PRINCIPIO DE OBEDIENCIA

PRINCIPIO DE OBEDIENCIA 

Acontecerá que, si oyeres atentamente la voz de YHWH tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también YHWH tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra. Y vendrán sobre ti estas bendiciones y te alcanzar. Deuteronomio 28:1.

Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios…1 Samuel 15:22.

No todo el que me dice SEÑOR, SEÑOR, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, Mateo 7:21.

Recordemos por un momento qué es un principio: así como el Génesis es el Bereshit, principio y comienzo de la narración histórica bíblica de la humanidad y de un pueblo en particular que nos ha dejado ejemplo y aprendizaje, los principios son el punto de partida que Dios el Creador ha estipulado y marcado para que el hombre sea correcto e íntegro en su comportamiento y estilo de vida para que sea ejemplar, de testimonio y agradable, no solo a Dios, sino a quienes nos conocen y rodean. El que me ama, obedece mi palabra, y mi Padre lo amará, y habitaremos en él. Juan 4:23.

Obediencia es un principio bíblico que si lo cumplimos llegamos a ser personas virtuosas; la raíz hebrea es sh´ma, que alude a oír y prestar atención para cumplir, acatar y seguir mandatos, asumiendo órdenes y teniendo en cuenta las restricciones; la raíz griega es arché, arqhé, arjhé o ARJÉ, que significa fundamento, inicio, base, origen, punto de partida, estos dos conceptos son muy profundos para entender la importancia de ser obedientes al SEÑOR con humildad y pasos de fe. Más aún, hallándose en la condición de Hombre, el Hijo de Dios se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte de cruz. Filipenses 2:8.

Dios es el Creador origen del universo, es Él quien ha entregado la sustancia de la vida y nos ha dejado herencia de salvación y vida eterna en su Hijo, supremo ejemplo de obediencia y su Manual que contiene los deberes básicos pero grandiosos que nos instruyen para la vida. Del Creador y su palabra brota la esencia y valor de la vida humana en dependencia a Dios, quien es el máximo Maestro y SEÑOR, origen de las leyes, instrucciones, enseñanzas, advertencias, juicios y retribuciones. Nuestro máximo ejemplo de obediencia, Jesucristo obedeció al Padre para cumplir su misión, toda la ley y los profetas. Aunque era Hijo, mediante su sufrimiento aprendió a obedecer; y consumada su perfección, llegó a ser Autor de salvación eterna para todos los que le obedecen. Hebreos 5:8-9.

Los principios nacieron en el corazón de Dios y los gravó en la conciencia humana, como sustancia, origen, fundamento y fuente del bien para vencer el mal, para que los vivamos y mostremos en nuestra forma de hablar, manejarnos y actuar al relacionarnos con Dios, con los semejantes y con el medio ambiente. Sigan por el camino que el SEÑOR su Dios les ha trazado, para que vivan, prosperen y disfruten de larga vida en la tierra…Deuteronomio 5:33.

Cuando la primera familia falló, Dios decidió venir en forma de hombre para mostrar y recordar sus principios, que son fundamento y valuarte de la vida para marcar la diferencia con los valores relativos que se balancean entre lo bueno y lo malo, lo correcto y lo incorrecto, lo que es y lo que no es; algo que el engañador trajo a confusión después de la caída; nuestro Salvador vino a recordar y personificar la pureza, inmutabilidad y verdad de los principios y ordenanzas que deben ser vigorizados, aprendidos y recordados por todos nostros con el carácter  del Hijo de Dios; así que los principios no son opciones, alternativas o escogencias al azar según la conveniencia, son obligaciones morales imperativas para conservar la vida sana y limpia, gestando asi una sociedad sobre la base de lo santo, lo bueno y la transparencia al 100%. Por lo tanto, así dice el SEÑOR: YO pongo por fundamento en Sión una piedra, preciosa, fundamental, bien colocada, el que crea en ella, NO será perturbado. Isaías 28:16.

La obediencia además de ser un principio sustentado en Dios también es una virtud y un arma de guerra que nos proteje y debe caracterizar la personalidad y comportamiento de los redimidos para que el maligno no tenga acusación en contra; como arma de guerra y principio debemos prestarle mucha atención para vivir en la voluntad de Dios, porque obediencia es sumisión y sometimiento a nuestro Dios y si somos obedientes, Dios tomará el control de nuestra vida cotidiana para vivir seguros y sin afanes en el descanso del Padre. Hebreos 4. Ser obedientes implica aceptar los designios de Dios, con contentamiento, sujetos a su gobierno y su autoridad, asi como la de nuestros padres, para acatar sus instrucciones, leyes y advertencias que nos guardan del mal y nos permiten vivir rectamente delante de Dios. Guarda, hijo mío, el mandamiento de su padre, y no abandones la enseñanza de tu madre. Proverbios 6:20.to

La obediencia no nace con nosotros, necesitamos aprenderla, desarrollarla y perfeccionarla con el paso de los años para que se convierta en un hábito. Nuestra obediencia primera la aprendemos cuando somos niños atendiendo a las enseñanzas de nuestros padres, así es como aprendemos a ser obedientes a Dios; esta obediencia aprendida desde la niñez nos permite ser respetar a los maestros, los mayores, los ancianos, las leyes de la nación y autoridades superiores en general. Sométase toda persona a las autoridades que gobiernan…Romanos 3:1-7, Colosenses 3:22 y Tito 3:1.

Si aprendemos obediencia cuando somos niños y jóvenes, esto nos ayudará a ser buenos ciudadanos, personas serias, sociables y responsables en la edad adulta; obedecer es uno de los mandatos y principios más importantes para una vida en orden, llena de paz y progreso porque va unida a la sujeción, el cumplimiento, el compromiso y la humildad frente a quien nos dirige y tiene autoridad sobre nosotros en determinado momento de la vida. La obediencia como mandato y principio de Dios no admite tibiezas ni términos medios de pasividad o indiferencia, debe ser una estricta resolución del corazon, en negación de nosotros mismo, propio de un carácter firme que acata órdenes y presta atención a la orientación y dirección. Camino de la vida es guardar la instrucción; pero quien desecha la reprensión, yerra. Proverbio 10:17.

Una persona obediente no está exenta de experimentar problemas, desiertos y pruebas en la vida, pero ciertamente debe estar seguro que, al vivir y mantener este principio, obtendrá recompensas divinas, porque Dios es fiel para con el fiel y justo para con el justoñ Él cumple sus promesas. Y nosotros somos testigos suyos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen. Hechos 5:32. 

La obediencia es además, la condición de un corazón que ama a Dios, es por que los obedientes sin enseñables y dóciles para aprender y sujetarse con espíritu afable y dispuesto, sin importar las circunstancias ni quien esté a favor o en contra, puesto que en ciertos casos podría resultar difícil obedecer y acatar instrucciones, quizá tengamos que hacer un esfuerzo superior con algo que nos cueste abandonar, como en el caso de cambiar hábitos y costumbres o dejar apegos que en nada nos benefician, por lo tanto debemos pagar un precios de obediencia y sometimiento primero a Dios, luego a los hombres, pero nunca podemos negociar nuestros principios y nuestra fe y mucho menos poner en entredicho nuestra dignidad e integridad de personas morales, como tampoco debilitarnos en  nuestra confianza en Dios, sino pararnos firmes en su gracia y su verdad, de seguro seremos recompensados por hacer lo que nos corresponde. Si obedecen a Dios y le sirven, Dios les concederá días de paz y bienestar. Job 36:11.

Para ser obedientes necesitamos la fe como escudo y andando en la verdad como coraza de justicia para esquivar todo dardo de fuego del malo y avanzar Con Pasos Firmes en Dios, llenos de gozo y esperanza, de la mano de Cristo, mayores cosas que las que hemos visto veremos. Nuestra obediencia demuestra la calidad y firmeza de nuestra fe, obedecer a Dios glorifica su nombre, nos proteje y nos hace gratos a sus ojos, pues asi le demostramos nuestro amor y fidelidad. Entonces Samuel dijo: A Dios le agrada más que se le obedezca, y no que se le ofrezcan sacrificios…; vale más obedecerlo y prestarle atención que traerle ofrendas de animales. 1 Samuel 5:2.

La obediencia nos permite tener una vida sobrenatural, de milagros, llena de alegría, tranquilidad y buenas cosas; obedecer demuestra que no confiamos en nosotros mismos, ni nos apoyamos en nuestras propias fuerzas, sino que toda nuestra vida reposa y esta escondida en Dios, mostrando fruto en el Espíritu que desde nuestro interior enaltece al Salvador pues seguimos sus pisadas. Pues para esto nos llamó el Padre, ya que Cristo sufrió por nosotros, dándonos ejemplo para que sigamos sus pisadas. 1 Pedro 2:21.

Nuestro Padre celestial todo el tiempo está dispuesto a defender y pelear a nuestro favor, Él se agrada de los que le creen y obedecen su voz, aunque muchos salgan contra nosotros por un camino para atacarnos, Dios los hará huir por siete caminos en nuestra obediencia y sometimiento a Él, nuestro Padre es Varón de guerra y hará que los enemigos corran despavoridos, porque la obediencia representa justicia, rectitud y verdad. Queridos hermanos, si el corazón no nos condena, tenemos confianza delante de Dios y recibimos todo lo que le pedimos porque obedecemos sus mandamientos y hacemos lo que le agrada…1 Juan 3:2-22.

Presento algunos tips que nos ayudan a ser obedientes: 1) Estudiemos y meditemos en la grandeza y poderío de Dios, veamos cuán grande es Él ante el insignificante enemigo, Juan 5:32; 2) Conozcamos a fondo las verdades bíblicas, meditemos e investiguemos acerca de cada tema a profundidad, Colosenses 3:16; 3) Creamos que Dios verdaderamente tiene un plan extraordinario para nuestra vida en particular, Jeremías 29:11; 4) Demos pasos de fe y tomemos riesgos decisorios actuando con la mirada y el corazón puesto en Cristo. Hebreos 11.

Existen buenas razones para obedecer a Dios sin importar las circunstancias o lo que opinen los demás. Hay muchas e innumerables bendiciones y beneficios importantes para prestar atención y acatar sin razonamientos humanos lo que el Creador ordena, manda, establece y decreta para el bienestar de su pueblo; saber que es Dios quien lo dice es suficiente razón para ser obedientes sin cuestionar, así no existieran otras razones, somos hijos de Dios, por lo tanto debemos atender y obedecer al Padre y seguir al SEÑOR en su ejemplo e instrucciones, de vida. ÉXODO 19:5, nos dice que si obedecemos a Dios, venimos a ser su especial tesoro, imagínense si seres cuidados, protegidos y defendidos. ¡Sublime gloria!

Ser obedientes y estar atentos a la voz de voz de Dios es lo más importante para que vivamos las promesas, las bendiciones nos alcancen y su mano nos liberte de los enemigos opresores, 2 Reyes 13:4-5.

1.  Ser obedientes nos permite estar sanos y libres de enfermedad. Éxodo 25:26.
2.  Ser obedientes a Dios es la clave del éxito, Josué 1:8.9
3.  Él escucha nuestras oraciones y las responde. Salmos 66:18-19.
4.  Podremos disfrutar de la profunda presencia de Dios Juan 14:23.
5.  Obtendremos mayor sabiduría, Deuteronomio 4:5-6. Proverbios 2:7.
6.  Podremos ser verdaderos amigos de Dios, Juan 15:14.
7.  Tendremos una existencia segura y feliz. Levítico 25:18.
8.  Nos perfeccionamos constantemente en Dios.1 Juan 2:5.
9.  Recibimos bendiciones continuamente, Deuteronomio 1:26-28,28:1-14.
10.  Encontraremos la verdadera felicidad, Proverbios 29:18.
11. Tenemos y vivimos paz, Salmos 37:37.
12. Tendremos una larga vida, Proverbios 3:1-2.
13. Somos herederos en su reino junto a Él. Mateo 9:16-17, Apocalipsis 21:1-4, 22:6-7.
14. Somos guiados y justificados, Romanos 6:16-18.

Consecuencias de la desobediencia, Proverbios 10:17

1.  Reprensión y castigo de Dios, Jonás 1:17, Romanos 2:8-9.
2.  Angustia y desesperación, Jonás 2:2, Salmos 18:6. Hebreos 4:6.
3.  Separación de Dios, y opresión demoniaca, Jonás 2:3a-4, 1 Samuel 15. Efesios 5:6.
4.  Confusión, enojo y muerte. Levitico 10:1-10, Jonás 2:5, Jonás 4:4, 1 Timoteo 1:8-11.
5.  Puertas cerradas y destrucción, Jueces 16, Jonás 2:6a, Job 12:13-14, Génesis 7:16b.
6.  Trae prueba, dolor y Muerte, 2 Samuel 6:6-7, Jonás 2:6b-7, 1 Reyes 13:24.
7.  Se aleja la misericordia de Dios, 2 Samuel 24:4, Jonás 2:8.
8.  Trae enfermedad, Números 2, 1 Reyes 13:4 Salmos 35:8.
9.  Trae escases, Jeremías 18:10, Hageo 1:5-6, Lucas 15:14.
10.  Produce temor e inseguridad, 1 Samuel 15:24 y 18:11-12.
11. Nos alcanzan las maldiciones, Deutoronomio28:15-68 y Malaquías 2:2. 12. Podríamos ser desechados por el SEÑOR, 1 Samuel 28:16-20.

¡Aleluya, vale la pena ser obedientes y no rebeldes!

Pregúntate: ¿Caminas obedientemente en todas las cosas? ¿Eres un discípulo fructífero para Cristo y el reino de Dios? ¿La prueba o el sufrimiento que estás pasando es quizá por un acto de desobediencia? No te inquietes, el SEÑOR te ama y te anima hoy para que empieces a caminar en obediencia dando pasos de fe, confiando en tu Padre celestial y reflejando a Cristo, podrás ver la recompensa; arrepiéntete, corrígete y vuelve al camino que Él te ha indicado en su palabra. Dios te bendiga grandemente.

Lic. MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino.