EN TIEMPOS DE CRISIS RENDIRSE A CRISTO PARA ORAR Y ADORAR PORQUE ESO ES LO
MEJOR
¿Por
qué se alborotan los pueblos paganos? ¿Por qué hacen planes sin sentido? Los
reyes y gobernantes de la tierra se rebelan, y juntos conspiran contra el Señor
y contra su rey escogido, Salmos 2:1-2.
Tú encenderás mi lámpara.YHWH mi Dios alumbrará mis tinieblas. Contigo desbarataré ejércitos, y con mi Dios asaltaré los muros, 2 Samuel 22:29-30 y Salmos 18: 28-29.
Porque Dios es el Rey de
toda la tierra, canten alabanzas con inteligencia, Salmos 47:7.
Si somos sinceros y realistas, sabremos que la vida sobre la
tierra se vuelve cada día más dura e insegura debido a la falta de temor a Dios, el aumento del mal y la frialdad afectiva en los corazones cubriendo a miles de almas sin Dios, sin ley y sin humanidad; en realidad son momentos
cargados de expectación e incertidumbre por lo que harán los gobiernos
tiranos de las naciones y los inmaduros seguidores indolentes que apoyan el crimen y la anarquía; gente, por lo general jóvenes desinformados, desconocedores de la historia real, chicuelos facilistas buena vida que reclaman lo mejor pero no aportan nada bueno. Vivimos en un mundo donde suceden cosas terribles cada segundo, y por eso debemos tener la actitud de adoradores que oran e interceden ante su Creador por vida y libertad. Que todo
lo que respira, alabe a Dios, Salmos 150:5.
Hay muchas situaciones que nos tratan de hacer perder el equilibrio
sacudiendo nuestra fe, circunstancias en muchos momentos nos tratan de sacar
del dominio propio y nos ponen muy tristes, Pero yo, Señor, confío en ti yo he dicho: ¡TÜ eres mi
Dios! Salmos 31:14.
A veces se hace difícil orar, sentimos que no sabemos cómo hacerlo
ni qué decirle al Señor, es tanta la carga y el dolor, que no podemos más que
llorar quebrantados ante sus presencia, pero finalmente nos levantamos de la
mano del Señor y logramos gemir y guerrear en el espíritu, nuestra vida muchas
veces golpeada nos ha lanzado a la lona. Pero es ahí, exactamente, en ese
momento de encrucijada y de crisis, que debemos permanecer delante de Dios
adorando y orando para encontrar dirección, consuelo y consejo, no humano, sino
celestial y requerimos:.
1. SANTIDAD Y SABIDURÍA. Y si alguno de ustedes tiene falta de sabiduría, pídasela a Dios,
Él es abundante en darla sin medida y sin reproche, y le será dada, Santiago 1:5.
Cuando estamos en medio de una tormenta es posible que debamos tomar decisiones
firmes e importantes, y la más urgente y sabia decisión es que muchos decidan santificarse para orar a Dios y que las situaciones que parecen insalvables, enredadas y humanamente sin salida, sean
transformadas por el poder y autoridad del Creador. Debemos orar en santidad y con sabiduría para no tener estorbos sino buen juicio, no podemos presentarnos ante Dios de cualquier modo, especialmente cuando estamos cargados, Job lo experimentó y dijo: Desde la ciudad gimen los moribundos, y claman las almas de los heridos de muerte, pero Dios no atiende su oración, Job 24:12; a veces es mejor guardar silencio ante el Señor en actitud de adoración porqiue Él nos entiende y mientras adoramos surjen ideas o viene palabra para darnos dirección y consuelo aquietando nuestro espíritu, vengan, adoremos; postrémonos de rodillas
ante el Señor nuestro Hacedor, Salmos 95:6.
Todo el tiempo necesitamos sabiduría y prudencia con
el fin de tomar acciones y decisiones correctas para Caminar
con pasos firmes en Dios, en momentos complejos es mejor tomar un respiro y esperar a sus pies. La palabra de Dios nos enseña que no
debemos apoyarnos en nuestra propia prudencia, en Proverbios 4 encontramos los beneficios de la sabiduría que viene del Santo.
Por otra parte, y aunque muchos no lo crean, la falta de santidad es obstaculo a la oración y la respuesta y no pedimos con sabiduría ni buen juicio; Dios nos demanda ser santos todo el tiempo y solo Él puede ayudarnos en momentos de crisis a
reconocer entre lo que viene de Dios y lo que no proviene de Él, solo el
Espíritu Santo nos puede indicar y dar el consejo perfecto para echar fuera los
susurros engañosos y confusos del enemigo que sabe que hay una puerta abierta y con aparente piedad, mentiras y
verdades a medias quiere enredarnos, pero el Señor rencenderá nuestra lámpara; el Padre alumbrará nuestras tinieblas. Con Dios desbarataremos ejércitos, y con nuestro Rey asaltaremos muros, Salmos 18:28-29, y el Amado, nos enséña buen sentido y sabiduría, porque en sus mandamientos hemos creído,
Salmos 119:66.
2. ACTUAR POR DISCERNIMIENTO. Señor, da
a tu siervo un corazón con entendimiento para juzgar a tu pueblo, y para
discernir entre el bien y el mal. Pues ¿quién será capaz de juzgar a este
pueblo tuyo tan grande? 1 Reyes 3:9 .
Cuando la vida nos tira al piso somos vulnerables y le será fácil al adversario que manipule; en ese
momento, sentimos
mayor presión y no sería prudente tomar acciones que podrían
resultar equivocadas y
fuera de la voluntad de Dios. Cuando estamos confundidos, todas las dificultades en
nuestra vida se amplifican debido al miedo, la inseguridad y la duda, que es lo primero, que
debemos vencer para llenarnos de amor, paz e inteligencia en Dios, Donde
hay amor no hay miedo. Al contrario, el amor perfecto echa fuera el miedo, pues
el miedo trae castigo. Por eso, si alguien tiene miedo, es que no ha llegado a
amar perfectamente, 1 Juan 4:18.
En la tranquilidad y el amor de Dios, podremos discernir y ver todo lo que está
escondido y perturba, a la vez que es el momento crucial para clamar y hacer
silencios, deseando escuchar la suave del Señor, Él vencerá por encima
de toda circunstancia. Solo rendidos a
los pies de Cristo podremos entender su maravilloso consejo: para algunos podría ser una suave y delicada voz que resuena en
nuestra cabeza, para otros una maravillosa sensación de paz y quietud absoluta en el
corazón, y para otros puede ser una voz audible, alta y clara que convence el alma
proporcionando dirección y seguridad con paz absoluta para actuar,
Pongan atención, habitantes de Judá y de Jerusalén, y tú, oh rey Josafat. El
señor les dice: No tengan miedo ni se asusten ante ese gran ejército, porque
esta guerra no es de ustedes sino de Dios, 2 crónicas 20:15.
En
cualquier caso, el discernimiento ayudará eliminar los engaños del enemigo, dándonos
la respuesta apropiada. El discernimiento nos fortalece la fe y confianza total en los deseos de Dios.
Recordemos que Dios quiere y sabe qué es lo mejor para nosotros en cualquier
situación,
aún la dificultad obrará para bien, El que no es espiritual
no acepta las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura. Y
tampoco las puede discernir, porque son cosas que tienen que juzgarse
espiritualmente, 1 Corintios 2:14.
3.
BUSCAR LA VOLUNTAD DE DIOS. Ustedes deben orar así: Padre nuestro que estáis en los cielos,
santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el
cielo, así también en la tierra, Mateo 6:10.
A veces nos enredamos porque en el fondo queremos que las cosas
funcionen como nos imaginamos que debieran marchar, y ahí podríamos quedamos
atrapados gastando tiempo y vitalidad en un momento que exige pronta acción con
sensatez, y que queremos que las situaciones se resuelvan de inmediato a nuestra
conveniencia, sabiendo que el Señor nos enseñó a no afanarnos, Podremos hacer nuestros planes, pero el Señor
determinará nuestros pasos, Proverbios 16:9.
Muchas veces perdemos tiempo corriendo de un lugar a otro y pensando
arreglar las cosas, dejando de orar para saber la voluntad de Dios sea hecha.
Ahí es el momento preciso de alabar y adorar para darle la gloria a Aquel que
todo lo puede, porque todo lo sabe. Y eso es lo que exactamente Dios quiere,
que lo adoremos, que rindamos nuestra propia inteligencia y sabiduría para que
se obren sus maravillas de acuerdo a sus planes, Deléitate en el
Señor…encomienda a Jehová tu camino, confía en Él, y Él hará…Salmos 37; Fíate
de Jehová de todo tu corazón, no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo
en todos tus caminos, y Él enderezará tus pasos…Proverbios 3.
Por la falta de alabanza, adoración y acción de gracias es que
Dios muchas veces nos demora una respuesta, porque Él todo el tiempo está
buscando adoradores, corazones agradecidos, porque él quiere enseñarnos a
desarrollar una vida de adoración y un carácter de alabadores. Por eso no
podemos pasar por alto esos tiempos de alabanza, adoración y acción de gracias
cuando estamos a solas con Él. Surgirá PAZ en la tormenta. Recordemos que
eso fue lo que hicieron Pablo y Silas cuando estaban presos, y lo que ordenó
muchas veces el pueblo de Israel cuando estuvieron rodeados de los enemigos.
4.
PREDICAR A TIEMPO Y A DESTIEMPO, Pues si
anuncio el evangelio, no tengo porque gloriarme; porque me es impuesta
necesidad; y ¡Ay de mi si no anuncio el evangelio¡ Por lo cual, si lo hago de
buena voluntad, recompensa tendré; pero si de mala voluntad lo hago, 1 Corintios
9:16.
No se trata
de predicar porque nos gusta o nos nace hacerlo, sino porque al hacerlo
obedecemos a Dios y nos sujetamos a su voluntad, pues Dios desea que muchos se
arrepientan y sean salvos, y somos nosotros los que conocemos a Cristo, quienes
tenemos la responsabilidad de hacer lo que el Maestro de maestros nos enseñó
con su propia vida, Por eso, si predico por mi propia
voluntad, tendría derecho a una recompensa; pero si lo hago, es porque tengo la
obligación impuesta, entonces estoy cumpliendo el encargo que me fue dado por
Dios, 1 Corintios 9:17.
Si
predicamos y damos testimonio, muchos pueden salir de su estilo de vida para abandonar
esa clase de comportamiento que está afectando tan terriblemente a la humanidad
deshumanizada e indolente; llevar el mensaje de vida a los que están
encarcelados por el maligno y esclavos del pecado, es una forma de minimizar el
desorden, la perversión, la violencia, la corrupción y toda clase de maldad que
se mueve rampantemente alrededor de nosotros, porque el fruto del
justo es árbol de vida; y el que gana almas es sabio, Proverbios 11:30.
Es
cierto que la palabra dice que la maldad se multiplicará y el amor se muchos se
enfriará, pero si luchamos de la mano de Dios y las almas vienen a Cristo, le
estaremos ganamos al maligno y nuestra carga se apaciguará, no solo a nivel
personal sino familiar, social, nacional y global porque Dios no llenará de su
paz y su gracia, Y el conocimiento de la gloria del
Señor llenará entonces toda la tierra, como las aguas llenan el mar, Habacuc 2:14. Y
este evangelio del reino se predicará en todo el mundo como testimonio a todas
las naciones, y entonces vendrá el fin, Mateo 24:14.
Quizá ahora
mismo la vida y las circunstancias te tienen en el piso, y quizá muchos nos sintamos
tan derrumbados y confundidos que no logramos una quietud plena; quizá estés
sintiendo que no luz alrededor, pero hay algo cierto, Jesús tiene nuestro
consuelo, Jesús nos ama y nos comprende; busquemos su presencia y su consejo en Él, desahoguemos con el Sabio de los sabios y
hallaremos refrigerio para nuestros huesos. No dejemos de orar y adorar y se
allanará el camino.
5. ADORAR, ALABAR Y ORAR CON INTENSIDAD, Siete veces al día te alabo a
causa de tus justos juicios, Salmos 119:164. El pecado rompe la comunión con Dios, pero la adoración
y la alabanza profundizan nuestra amistad con el Eterno y paraliza al
adversario, mientras lo exaltamos, Él pelea por nosotros y destruye a los
enemigos como lo hizo con Josafat, 2 Crónicas 20. Aunque andemos en tinieblas de dolor, tristeza y prueba, Dios alumbrará mientras los adoramos.
Un adorador consagrado vive en victoria porque
es Dios quien desbarata los ejércitos de maldad al disponer sus ejércitos contra
el enemigo no lo toque, es por eso que el Padre sigue buscando adoradores en
Espíritu u en verdad, mientras adoramos luz nos resplandece y la lámpara de
nuestra alma se ilumina con la Luz de Cristo, lo cual ve el enemigo y huye, Salmos 18:28-29.
Hemos sido creados para darle placer al
corazón de Dios, y qué mejor forma de hacerlo que adorando.. ¡Alabemos y
adoremos al Señor en todo tiempo aunque el alma este abatida!. Adorarlo
sin límites bajo la dirección del Espíritu Santo ha de ser nuestra pasión,
Colosenses 1:16-17. Los ángeles adoran al Señor día y noche, diciendo:
santo, santo, santo, es el Señor, Dios
Todopoderoso, el que era, el que es y el que ha de venir…Apocalipsis 4: 8-11.
Oremos
juntos: Padre
amoroso, Señor misericordioso, envía tu luz, envía tu consuelo, te lo suplico,
no solo para mí, sino para todos aquellos que leen este mensaje, toca sus corazones,
quebranta los cerrojos de bronce, rompe puertas de hierro y derriba montes de
obstáculo que impiden, roban la vida y la paz a tus amados hijos; ayúdanos a
tomar decisiones correctas y sabias, conforme a tu voluntad, iluminamos y
llénanos de tu Espíritu Santo activando el don del discernimiento y la
sabiduría para que podamos alinearnos a su planes y maravillas, en el nombre de
Jesucristo, Amén.
Mg. MEHC hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su
reino.
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