ESPERAR EN DIOS TIENE GALARDÓN Y VICTORIA
Cobren ánimo y ármense de valor, todos los que esperan en el SEÑOR. Salmos 31:24.
El SEÑOR cuida de los que le temen, y de los que esperan en su gran amor. Salmos 33:18.
¿No has sabido, no has oído que el Dios eterno es JHWH, el cual creó los confines de la tierra? No desfallece, ni se fatiga con cansancio, y su entendimiento no hay quien lo alcance. Él da fuerzas al cansado, y multiplica fuerzas al que no tiene ninguna. Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen. Pero los que esperan en JHWH tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán, Isaías 40:28-31.
Esperar tiene que ver con la esperanza que se nombra tantas veces en la Escritura, esperar en Dios sin esperanza en la palabra, no será nada fácil, pero tener fe y esperanza bíblicas es lo más seguro y confiable en el tiempo de espera para que no demos pasos en falso; Dios siempre responde, pero a nosotros nos corresponde saber esperar en Él por su palabra; esperar es la practica del fruto del Espíritu en lo que tiene que ver con paciencia y calma, aprovechando bien el tiempo para reflexionar cuando los dias no son tan buenos; la espera es necesaria para madurar y aprender de las experiencias del día a día. No te impacientes a causa de los malignos, ni tengas envidia de los que hacen iniquidad. Porque como hierba serán pronto cortados, y como la hierba verde se secarán. Confía en YHVH, y haz el bien; habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad. Deléitate asimismo en YHVH, y Él te concederá las peticiones de tu corazón. Encomienda al SEÑOR tu camino, confía en Él; y Él hará. Exhibirá tu justicia como la luz, y tu derecho como el mediodía. Guarda silencio ante YHVH, y espera en Él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, Por el hombre que hace maldades. Salmos 37:1-7.
Esperar en Dios es fortaleceler la fe a través de la paciencia y la confianza en Él, aguardando firmes en lo que enseña su palabra, para alcanzar sus propósitos y hacer su voluntad, buena, agradable y perfecta; en tal caso la esperar viene a ser como una semilla de vida que nos permitirá crecer y avanzar integralmente, sujetados y agarrados fuerte del Padre, doblegando nuestros sentimientos, emociones y pensamientos para alinearnos al señorío de Cristo, en el poder y grandeza del Espíritu Santo, que además de habitar en nosotros, nos gobierna, revela y confirma promesas que se ciñén y acomodan a la palabra para que decidamos con certeza, moviéndonos oportunamente con la sabiduría de Dios. Tú, vuélvete a tu Dios, practica la misericordia y la justicia, y espera en YHVH, tu Dios. Oseas 12:6.
La Biblia enseña que todo tiene su tiempo y su hora debajo del sol, y nosotros, los hijos de Dios como ciudadanos de su reino, debemos aprender a movernos y aquietarnos según los tiempos de Dios para no vivir al ritmo del mundo; saber esperar es una buena forma de negarnos a nosotros mismos, vencer los caprichos y aceptar lo perfecto de Dios. De hecho, nos conviene hacer pausas y tomar descansos en el corre corre de la vida, deteniéndonos a mirar a nuestro alrededor todo lo que se mueve de un modo y de otro; pues esperar es permitir el fluir de la vida en el tiempo de Dios y hacia el cambio creador, lo cual se nutre de todo cuanto nos acontece, con el fin de que al final cultivemos buenos y favorables hábitos y resultados. Pues nosotros, por medio del Espíritu, esperamos por la fe la esperanza de justicia. Gálatas 5:5.
Nuestra espera en Dios debe convertirse en descanso espiritual para orar y buscar el consejo y la guía del Espiritu Santo; esperar no es un tiempo aburrido ni impaciente como en el mundo natural; nuestro tiempo de espera es la antesala al cobijo y bendición plena de Dios, quien recompensará nuestra paciencia y permanencia en el camino del aprendizaje que hace crecer, Él verá nuestro corazón enseñable y dócil que pacientemente espera; es por eso que debemos poner buena voluntad y buena cara, sin quejarnos, sino dando gracias por lo lindo que vendrá, pues en la mayoria de los casos, recibimos del Padre celestial lo impensado por nosotros, pero planeado por Dios. Porque Aquel que es poderoso para hacer todo mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, obrará por el poder que actúa en nosotros. Efesios 3:20. Esto es, el Espíritu Santo).
La espera en Dios es parte del trato personal del Padre para perfeccionar nuestro caracter hasta que lleguemos a la estatura del carácter de Cristo, y en el tiempo preciso recibiremos de Dios lo que realmente necesitamos, lo cual Dios conoce, pues la bendición divina nunca vendrá por nuestros impulsos y esfuerzos ni conexiones humanas, que satisfacen caprichos y deseos carnales y viscerales; con la espera aprendemos a vivir serena y calmadamente a la manera de Dios, para que lleguemos a ser tierra fértil que da fruto al 30, 60 y 100%, fruto abundante sobre la base de la fe y la esperanza en Dios, y no por la aceleración o el afán de la carne. Espero en el SEÑOR; en Él espera mi alma, porque en su palabra tengo mi esperanza. Salmos 130:5.
Algunos tips para aprender a esperar en Dios.
1. ANHELEMOS A DIOS EN LA ESPERA. SEÑOR, Tú eres mi Dios; te busco con ansia. Mi alma tiene sed de Tí, y mi ser te anhela cual tierra seca y árida donde no hay agua. Salmos 63:1. Esperar es confianza y certeza a lo que SEÑOR dice en su palabra, deseando alcanzar su gracia y favor; El Salmista y rey David escribió este texto en un tiempo de gangustia estresante cuando era perseguido por su propio hijo Absalón; allí él pudo entender en que sólo pidía esperar la ayuda de Dios y recuperar la paz de su espiritu, la liberación de su alma y la provisión de una solución perfecta. Alma mía, en Dios solamente reposa, porque de Él es mi esperanza...Esperen en Dios en todo tiempo, oh pueblos; derramemos delante de Él nuestro corazón; Dios es nuestro refugio. Selah. Salmos 62:5 y 8.
Debemos esperar en Dios, con ansía, seguridad y ferviente fe queriendo tenerlo a Él, para hallar alivio en cualquier o por personas difíciles o enemigos, pues nos defenderá, pero el que se confía de sí mismo y sus propias capacidades, estará perdido y caminará en un callejón sin salida, porque sólo Dios es poderoso para salvarnos de toda angustia y din salida, pues Dios es omiciente, lo conoce y lo ve todo a nuestro alrededor y lo profundo de los corazones.Jeremías 17:7-8; El SEÑOR es todo lo que tengo. ¡En Él esperaré! Lamentaciones 3:24.
2. AMEMOS A DIOS Y ESCUCHEMOS SU VOZ EN LA ESPERA. El amor todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, y todo lo soporta. 1 Corintios 13:7. Cuando amamos queremos que la persona amada se nos acerque, toque a nuestra puerta, y se quede con nosotros, así es con Dios; esperar confiando en Dios, es demostrarle nuestro amor y ansiar estar en su presencia para escucharlo hablar, deseosos de aprender y recibir sus instrucciones para obedecerlas de manera personal y directa. Y para oír esa dulce y poderosa voz cargada de amor, es necesario estar en quietud y a solas con Él, buscando diariamente su rostro en oración y escudriñando la Biblia, expresándole todo lo que guardamos dentro y apropiándonos de las promesas que tocarán nuestro corazón. La mejor forma de conocer a Dios es en la espera con el anhelo de ser más parecidos a Jesús, allí Dios nos habla, instruye y fortalece, mientras nosotros nos inclinanamos ante su presencia. Bienaventurado el hombre que me escucha, velando a mis puertas cada día, aguardando a los postes de mis puertas. Porque el que me halle, hallará la vida, y alcanzará el favor de YHVH. Proverbios 8:34.
Pero si usted no ora ni lee la Biblia, no sabrá cómo piensa Dios ni cómo es El, por lo tanto, tampoco podrá practicar su palabra, y quizá, ni siquiera lo ha intentado, entonces no diga que Dios no le responde y que no recibe respuesta a sus necesidades; para esperar en Dios hay que saber qué dice la Biblia y que le agrada y desagrada a Dios, andando por fe para recibir milagros y respuestas; para el Dueño del universo no hay nada imposible ni dificil, Él responderá por dificil que sea la petición y la necesidad. Confía en el SEÑOR y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y Él enderezará tu senda (tu vida). No seas sabio en tu propia opinión; teme a YHVH y apártate del mal; porque será medicina a tu cuerpo y refrigerio para tus huesos. Proverbios 3:5-8.
Confiar, fiarse y temer a Dios para apartarse del error es saber esperar lo de Dios para no llenarnos de problemas por la locura del apresuramiento; esperar el tiempo de Dios es como entender una clave morse, donde logramos descifrar los mensajes del cielo, a pesar de la pesadez, acelere y bulla del mundo; tenemos que agudizar los cinco sentidos espirituales para saber lo que Dios tiene en su pura potestad, así evitamos hacer lo que nos da la gana cuando nos da el impulso; Dios siempre está hablándonos, por eso, debemos andar en la sintonía de la calma que fluye del Espíriru, pues Dios se puede manifestar en lo insólito y lo inesperado, en sus de repente nos puede dar alertas de quietud o acción usando el don del discernimiento y con los pies en la tierra. La fe es certeza de lo que se espera, y la convicción de lo que no se ve. Hebreos 11:1.
3. DELEITEMONOS EN LA PRESENCIA DE DIOS MIENTRAS ESPERAMOS. He aquí, aunque Dios me matare, en Él esperaré. Delante de Él defenderé mis caminos y Él mismo será mi salvación...Job 13:15-16. Esperar pacientemente en Dios por duras que sean las circunstancias, nos mantiene conectados a su gracia y favor, anhelantes de respuesta y cambio con ralación a nosotros mismos, las personas, las circunstancias y las oportunidades a tomar; con paciencia en la espera somos bendecidos, transformados, galardonados y bendecidos plenamente. Todos los pajarillos y animales del campo esperan en ti, para que les des su comida a su tiempo. Salmos 104:27.
Los pajarillos no se preocupan buscando alimento, ellos pacientemente reciben el sustento del Creador y se sacian del alimento que Dios permite en la tierra, porque los animales saben cómo encontrarlo y están atentos de la provisión a su debido tiempo, ellos por siempre tienen algo para comer cada día. Los animales son un gran ejemplo para el ser humano que se afana cuando quita su mirada de Dios. Pero Dios movido por su amor inefable, nos da la salida perfecta en cada necesidad básica. ¿De quíen depende usted y en quién espera? ¿Por qué te abates, oh alma mía? Y ¿por qué te turbas dentro de mi? Espera en Dios; porque aún he de alabarlo, Él es mi Dios y mi salvación. Salmos 42:11.
4. RECIBAMOS LO QUE VIENE DIOS EN TIEMPOS DE ESPERA. Entonces YHVH dijo a Moisés: subé hasta Mi en el monte y espera allá, te daré las tablas de piedra y la ley, mis mandamientos que he escrito para enseñarles. Éxodo 24:12. Porque si estamos en esta tierra es para servir y esperar en el SEÑOR, ocupándonos de sus órdenanzas en lo que a Dios respecta y espera de nosotros.
Somos servidores del reino, por lo tanto, debemos servir bien al dueño del oro y la plata, y dueño de nuestra vida. Cuando servimos a nuestro prójimo, Dios se ocupa de nuestras necesidades, y no tenemos que esperar tanto tiempo para recibir una bendición, también cuando pasamos tiempo de calidad con la familia, Dios espera que demos lo mejor y reflejemos su gloria. Quien cuida la higuera comerá su fruto, y el que mira por los intereses de su SEÑOR, tendrá honra, Proverbios 27:18.
Esperar en Dios no implica ser pasivos ni conformistas, pues la espera está llena de la fe que actúa esperanzadoramente, muriendo a la inmediatez, lo rápido e instantáneo, porque no vivimos de acuerdo a nuestros planes, sino en el propósito y tiempo de Dios, pues su respuesta viene de camino; con Dios hay un todavía, no un nunca y toda espera tiene un limite para no desmayar, así Dios cambia nuestra debilidad en fortaleza, y nuestra impaciencia en paciencia para que podamos correr bien la carrera como los mejores atletas. Solo en Dios halla descanso mi alma; de Él viene mi esperanza. Salmos 62:5.
La espera es un princípio y un mandato biblico, que debemos tomar en serio, aunque muchas veces Dios "retarde respuestas" es para aprender a valorar su trato y bendiciones en la calma y la quietud de la paciencia que aguarda; así evitamos las consecuencias de adelantarnos a sus planes por ser impacientes pasando sobre su voluntad; la espera nos permite llegar a ser las personas que Dios quiere, para que logremos alcanzar lo que Él ha dispuesto de antemano para nuestra vida. Tenemos que esperar que el SEÑOR nos diga lo que quiere que hagamos, pero si lo ignoramos, pagaremos un alto precio, por desobediencia y acelere del "lo quiero ya", lo cual nos hará caer en vergüenza. Ciertamente ninguno de cuantos esperan en Ti SEÑOR, será confundido ni avergonzado. Salmos 25:3..
Esperar nos garantiza una herencia cuando buscamos su consejo andando llenos del Espíritu, franqueando obstáculos, subiendo alto como las águilas que vuelan contra la corriente de los vientos contrarios y sin fatiga. Pero si Dios sabe que usted pide fortaleza para servirle al enemigo y al mundo, de seguro usted no recibirá lo mejor de Él; por lo tanto, debemos vivir para Dios anhelando sus favores y misericordias, sólo Jesucristo llena nuestros vacíos y expectativas, removiendo toda frustración. Porque los malignos serán destruidos, pero los que esperan en YHVH, heredarán la tierra. Salmos 37:9.
5. QUE LA ESPERA NOS FORTALEZCA EN OBEDIENCIA. Toda la palabra de Dios es limpia; Él es escudo a los que en Él esperan. Proverbios 30:5. Obedecer es un gran principio y mandato biblico de humilde sujeción a Dios, deponiendo nuestro propio yo y muriendo a los antojos insulsos de la carne, lo cual tiene gran galardón, porque significa que hemos aprendido humildad y dependencia en conexión con Dios; se obedece para después obrar según sus instrucciones, enseñanzas y advertencias; es así que subordinamos nuestra voluntad a la autoridad y voluntad de Dios; Él tiene siempre un raudal de bendiciones para cada uno; es asombroso cómo la misma naturaleza y aún los espíritus inmundos obedecen y se someten al Dios Todopoderoso, entonces, ¿qué de nosotros? Aún los vientos y el mar le obedecen, Mateo 8:27; manda aún a los espíritus inmundos y le obedecen. Marcos 1:27.
Lo más asombroso e incomprensible es la desobediencia, altanería e insensatez humana para obrar tan alocadamente como lo hace el mundo, en vez de pensar para despues obrar sabiamente. ¿Por qué tantos seres humanos no obedecen a Dios? La respuesta es simple, porque no se acercan a Dios y por lo tanto, no lo conocen, no lo aman, no lo obedecen, y no de pueden someter porque lo miran a la distancia despreocupadamente; así es imposible vivir alineados con Dios para oírlo, contemplarlo y tener una vida mejor en amistad con Cristo. Pacientemente espere a YHVH, y Él se inclinó a mi, oyó mi clamor. Y me sacó del pozo de la desesperación, del lodo cenagozo; puso mis pies sobre peña y enderezó mis pasos. Puso luego en mi boca, cantico nuevo, alabanzas a nuestro Dios. Verán esto muchos, temerán y confiarán en el SEÑOR. Salmos 40:1-3.
Aprendamos a liberarnos de la impaciencia, el nerviosismo, la queja, las dudas, la frustración, la irritabilidad y el sentirnos miderables, por actuar a la ligera; a cambio aprendamos paciencia, quietud, calma, fe y confianza en Dios, valentia y esperanza, en la espera y cumplimiento de la palabra de Dios, porque la Biblia es el cimiento donde nos paramos firmes, observando a Dios obrar, de acuerdo a su tiempo y voluntad perfecta. El mismo SEÑOR Jesucristo tuvo que esperar en obediencia y dependencia al Padre el cumplimiento de su misión redentora. Esperé yo al SEÑOR, esperó mi alma; en tu palabra he esperado. Salmos 130:5.
¿Por qué quieres seguir corriendo de aquí para alla, en afanes y angustías alejado de Dios? Por favor no digas que esto no sirve ni te da resultados en la práctica. Reflexionemos de manera correcta, y observemos cómo está nuestra postura acerca de este tema. Porque para ponerlo en práctica, primero debemos recibir a Jesucristo en nuestro corazón como SEÑOR y Salvador, entrégándole todo nuestro ser, espiritu, alma y cuerpo para que nos guía, gobierne e ilumine con la luz de su Espiritu y la palabra. Porque los malignos serán destruidos, pero los que esperan en YHVH, heredarán la tierra. Salmos 37:9.
No sigas luchando solo, no te ahogues entre dos aguas, no te angusties entre dos pensamientos, CRISTO ES LA RESPUESTA A TODAS NUESTRAS NECESIDADES, nuestro cambio de vida está en Dios. Vuélvanse a Él, y Él se volverá a usted; le aseguro que su vida se llenará de alegría aún en medio de las tristezas del mundo, verás la luz aún en medio de las situaciones más oscuras. Al final dirás: ¡Valió la pena esperar y correr bien la carrera! Porque obtendrás la victoria. Porque si esperamos lo que todavía no vemos, con la espera mostramos nuestra constancia. Romanos 8:25.
Comparto este mensaje, porque yo misma lo necesito y deseo, quiero dejar de ser acelerada, poniendo en práctica mi espera y calma en Dios por el resto de mi vida, y tú tamb8én lo necesitas. En la mañana SEÑOR, Tú escuchas mi clamor; por la mañana te presento mis ruegos, y quedo a la espera de tu respuesta. Salmos 5:3.
Lic. MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero, y servidora de su reino.
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