SABER PENSAR MARCA EL RUMBO DE NUESTRA EXISTENCIA.
Amados hermanos, piensen
en todo lo que es verdadero, en todo lo que digno de respeto, en todo lo recto,
en todo lo puro, en todo lo agradable, en todo lo es digno, en todo lo que
tiene buen nombre. Piensen en toda clase de virtudes, y en todo lo que merece
alabanza, Filipenses 4:8.
Encomienda al Eterno tus
obras, y tus pensamientos serán afirmados, Proverbios 16:3.
Porque mis pensamientos no
son sus pensamientos, ni mis caminos sus caminos, declara el Señor
todopoderoso, Isaías 55:8.
Todos luchamos con los pensamientos porque es allí donde decidimos y determinamos nuestras decisiones y nuestro caminar diario, es allí en la mente donde el mundo y el enemigo de las almas bombardean para destruir las vidas sacándolas del propósito de Dios; aún cuando hayamos nacido de
nuevo, debemos cuidar que es lo que guardamos en la mente y qué clase de pensamientos atesoramos, porque la oscuridad del mundo que nos rodea, la sociedad, la tecnología, la gente y todo lo
que vemos y oímos no para, inevitablemente nos lleva a pensar muchas cosas que nos podrían hacer perder eternamente, por lo
tanto, hay que tener cuidado con qué llenamos la mente y que es lo que pensamos pues es de vital importancia para nuestro diario vivir, sabiendo que todo nace primero en la mente, Con toda diligencia
guarda tu corazón, porque esto determina el rumbo de la vida, Proverbios
4:23.
Cuando la Biblia habla del corazón, se refiere a la mente, por eso debemos
cuidar la clase de pensamientos a los que les damos vuelta en la mente, es la mente la que induce las emociones y las acciones, por ser la fuente de los
pensamientos, sean para vida o para muerte, y nuestra manera de pensar marcará el
rumbo de nuestra existencia. En el corazón está el alma compuesta, de
emociones, voluntad y mente, por lo tanto, démonos cuenta lo valioso que es
cuidar la mente y tener control de lo que pensamos para que no se corrompa nuestra alma ni muera nuestra vida espiritual. Porque cual es el pensamiento en el corazón del hombre, tal es él…Proverbios
23:7.
Si todos atendiéramos y supieramos lo importante que son los
pensamiento que anidamos en la mente, jamás daríamos lugar a malas ideas, malas
intenciones y acciones sucias, mucho menos daríamos lugar a pensamientos tan
negativos contra nosotros mismos o contra otros como solemos hacerlo. La
palabra de Dios nos exhorta a pensar con fe, optimismo, pureza y verdad desde las buenas intenciones, porque le pertenecemos a Dios en Cristo y poseemos su ADN espiritual, pues Él habita en
cada uno de los redimidos en sangre del Cordero de Dios, que nos libertó en la cruz para vivir con estabilidad y contentamiento. Porque ¿Quién conoció
la mente del SEÑOR? ¿Quién lo instruirá? Pero nosotros tenemos la mente de
Cristo. 1 Corintios 2:16. Por lo
tanto debemos tener en cuenta algunos aspectos necesarios que nos ayudan a
cultivar la clase de mentalidad que agrada a Dios. Aquí algunos tips:
1. Estar atentos a lo que pensamos, Concentren toda su
atención en las cosas de arriba, no en las de la tierra, Colosenses 3:2. Es nuestra responsabilidad cuidar nuestros pensamientos para tener una mente, un cuerpo sano y un alma libre; gran
porcentaje de nuestros sencillos y buenos detalles de la vida, junto con las
acciones, las palabras y las actitudes que ejecutamos a diario, nacen primero
en nuestra mente, por lo tanto lo puro como lo impuro brota primero en la mente con un
pensamiento; Y Jesús, conociendo los pensamientos de ellos, dijo: ¿Por qué piensan mal en sus corazones? Mateo 9:4. YO les digo que cualquiera que mira
con deseo a una mujer, ya cometió adulterio con ella en su corazón, Mateo 5:28.
Es por eso que la Escritura le da importancia a los cinco sentidos que trabajan simultáneamente con la mente y el
corazón, es decir, que todo esto brota y nace desde el alma; por eso, los pequeños destellos en la mente se
van formando y agrandando en lo secreto de nuestro ser, sea que cultivemos amistad con Dios o estemos distantes
de Él, nuestra mente no descansa, todo el tiempo trabaja, por lo tanto, podemos
tener buenos o malos pensamientos de lo cual debemos estar atentos, para no
dejarnos arrastrar por los que son malos y errados y dividen nuestra vida; Pero conociendo Jesús sus pensamientos, les dijo: Todo reino dividido contra sí mismo es asolado; y una casa dividida contra sí misma, se destruye. Lucas 11:17.
2. No reaccionar impulsivamente. Encomienda
al Señor tus obras, y tus pensamientos serán afirmados, Proverbios 16:3. Esto nos advirte para evitar malas actitudes, palabras que no corresponden y situaciones que nos roban la paz y la armonía; Dios nos enseña que
para poder tener pensamientos limpios, firmes y de acuerdo a su voluntad,
debemos orar y leer la Biblia a diario, para que nos quede en la mente su palabr y pensemos en lo que Dios dice y ordena, además debemos entregar todo nuestro día a día en las manos de Dios, para no
actuar impulsiva ni reactivamente, sino proactivamente. Destruyendo especulaciones y todo razonamiento altivo que se levanta contra el conocimiento de Dios, sometiendo todo pensamiento a Cristo, para obedecerlo a Él. 2 Corintios 10:5.
Muchas veces reaccionamos y no pensamos, actuamos y después nos
lamentamos, por eso la mayoría de nuestros problemas y rupturas de relaciones son el
resultado de la actitud que dejamos nacer en la mente y la explotamos; estamos acostumbrados a vivir a la defensiva y a actuar con ira, en casos más delicados bociferamos con amargura y falta
de perdón debido a una mente intoxicada de malos pensamientos y duros deseos del corazón, por lo tanto, ofendemos y agredimos complicando la situación, pero si rendimos nuestra
mente a Cristo y ponemos cada pensamiento en sus manos, todo estará bajo el gobierno y soberanía de Dios; y si nos llenamos del Espíritu Santo
podremos estar prestos a responder con sabiduría y dominio propio, Dios acudirá
en nuestra ayuda y defensa. Por eso Jesús nos advirtió estar atentos y orar para no caer en
tentación, ¿Quién es sabio y entendido entre ustedes? Que muestre por su buena conducta sus obras en mansedumbre de sabiduría...no sean arrogantes, ni mientan contra la verdad. Porque la sabiduría del mundo, no viene de lo alto, sino que es terrenal, natural y diabólica. Santiago 3:13-15.
Para llevarnos bien unos a otros no es necesario que pensemos
igual, lo importante es el respeto con valoración de cada persona creada,
única y especial; el trato interpersonal del cristiano va unido a la
benevolencia que es tolerancia y la condescendencia ante la diferencia de ideas
y pensamientos, siendo comprensivos debido
a nuestra debilidad humana y el estar expuestos al pecado,
Dijo Jesús: Lo que sale del hombre, eso es lo que lo hace impuro. Porque de
adentro, del corazón del hombre, salen los malos pensamientos, la inmoralidad
sexual, los robos, los asesinatos, los adulterios, la codicia, las maldades, el
engaño, los vicios, la envidia, los chismes, el orgullo y la falta de juicio.
Todas estas cosas malas salen de adentro haciendo al ser humano impuro, Marcos
7:20-23.
Por lo
tanto, aunque la personalidad es diferente, la actitud de todos debe ser
de total educación y dominio ante las circunstancias, porque los discípulos de
Cristo marcamos la diferencia para impactar siendo pacificadores, porque a paz nos llamó el
Señor, 1 Corintios 7:15. Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón, ponme a prueba y escudriña mis pensamientos. Fíjate si voy por mal camino, para que me guies por el camino eterno. Salmos 139:23-24.
3. Someternos al gobierno de Dios, Porque mis pensamientos no son los de ustedes, ni sus caminos son los míos, afirma el SEÑOR. Isaías 55:8. Lo primero que debemos sujetar y entregar a Dios es nuestra alma,
el asiento de nuestra vida donde están nuestra mente, emociines y voluntad, asi nuestras acciones y comportamiento serán gratos a Dios y de bendición para la gente. No se acomoden al mundo, sino transfórmense mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, que es buena, agradable y perfecta. Romanos 12:2.
Nuestros
sueños, planes,
proyectos, ideas y actividades deben depender de la dirección de Dios y el consejo de su
palabra, porque por lo general, nada de lo nuestro encaja con lo que otros piensan; cada uno tiene su
propósito de vida personal, cada uno tiene y maneja sus ideas y proyectos, con su propia propia, pues cada uno nace con un
temperamento propio, pero el
carácter de todos debe ser moldeado y transformado por Dios. A cada uno le parece correcto su proceder, pero es el SEÑOR el que juzga los corazones. Proverbios,21:2.
Vivir en función de Dios y su palabra bíblica nos ayuda a vencer la tentación que nace en la mente cuando damos rienda suelta a un pensamiento inapropiado, que nos podría hacer caer en pecado, pero Dios lo
cambiará por un pensamiento limpio y sano que nos convenga y edifique desde su palabra y su omniciencia. Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, es más cortante que cualquier espada de dos filos. Penetra hasta lo más profundo del alma y del espíritu, llega hasta la médula de los huesos, para juzgar los pensamientos y las intenciones del corazón. Hebreos 4:12.
Debemos entregar no solo nuestro carácter a Dios, sino permitir
que Él nos trabaje y nos forme, Él hará posible lo imposible, y nos dará gracia en lo que
tengamos que decir y hacer, pensando con sabiduría celestial; de ese modo podremos estar todos juntos y en armonía
complementándonos unos a otros con lo que nuestro Creador nos ha dado, Encomienda
al Eterno tu camino, confía en Él y Él hará, Exhibirá tu justicia como la luz y
tu derecho como el medio día, Salmos 37:5. Porque separados de Dios, las cosas no
resultan bien, Juan 15:5.
4. Amarnos a sí mismos con un sano balance, Digo a todos ustedes que ninguno
piense de sí mismo más de lo que debe pensar. Antes bien, cada uno piense de sí
con moderación, según los dones que Dios le haya dado junto la fe, Romanos 12:3. El concepto mental que tenemos de nosotros
mismos afectará directa o indirectamente nuestra estabilidad emocional,
relacional, espiritual y motivacional para hacerlo todo con buena o mala voluntad.
Las
personas que nos rodean pueden ser causa de paz o de guerra, si son más causa
de guerra y violencia física, emocional y sicológica, lo mejor será poner
distancia y alejarnos de ellas y de todo lo que nos resulte nocivo,
peligroso y toxico porque en vez de bendecirnos, pues pnos hará infelices contaminando la atmosfera que nos rodea, Les suplico, hermanos, en el nombre de nuestro SEÑOR Jesucristo, que todos vivan en armonía y que no haya divisiones entre ustedes, sino que se mantengan unidos en una misma manera de pensar, y en el mismo propósito. 1 Corintios 1:10.
Y claro, debemos orar no solo por nosotros, sino por esas personas que nos causan disgusto para que Dios obre en sus
corazones y en nuestras circunstancias. Si no tenemos amor nada
somos, 1 Corintios 13. Si alguno quiere venir en pos de Mí, niéguese a sí
mismo, Mateo 16:24a. Nada hagan por competir con otros o por
adquirir su propia gloria; más bien hagan todo con humildad, estimando a los
otros como si fueran superiores a nosotros mismos; no busquen su propio beneficio, sino
el bien para su prójimo. Ustedes deben ser semejantes a Cristo, Filipenses
2:3-5
5. Compartir las bendiciones, Hermanos,
piensen en todo lo que es verdadero, noble, correcto, puro, hermoso y
admirable. También piensen en lo que tiene alguna virtud, en lo que es digno de
reconocimiento. Mantengan su mente ocupada en eso. Filipenses 4:8. El poder de la decisión y la voluntad nacen en la mente, por eso debemos examinar continuamente nuestros pensamientos
para no actuar egoísta, loca, ni neciamente contrario a la instrucción de Dios en su
palabra, para evitar la envidia, codicia y competencia queriendo resaltar, unos sobre otros, tenemos que pensar y servir
con la mente de Cristo combinando pensamientos espírituales con palabras espirituales. Piensen en las cosas del cielo, no en las de la tierra. Colosenses 3:2.
Somos responsables moral y espiritualmente de ser generosos con las bendiciones materiales, el conocimiento intelectual y espiritual con que Dios nos enseña, para tratar a otros como Él nos trata. Si damos testimonio de lo que Dios hace en nuestra vida diaria, no solo
Él es glorificado sino que muchos pueden ser impactados con el amor
de Dios que fluye a través de nosotros; la gratitud hacia Dios debe ser visible
y brotar de nuestro corazón con pensamientos de bondad y buena voluntad, todo ello contribuirá a nuestra felicidad y
bendición general propia y del medio en que nos movemos. Así que
hagan el bien a todos, según tengan la oportunidad de hacerlo, Gálatas 6:10. El que aprende y pone en práctica lo aprendido, se estima así mismo y prospera Proverbios 19:8.
6. Enfrentar la vida con
sabiduría cada día, Por lo tanto, preparen su
entendimiento para actuar inteligentemente. Sean sobrios en espíritu, pongan su
esperanza completamente en la gracia que les traerá la manifestación de
Jesucristo, 1 Pedro 1:13.
Como
verdaderos hijos de Dios nuestra mente debe llenarse de la esencia de Cristo y de sus enseñanzas para recordar sus instrucciones y promesas
ante las circunstancias y las personas, nada nos debe mover de nuestra fe, que
equilibra, da gozo, calma la ansiedad y mengua el impulso; por lo tanto, debemos esforzarnos por mantener una mente clara y limpia que nos hace sonreir sincera y francamente, expresando palabras de poder y bendición que glorifiquen a Dios y nos conserven gozosos.. Ama al SEÑOR tu Dios, con todo tu corazón,, con todas tus fuerzas y con toda tu mente. Deutetonomio 6:4 y Mateo 22:37.
En ocasiones habrá lágrimas y dolor, pero si mantenemos los pensamientos en el SEÑOR habrá regocijo y carcajadas. Es reconfortante poder reírnos en medio de
la dificultad y las diferencias. Vivir el hoy es vivir sin afanes y sin preocupaciones en la mente por lo que
pasó ayer o lo que pasará mañana, así lo enseñó Jesús. ¿Por qué voy a
inquietarme? ¿Por qué me voy a angustiar? En Dios está mi esperanza, y todavía
lo alabaré. ¡Él es mi Salvador y mi Dios!, Salmos 42:11. El hierro con el hierro se afila, y el hombre en el trato con el hombre se perfecciona. Proverbios 27:17.
7. Desplegar afecto donde estemos, Hermanos, debemos renovarnos en el espíritu de nuestra mente, para vestirnos del nuevo hombre, el cual es a la semejanza de Dios, conforme a la justicia y santidad de la verdad. Efesios 4:23-24. El más pequeño gesto de amor, afecto y amabilidad siempre surge
primero en la mente y si tenemos la mente de Cristo, todo será más fácil, daremos buen testimonio y
habrán buenos resultados para dejar huella en los corazones y causando impacto en las vidas y la sociedad.
Desplegar
afecto es esforzarnos en ser tiernos, dulces, amables y comprensivos, la palabra nos dice que
no dejemos de hacer el bien pues a su tiempo recogemos si no desmayamos, Gálatas 6:8-9. Un mandato nuevo
les doy; que se amen unos a otros, que como YO los he amado, así se amen
ustedes, Juan 13:34. Ahora permanecen estas tres virtudes: la fe, la esperanza
y el amor. Pero el más excelente de ellos es el amor, 1 Corintios 13:13.
Nada de lo que hacemos o damos es para ser aplaudidos o l6cirnos, es porque
somos conscientes, que todo lo que hacemos es para la gloria del SEÑOR que nos produce gozo y paz, Él siempre está
presente en nuestra vida y está dispuesto a ayudarnos para que demos lo mejor.
Así que todo en nosotros deben ser actos voluntarios que nacen de pensamientos
e intenciones sanas y limpias que nos den satisfacción y exalten a Dios, porque vivimos para agradar y satisfacer el corazón de nuestro Abba Padre, Él sabrá
darnos sabiduría, gracia y respaldo si vivimos en función de Él y su palabra...YO conozco hasta el fondo de la mente y el corazón; y a cada uno le daré según lo que hayan hecho. Apocalipsis 2:23. Amén.
Lc.
MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino.