré huir a los enemigos, y haré que gobierne la persona que YO escoja. Pues
¿Quién puede compararse a Mí? ¿Quién puede desafiarme? ¿Qué pastor puede
hacerme frente? Jeremías 49:19.
Pueblo mío, YO te cree y te formé, te hice libre, para que seas intrépido, para que seas fuerte, haré maravillas en medio de ti para que se despierte tu fiereza, derramaré El fuego de mi Espíritu, unido a tu disposición de corazón, porque YO pongo el querer como el hacer, mi unción y la determinación de tu alma harán lo mejor del trabajo conmigo, tú te mueves y YO abro puertas. Tu cambio de vida ha de ser extraordinario, genuino y visible impactando sobrenaturalmente la tierra y la sociedad, YO lo quiero en tu vida para que dejes fluir mi gloria y miles de vidas sobre la tierra sean rescatas para Mi Reino; pueblo mio, debes hacer tu parte mientras YO hago la mia, es un trabajo de equipo. Sí YO, el SEÑOR, SOY el León de la tribu de Judá, Tu eres mi nación santa, mi leona la cual anhelo que despierte ferozmente. Porque he aquí, mi pueblo se levantará amenazante como el león y no descansará hasta devorar la presa…Números 23:24.
Tú eres mi leona, YO SOY el León de la tribu de Judá, nación mía, vive a plenitud en mi presencia, tu eres el pueblo que vive en la Luz Admirable para que seas sal y luz sobre la tierra, destinados para lanzar la red y cazar almas en la oscuridad de la noche. Son tiempos proféticos, para ver lo que se esconde y se revele lo que está en medio de las tinieblas, así como la leona caza en la oscuridad de la noche; pueblo del Dios Vivo tienes la capacidad para cazar presas en la oscuridad terrible de la noche que vive el mundo y la humanidad. Te he llamado pescador de hombres en medio del mundo, porque eres tu el elegido, mientras YO dirijo, gobierno y ejerzo poder contra el lobo que devorar a mis corderos, y YO te digo: Clama en el desierto, prepara camino al SEÑOR; endereza calzadas en la soledad ante nuestro Dios. Todo valle sea alzado, bájese todo monte y collado; lo torcido se enderece y lo áspero se allane, Isaías 40:3-4.
Oremos y clamemos sin cesar, reforzando la intercesión profética y el clamor ardiente, puestos los ojos en el Autor y consumador de la fe con oraciones poderosas cargadas de la palabra de Dios, que sean oraciones feroces, fuertes, violentas contra el infierno, que como sables de doble filo aterroricen al diablo y lo hagan huir. La determinación, la valentía y el coraje de los leones han de ser impartidos entre el pueblo de Dios. Salgan, no importa si hay nieve, no importa si hay frío, no importa nada de este mundo, sal a llevar mi gloria para que veas mis maravillas. Este mi pueblo, que se levanta como una leona, como un majestuoso león que despierta. Ellos se niegan a descansar hasta que hayan devorado a su presa…Números 23:24.
Ganaremos la batalla con el poder intercesor de las leonas de Dios, mujeres que interceden y leones que trabajan para cambiar la cultura del mundo con la cultura del reino; gente misericordiosa que atiende necesidades donde hay, Dios muestra y envie; como leona debes participar en muchos frentes de trabajo con servidores entrenados. Los machos, los leones fuertes, enfrenten el peligro, pero leona y león deben estar juntos para pelear el sueño del Gran León de la tribu de Judá, esto será cordel de tres dobleces que no se romperá, porque el sueño de Dios, es la pesadilla del diablo. Somos leones espirituales en las manos del Todopoderoso Dios, Mi gente se levanta como un león, no caerá sino que comerá lo capturado…Números 23:24.
Hemos visto y vivido muchas cosas horribles en la tierra, pero vendrán peores y hemos sido creados para pelear la buena batalla de la fe y ver cosas superiores, las cosas extraordinarias de Dios; Cristo nos salvó y nosotros como sus colaboradores vamos a rescatar a otros como lo dice Isaías 61; seamos todo lo que el Padre celestial creó, soñó y diseñó en cada uno de nosotros. Dios te desafía a ti y a mí para dejar de tener miedo a las fortalezas del infierno, empezar a movernos en la ferocidad del brazo victorioso de YHVH y el fuego consumidor del Espíritu; hay que ir por los homicidas, por las prostitutas, por los drogadictos, por los corruptos, por los alcohólicos y a todo lo que el SEÑOR nos envíe. Hay muchos pobres, hay muchos desnudos, no solo exteriormente, sino interior y espiritualmente, saquémoslos de las jaulas para que sean desencadenados y salgan de las mazmorras hacia la libertad. El preso agobiado será libertado pronto; no morirá en la mazmorra, ni le faltará su pan, Isaías 51:14.
Digamos SEÑOR: yo soy tu servidor, soy tu discípulo envíame según tu propósito, yo iré a llevar esperanza y que miles vuelvan a soñar de nuevo con educación, formación, empleo, amor en el poder y la fuerza imparable del León de la tribu de Judá. He aquí el pueblo que se levanta como leona y se yergue como león, no se echará a descansar hasta que haya devorado su presa… Números 23:24.
Dejemos de lidiar con lo oscuro, no carguemos maldiciones, iniquidad ni oprobio, alcemos la voz con el poder de la palabra porque ya se oye el rugido del León de Judá que se levanta para quemar el mal, Salmos 29:7; firmes en la fe feroz que elimina la duda, la incredulidad y la mundanalidad, nuestra confianza está en Dios que doblega toda la fuerza del infierno, Él es el Vencedor de la cruz y el conquistador que con el poder avasallador de la resurrección ha dado vida. En Cristo somos impresionantemente poderosos para frenar, el avance de las tinieblas en función de lo que somos en Cristo: la manada pequeña del Reino de Dios. Jeremías 1:10 y Lucas 10:19-21.
OREMOS: Padre celestial, agradezco la profundidad de tu amor, te pedimos que en estos tiempos peligrosos nazcan y surjan leones y leonas valientes que provoquen un despertar glorioso mediante un impetuoso, feroz e implacable mover espiritual de luz contra la oscuridad, arranca las limitaciones de tu leona, los pretextos y las excusas de los corazones; que despertemos a la realidad de quienes somos en tu Hijo Amado, que reconozcamos plenamente que somos tuyos, que no es nuestra fuerza sino tu poder, que reconozcamos el territorio que nos has dado, para pelear por él y armarnos de valor en tu Espíritu para ser más que vencedores de manera palpable y visible. Amén.
Padre ayudamos a retomar nuestra posición y recobrar las fuerzas para poseer plenamente la tierra que nos has dado, libera audacia, poder y libertad en tu Iglesia, y en tu pueblo como la que posee los leones en su manada, y que miles conozcan al Creador mientras se elevan oraciones en murmullo hasta que lleguen a ser estruendosos y estremecedores rugidos que hagan retroceder al enemigo, en el nombre de Jesús. Amén. He aquí, un pueblo que se yergue cual leona, y se alza como un león; no se echará a descansar hasta que haya acabado con su presa…Números 23:24.
Mg. MEHC, hija del Dios vivo, real y
verdadero y servidora de su reino.