SI ESTÁS DESESPERADO BUSCA A DIOS EN LA BIBLIA
Bienaventurados los que lloran porque ellos recibirán consolación,
Mateo 5:4. Cercano está el Señor para salvar a
los que tienen roto el corazón y el alma, Salmos 34:18.
Aunque yo tenga que pasar por el más
oscuro de los valles, no temeré peligro alguno, porque Tú, Señor estás conmigo;
tu vara y tu bastón me inspiran confianza, Salmos 23:4.
Cuando me llame, le contestaré; ¡YO mismo estaré con él! Lo libraré de la angustia y lo colmaré de honores. Lo haré disfrutar de una larga vida; ¡Lo haré gozar de mi salvación! Salmos 91:15-16.
Cuando me llame, le contestaré; ¡YO mismo estaré con él! Lo libraré de la angustia y lo colmaré de honores. Lo haré disfrutar de una larga vida; ¡Lo haré gozar de mi salvación! Salmos 91:15-16.
Hoy puedo recordar y hacer una comparación de la realidad, puedo
acordarme cuando sufría pero estaba sin Cristo, mi dolor era fuerte, sentía que
mi corazón iba a fallar, lloré tanto, sufrí tantas cosas duras, que en
ocasiones sentía que desfallecía y quería morir, duraba horas y días llorando
desconsoladamente, pero solo el sueño y el cansancio me vencían, despertando
luego a la realidad sin esperanza ni consuelo, porque el pecador es derribado por su maldad…Proverbios 14:32a, y muchos son sus dolores…Salmos 32:10a.
Lo maravilloso del cambio, es que cuando caminamos con el Amado Salvador
Jesucristo el dolor ya no es solo tuyo, Él lo toma en sus manos y se hace más liviana tu carga; he sufrido cosas que mis amigas han dicho: amiga, te
admiramos, porque lo que has pasado, nosotras no lo hubiéramos podido
soportar, ¡a Dios sea la honra! El punto es que sufrir, llorar, pasar la prueba, sentir dolor, tener pérdidas y creer
que el mundo se te vino encima, es diferente cuando caminas de la mano de Jesús, el que camina con el Señor su misericordia lo
rodeará, Salmos 32:10b.
Tú lloras a sus pies, le cuentas tu dolor y gimes de angustia
derramando tu corazón, pero una vez que hablas con Él, buscas su palabra y
encuentras el consuelo perfecto, su palabra cobra vida, su voz suena como una
dulce cascada que refresca tu alma. Entonces te puedes parar de tus rodillas,
fortalecida, consolada, con nuevas fuerzas, con fe firme y confianza sólida en
Aquel que te ha oído, te ha respondido y consolado y has experimentado su amor
y percibido su abrazo, Ustedes se afligen ahora; pero YO
volveré a verlos, y entonces su corazón se llenará de alegría, una alegría que
nadie les podrá quitar, Juan 16:22.
Si hoy puedo ser fuerte, si hoy puedo soportar muchas cosas, es
sólo porque cuento con la presencia permanente del amor de mi Señor Jesucristo
y el dulce calor de su Santo Espíritu que continuamente cultivo en su presencia
y me recuerda sus promesas plasmadas en su bendita palabra.Si alguno de ustedes está afligido,
que ore. Si alguno está contento que cante alabanzas. Santiago 5:13.
No llores ni te
angusties, adora a Dios y Él cambiará tu lamento en regocijo,
quitará tu luto y lo convertirá en fiesta, Salmos 30:11.
Cuando sufrimos un dolor profundo, nuestro cuerpo se enfría y pierde vitalidad, pero Dios llega y te inunda calor de vida, llena tus vacíos y te da deseos de seguir luchando y perseverando, ya no para ti, sino para Él, por amor a Él; cuando complaces el corazón de Dios, Él te bendice y te llena de gozo, el amor intenso de Dios y el que brota de tu corazón hacia el Dueño de Todo, se unen en una sola fuerza poderosa e inquebrantable que nos impulsa a levantarnos como águilas para volver a volar. Pero debemos entender que sin dolor no hay ganador y todo tiene un precio que pagar en esta vida, así como lo pagó nuestro Salvador Jesús por la salvación de nuestras almas, Dios es como el oxígeno, no puedes verlo, pero sin Él no puedes vivir, Cercano está el Señor para salvar a los que tienen roto el corazón y el alma, Salmos 34:18.
Cuando sufrimos un dolor profundo, nuestro cuerpo se enfría y pierde vitalidad, pero Dios llega y te inunda calor de vida, llena tus vacíos y te da deseos de seguir luchando y perseverando, ya no para ti, sino para Él, por amor a Él; cuando complaces el corazón de Dios, Él te bendice y te llena de gozo, el amor intenso de Dios y el que brota de tu corazón hacia el Dueño de Todo, se unen en una sola fuerza poderosa e inquebrantable que nos impulsa a levantarnos como águilas para volver a volar. Pero debemos entender que sin dolor no hay ganador y todo tiene un precio que pagar en esta vida, así como lo pagó nuestro Salvador Jesús por la salvación de nuestras almas, Dios es como el oxígeno, no puedes verlo, pero sin Él no puedes vivir, Cercano está el Señor para salvar a los que tienen roto el corazón y el alma, Salmos 34:18.
Si tu mi querido lector,
estás pasando por cosas difíciles, Busca al Eterno Amor en tu biblia, lee si te
sientes perdido, si crees que no tienes esperanza, allí encontrarás a Quien te
ha amado de tal manera que entregó su vida por ti, te ha cuidado hasta el día de hoy, entonces sabrás ¡cuán grande es Jesús! Sólo Él hace leve el peso que hay en tu vida, una buena vida
aún
en el dolor, se relaciona directamente con Amar a Dios por encima de toda y oír su voz
en las páginas de la biblia bien leída, meditada, recordada y vivida, ¡Oh, cuánto amo yo tu
palabra Señor! Todo el día es ella mi meditación, Salmos 119:97.
La biblia es poder transformador, tiene la gracia extraordinaria
de cambiar las vidas, renovar nuestra mente e impactar nuestro comportamiento
cuando creemos y vivimos las instrucciones y consejos que Dios nos enseña en
ella. La palabra de Dios cobra vida en ti y en mí, cuando la atesoramos, porque
ejerce un fuerte afecto de ternura sobre el corazón, Todo lo
que está escrito en la Biblia es el mensaje de Dios, y es útil para enseñar a
la gente, para ayudarla y corregirla, y para mostrarle cómo debe vivir. De ese
modo, los servidores de Dios estarán completamente entrenados y preparados para
hacer el bien, 2 Timoteo 3:16-27.
Hasta el día de hoy y hasta el último que yo tenga en esta tierra,
Dios y su palabra serán mi refugio, mi fortaleza y mi alegría en todo tiempo. Así
que, es imperativo, urgente y sabio leer y vivir la biblia para cambiarlo todo
en nuestra vida, nuestra familia, nuestro alrededor y el mundo entero. Porque la salvación de los justos es de YHWH. Y Él es su fortaleza en
el tiempo de la angustia. YHWH los ayudará y los librará; los libertará del
malo, y lo salvará, por cuanto en Él esperaron, Salmos 37:49-40.
Todo
depende de nuestra actitud ante Dios y su palabra, debemos ser responsables y
crear confianza en la gente con nuestra manera de vivir como hijos amados de
Dios; si mostramos serenidad, alegría aún en medio del dolor, y vivimos los
principios, fundamentos de Dios y parámetros de moralidad que nos heredó en la
biblia, podremos ser vencedores y victoriosos en el bien vivir y en las
relaciones interpersonales, sonriendo y ayudando a otros en medio de nuestra
propia necesidad, ustedes deben saber ¡cuán maravilloso es eso!.
Ustedes, como hijos amados de Dios, procuren imitarlo, Efesios 5:1. Si nuestro Rey sufrió
siendo santo, cuánto más nosotros que somos pecadores.
Te sugiero algunas formas de profundizar en las Escrituras, para
tener vidas felices, en paz y con propósito aun cuando estés sufriendo:
Oyéndola: En las enseñanzas dadas en cada predicación,
Romanos 10:17
Leyéndola: Diariamente
de manera juiciosa y tomando apuntes, Deuteronomio 17:17
Meditándola: Dándole vueltas en la mente y haciéndola una
forma de vida, Josué 1.
Memorizándola: Recordando promesas y confesándola en
momentos difíciles,
Salmos 119:11
Obedeciéndola: Prestando atención a los principios y
mandatos de Dios, Deuteronomio 28
Predicarla :
Practicando y compartiendo todo lo bueno que ella
nos enseña y
atendiendo sus consejos y advertencias para
enseñarla a otros,
Romanos 2:13,
Santiago 1:22-25.
La Biblia hay que leerla para ser sabios, Salmos 19:7;
creerla para ser salvos, Juan 5:39;
practicarla para ser santos, Efesios 5:26;
apropiarse de ella para ser sanos, Salmos 107:20;
confesarla para ser libres, Efesios 6:17,
obedecerla para ser bendecidos, Deuteronomio 28:1-14 y
predicarla para honrar a Dios y salvar a otros cumpliendo la Gran Comisión, Mateo 28:19-20, Éxodo 18:20 y Tito 1:9.
practicarla para ser santos, Efesios 5:26;
apropiarse de ella para ser sanos, Salmos 107:20;
confesarla para ser libres, Efesios 6:17,
obedecerla para ser bendecidos, Deuteronomio 28:1-14 y
predicarla para honrar a Dios y salvar a otros cumpliendo la Gran Comisión, Mateo 28:19-20, Éxodo 18:20 y Tito 1:9.
La Biblia es la Palabra de Dios, siempre la tienes a la mano. Hebreos 4:12,
La Biblia es la biblioteca divina, contiene 66 libros y es eterna, Mateo
24:35.
La Biblia es la voz de Dios, que todo el tiempo se deja oír, Salmos
119:105,
La Biblia es el Manual de Vida del creyente, te forma en
principios, valores y virtudes, Santiago 1:22, 2
Timoteo 3:16-17
La Biblia es la Guía Máxima para una vida con propósito, nos
confronta con nuestro pecado, nos corrige en el error, nos ánima en el
dolor, nos aconseja a la hora de decidir, nos exhorta, nos muestra el camino y nos da paz Mateo
7:24,
La Biblia es la Revelación de Dios, para conocer al Padre, al
Hijo y al Espíritu Santo en su profundo y eterno amor perdonador, Juan
1:1 y 5:39,
La Biblia son las Sagradas Escrituras que iluminan tu camino y
fortalecen tu ser, Juan 7:38.
La Biblia es consolación de Dios en tiempos de angustia y soledad, Salmos
18:35-36
La Biblia es sabiduría de Dios para hacernos prudentes, sabios y
santos, Salmos 119:130,Proverbios 2:2.
La Biblia es alimento al alma, fuerza vital al cuerpo y luz al
espíritu, Mateo 4:4 y 1 Pedro 2:2.
La Biblia es el camino a la libertad verdadera en Cristo Jesús, Juan
8:31-32,
La Biblia endulza y alegra nuestra cotidianidad, Salmos
119:103.
La Biblia nos enseña y nos muestra el Camino de salvación que
lleva al cielo para gozar eternamente viendo el rostro de Dios, Santiago
1:21, Proverbios 8:35 y Juan 10:28-30.
Así
que mi querido lector, no estés nunca más desesperado, no te sientas
abandonado, tampoco creas que estás solo o que nadie te comprende, porque Papá
Dios, nuestro Amado Jesucristo y nuestro Amigo Espíritu Santo, están junto a ti;
Dios te ama, te mira, te oye y te abraza continuamente cuando vienes a Él. Es
tan hermoso nuestro Dios, que nunca está muy ocupado como para no atendernos;
Él siempre espera por ti y por mí para consolarnos, darnos su amor y mostrarnos
un camino mucho más excelente. YO estoy con ustedes todos los días
hasta el fin, Mateo 28:19.
Ustedes deben procurar los mejores dones. Yo voy a enseñarles un camino mucho más excelente, 1 Corintios 12:31. Y en el capítulo siguiente, encontramos la preeminencia del amor, porque Amar a Dios y amar su palabra, nos capacita para valorarnos a nosotros mismo y amar a nuestro prójimo, cubriendo con su amor multitud de faltas y consolando en el dolor; amemos a Dios intensamente, sólo así veremos su gloria en la transformación de nuestra vida y nuestras circunstancias. ¡Qué el Dios de la esperanza los llene de todo gozo y paz en la fe, para que rebosen de esperanza por el poder del Espíritu Santo! Romanos 15:3.
Si usted no está seguro en la autoridad de la Biblia ni cree en la veracidad de la palabra de Dios, usted será esclavo de lo que le suene y le parezca bien al mundo, su vida será como una hoja mecida por el viento que va de aquí para allá sin tener un buen final en su carrera.
Ustedes deben procurar los mejores dones. Yo voy a enseñarles un camino mucho más excelente, 1 Corintios 12:31. Y en el capítulo siguiente, encontramos la preeminencia del amor, porque Amar a Dios y amar su palabra, nos capacita para valorarnos a nosotros mismo y amar a nuestro prójimo, cubriendo con su amor multitud de faltas y consolando en el dolor; amemos a Dios intensamente, sólo así veremos su gloria en la transformación de nuestra vida y nuestras circunstancias. ¡Qué el Dios de la esperanza los llene de todo gozo y paz en la fe, para que rebosen de esperanza por el poder del Espíritu Santo! Romanos 15:3.
Si usted no está seguro en la autoridad de la Biblia ni cree en la veracidad de la palabra de Dios, usted será esclavo de lo que le suene y le parezca bien al mundo, su vida será como una hoja mecida por el viento que va de aquí para allá sin tener un buen final en su carrera.
Mg.
MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino