PUENTE ETERNO DE UNIÓN AMOROSA

PUNTE ETERNO DE UNIÓN Y AMOROSA COMPAÑÍA

¿A dónde me iré de tu Espíritu, y a dónde huiré de tu presencia? Si subo a los cielos, he aquí, allí estás Tú; si en el seol preparo mi lecho, allí estás Tú. Si tomo las alas del alba, y habito en lo más remoto del mar, aún allí me guiará tu mano, y me asirá tu diestra…Salmos 139:7-12.

Por eso tenemos libertad para entrar en el lugar santísimo por la sangre de Jesucristo, por el Camino Nuevo y Vivo que Él mismo nos abrió a través del velo, esto es, su cuerpo traspasado por nosotros, Hebreos 10:19-20.

Porque nuestra comunión es con el Padre y con su Hijo Jesucristo, 1 Juan 1:3.

Nadie se puede escapar de los sentimientos de soledad causados por la ruptura en una relación, sea amorosa, de amistad o familiar. Sentirnos solos nos hace experimentar pena, pérdida, dolor y hasta creer que no somos queridos ni amados, en muchos casos nos aislamos, esa experiencia la padeció Jesús sabiendo que su mejor amigo rompería su amistad con la traición, Aún mi íntimo amigo en quien yo confiaba, el que de mi pan comía, alzó contra mí se ha levantado, Salmos 41:9.

La soledad a veces agobia y hasta nos puede robar el arte de sonreír y el deseo de reír a carcajadas; nos vuelve silenciosos y hasta aparentamos estar bien. Pero la buena noticia, es que nunca estamos solos, que hay Alguien que siempre está cerca y comprende nuestras luchas. Dios NO nos creó para ser introvertidos ni ermitaños, esas situaciones nos tornan inseguros y temerosos y llegamos a hablar como el salmista, Miro a mi lado y me doy cuenta que a nadie le intereso y que nadie me quiere conocer, no tengo refugio ni hay quien cuide de mi vida, Salmos 142:4.

Cuando Dios nos pensó y nos creó sabía que necesitamos estar siempre acompañados y unidos en su amor, por eso una vez que hemos creído en Jesús, lo aceptamos y recibimos como Señor y Salvador de nuestras vidas, lo primero que empezamos a experimentar muy fuerte en nuestro corazón es el deseo de mantenernos unidos a Él, por lo tanto comenzamos a fortalecernos y alimentarnos buscándolo a través de la palabra, la oración y yendo al templo.

¿Cuál es la razón por la cual algunos cristianos se sienten solos? La respuesta es simple, unos mantienen una amistad continua con Dios y otros no. El deseo de Dios siempre ha sido relacionarse estrecha e íntimamente con aquellos que creó a su imagen y semejanza, pero el pecado ha interrumpido esa bella relación, por lo tanto, el Padre ideó hacer un puente entre nosotros y Él para estar comunicados, unidos y atentos, dentro de un vínculo, y un nexo que nos mantuviera ligados a Él y entre nosotros mismos, ese puente se menciona por primera vez en Génesis 3:15. Jesucristo y su cruz, vinieron a ser ese puente que nos ha unido al Padre en una relación eterna y hermosa de amor y compañía..

Un puente es algo extraordinario, es una calzada, una obra de arte de gran alcance, está hecho de material fuerte, firme y sólido, está destinado para unir, salvar corrientes de agua, depresiones de relieve, allanar cruces de desnivel, romper y cortar distancias, acaba la separación entre un lugar y otro, aproximar y abrir un acceso de comunicación que permita vida y desarrollo.

Un puente tiene apoyos de ilación en los extremos a manera de arco con numerosos cables de acero que ayudan a soportar el peso de la carga que transita por él, permite el paso y tiene barandas de soporte para hacer los cruces y sortear el camino, Y habrá allí calzada y camino, y se llamará, Camino de Santidad; no pasará inmundo por él, sino que Él mismo estará con ellos; el que anduviere por ese Camino, por torpe que sea, no se extraviará, Isaías 35:8. Vale la pena echarnos en los abrazos del Eterno y quedarnos ahi unidos a Él en sus lazos de amor y  sus cuerdas de misericordia para nunca separarnos de Él. Oseas 11:4.

Jesucristo y su cruz es el puente extraordinario que abrió camino en el desierto de la soledad, su calzada es la máxima obra de arte que jamás nadie ha hecho, ni ha alcanzado en magnitud, nos ha unido y nos ha dado compañía. Jesucristo fue, es y será el Fuerte firme, sólido y vigoroso puente, destinado a salvar vidas en medio de las corrientes del mundo, ayudar en las depresiones del desamor, allanar relieves y desniveles de malos momentos, rompiendo y cortando la distancia, que nos separaba de su reino y del Padre. Él nos ha acercado a su amor, nos ha dado acceso a la vida eterna y la vida abundante mientras estamos en este planeta azul, Jehová de los ejércitos, el Fuerte de Israel, Isaías 1:24a.

Jesucristo es el puente vivo a la eternidad, en Él transitamos y nos apoyamos de extremo a extremo en los cables de acero de su amor inagotable que nos acompaña y nos sustenta, Él soportó y soporta el peso de la carga que llevamos día a día para que crucemos el desierto y nos ahoguemos en los ríos de la prueba para sortear en su victoria y compañía el camino de la vida hasta que lleguemos a nuestro destino final, Cuando pases por las aguas YO estaré contigo; y si por los ríos no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemará, ni la llama ardera en ti, Isaías 43:2.

Dios es compañía fiel, permanente y activa para aquellos que deciden con fe obediente y firme permanecer en Cristo a la manera de Dios. Jesucristo hizo el puente de salvación que nos alejó de la soledad y el abismo para mantenernos unidos al Padre, a su reino y a su cuerpo; Él es quien nos comunica con Abba Padre en la persona del Espíritu Santo; en Cristo hemos sido diseñados para ser también puentes de amor, de perdón, de reconciliación y de unión fraterna para atraer más caminantes al Camino, YO SOY el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre, sino por Mí, Juan 14:6.

En su pecado, el hombre natural no tiene nada en común con el Dios santo, pero el Padre por su gracia, envío a su Hijo Unigénito para tener en común, una relación y una compañía eterna con la humanidad; haciéndose el Hijo del Hombre, aquel hermoso ser humano que llevó nuestros pecados en el madero de la cruz  para romper el abismo de separación y volver a su gloria para prepararnos lugar para siempre junto a Él, 1 Pedro 2:24-25.

El madero vertical de la cruz simboliza la divinidad de Cristo que descendió del cielo a restaurar la relación y la presencia de Dios en medio de los hombres para que ya no estemos solos; el madero horizontal de la cruz representa la humanidad de Cristo que vino a unirnos unos a otros para no estar ya en disensiones, divisiones ni distanciamientos con las artimañas del diablo, Por lo tanto, ya no se mientan unos a otros, sino diga cada uno la verdad a su prójimo, porque todos somos miembros del mismo cuerpo. Si se enojan, no pequen: que su enojo no les dure hasta el otro día, no le den oportunidad al diablo. Efesios 4.25-27.

Jesús no solo abrió el camino para ser perdonados, lavados, salvados, sino para mantener una hermosa relación personal con Dios, para que su presencia nos rodee cada día con poder y gloria y ser uno con Él, Juan 17:21-26. Cristo en nosotros nos ha provisto su naturaleza divina para ser partícipes de su reino, de sus bendiciones, de sus promesas y de una eternidad bienaventurada junto a Dios; ya no estamos solos nunca más, ya no estamos perdidos en el mundo, ya no luchamos ni soportamos los problemas solos, Dios permanece a nuestro lado, Fiel, Gigante, Poderoso y Amoroso, No los dejaré huérfanos; vendré a ustedes…Juan 14;18...Y he aquí YO estoy con ustedes todos los días hasta el fin… Mateo 28:20.

La obra redentora de Jesús hizo posible que pudiéramos tomar de su naturaleza para estar ligados por la fe, el ser humano finito, limitados, vulnerable y débil ahora puede estar en íntima relación con su Creador infinito, ilimitado, sobrenatural, santo y poderoso, el Dios todopoderosos que ha existido por siempre, ahora entabla una relación eterna con la raza humana que le crea, que lo ame, que lo siga de cerca, que le obedezca, que se santifique y ande por el Camino vivo, 1 Juan 2:6.

Aquel maravilloso Puente y Camino vivo que trasciende el espacio y el tiempo, ha decidido, ser UNO con los redimidos en su sangre, una común unión que nos establece en su familia, nos da un lugar en su cuerpo y nos tiene un sitio especial en la Nueva Jerusalén celestial, algo extraordinario y maravilloso que el Dueño del universo quiera estar eternamente contigo y conmigo, Génesis 18:19.

La relación con Dios se hace posible al reconocer y recibir a Jesucristo y nos hace partícipes en su familia, miembros en su cuerpo, 1 Juan 5:12, pero la comunión con Dios nos hace UNO con Cristo a través del precioso Espíritu, la amistad íntima de la comunión nos hace La comunión íntima con Él no se podrá experimentar su presencia y conocer a Cristo, Juan 14:15-17.

Hasta tanto no hayas empezado tu relación con Cristo no podrás tener amistad y comunión con Dios, es decir, tu puede tener relación, sin tener comunión, la común unión, la amistad estrecha con el Espíritu Santo nos permite tener la vida de Cristo y que Él se revele a través de nosotros; pero al mismo tiempo la relación y la comunión van de la mano para hacerte un cristiano firme, fuerte, y vigoroso en la fe, Romanos 1:17.

Hemos sido creados para una relación y una comunión eterna con el Amado, lo cual nos convoca a tener una relación y una amistad fraterna unos con otros. Les anunciamos, pues, lo que hemos visto y oído, para que ustedes estén unidos con nosotros, como nosotros estamos unidos con Dios el Padre y con su Hijos Jesucristo, 1 Juan 1:3. Gloria a Dios por su amor, su presencia y su compañía inefables.

Andaré entre ustedes y seré su Dios, y ustedes serán mi pueblo, Éxodo 26:12. Excelso sobre todas las naciones es el Señor; su gloria está sobre los cielos. ¿Quién es como el Señor nuestro Dios, que está sentado en las alturas, que se humilla para mirar lo que hay en el cielo y en la tierra, Salmos 113:4-6.

PUENTES VIVOS EN CRISTO JESÚS

PUENTES VIVOS QUE CONSTRUYEN MÁS PUENTES

En momento que Jesús expiró, el velo del templo se rasgó en dos, de arriba hacia abajo, y la tierra tembló y las rocas se partieron, Mateo 27:51.

Porque solo hay un Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo, Dios hecho hombre, 1 Timoteo 2:5.

Todo esto es la obra de Dios, quien por medio de Cristo nos reconcilió consigo mismo, y nos dio el ministerio de la reconciliación, 2 Corintios 5:18.

Esta es la historia de un par de hermanos que vivieron juntos en una bella provincia en granjas contiguas, compartían todo unidos por el amor, la armonía y la paz; hasta que un día vino el conflicto, era su primer problema serio que tenían en 40 años de cultivar juntos hombro a hombro, compartiendo maquinaria e intercambiando cosechas y bienes en forma continua.

Todo comenzó con un pequeño mal entendido y fue creciendo hasta que explotó en un intercambio de palabras amargas y ofensivas, seguido de semanas de silencio y distanciamiento.

Un día alguien llamó a la puerta del hermano mayor. Al abrir encontró a un hombre con herramientas de carpintero, estoy buscando trabajo por algunos días, dijo el recién llegado, quizá usted requiera algunas reparaciones aquí en su granja y yo puedo ser de ayuda.

Sí, dijo el hombre, tengo un trabajo para usted. Mire al otro lado del arroyo, en aquella granja vive mi vecino, de hecho, es mi hermano menor. La semana pasada había una hermosa pradera entre nosotros que nos mantenía cerca, pero él desvió el cauce del arroyo para separarnos, él pudo haber hecho para enfurecerme, pero le voy a hacer algo mejor.

¿Ve usted aquella pila de madera junto al granero? Quiero que usted construya una cerca de dos metros de alto, no quiero volver a verlo nunca más. El carpintero le dijo: creo que comprendo la situación. El hermano mayor ayudó al carpintero a reunir todos los materiales y se ausentó de la granja por el resto del día para ir por provisiones al pueblo.

Al ocaso, cuando el granjero regresó, el carpintero ya había terminado su trabajo. El granjero quedó mudo y con los ojos completamente abiertos y su quijada cayó. No había ninguna cerca, ni ninguna pared de dos metros, como él lo había ordenado; en su lugar había un puente que unía las dos granjas a través del arroyo. Era una fina pieza de arte, con todo y pasamanos.

En ese momento, su vecino, el hermano menor, vino desde su granja, atravesando el puente y corrió para abrazar a su hermano mayor diciendo: Eres un gran hombre, mira que construir este puente hermoso, después de lo que yo te hice. Estaban en su reconciliación los hermanos, cuando vieron que el carpintero tomaba sus herramientas. No, espere, quédese con nosotros unos cuantos días, pues hay muchos buenos proyectos para usted, le dijo el hermano mayor al carpintero. Me gustaría quedarme, dijo el carpintero, pero tengo muchos puentes por construir, así termina la historia.

Esta interesante historia es una bella analogía primeramente, a lo que hizo Jesús por nosotros en el puente de su cruz para reconciliarnos con el Padre, rompiendo el velo que nos separaba para unirnos y poder comunicarnos en Él, y que como sus discípulos redimidos, debemos ser también puentes de vida y unión entre Dios y nuestros semejantes, pues nos dio el ministerio de la reconciliación a través de la gran comisión y la suministración del fruto del Espíritu, Si alguno dice: yo amo a Dios, y al mismo tiempo odia a su hermano, es un mentiroso. Pues si uno no ama a su hermano, a quien ve, tampoco puede amar a Dios, a quien no ve, 1 Juan 4:20.

Las características de un puente son extraordinarias, un puente comunica, acorta las distancias, el puente rompe la división, salva obstáculos, une dos puntos que estaban distantes, rompe y reconcilia abismos de separación, acerca las vidas y da acceso a nuevos rumbos, un puente soporta las cargas y finalmente, es un punto estratégico de visión desde el cual se puede manejar excelentemente todo un complejo de acciones conjuntas que marquen la diferencia entre la derrota y la victoria, entre el amor y el desamor y entre la vida y la muerte, Si tu hermano peca contra ti, repréndele, pero si se arrepiente, perdónale. Y si siete veces al día peca contra ti, y siete veces al día vuelve a ti, diciendo: Me arrepiento, perdónale. Lucas 17:3-4. El perdón es como un puente que une y reconcilia. 

No podemos dejarnos dominar por los impulsos de la carne que nos llevan a los celos, la envidia, los mal entendidos y los enojos que nos alejan, no solamente como hermanos en Cristo, sino también con nuestra familia, con la gente que nos ama y que amamos, cuando debiéramos estar unidos por el amor y cercanos el uno al otro en Jesús porque allí está Dios, Y Yo les digo, que cualquiera que se enoje contra su hermano, será culpable de juicio; y cualquiera que diga necio a su hermano; será culpable ante el concilio, Mateo 5:22.  Aírense pero no pequen, que no se ponga el sol sobre su enojo, para que no den lugar al diablo, Efesios 4:26-27.

Dios nos llama a ser puentes que unen a la gente a su Creador, que acortan la distancia del desamor y la indiferencia comunicando la bondad de Cristo, que con brazos de afecto rompamos divisiones de clases, ideologías, mentalidades erradas; puentes de perdón y reconciliación para unirnos como familia en la sangre y familia espiritual en humildad y sencillez de corazón porque somos portadores de la presencia de Dios, para dar acceso a miles de vidas que conozcan a Cristo y comiencen un nuevo rumbo en su amor y salvación porque, Si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, deja tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presentas tu ofrenda, Mateo 5:23-24.

Soportar las cargas unos de otros es ser puentes del amor de Dios que une, perdona y salva en justicia y bondad como la forma de construir un futuro mejor en que todos seamos hermanos, vecinos, amigos, conciudadanos y habitantes de un planeta que reclama la manifestación de los hijos de Dios, seamos hacedores de la palabra, y no seamos solamente oidores, porque nos engañamos a nosotros mismos, Santiago, 1:22, y la fe sin obras está muerta, Santiago 2:14-17.

¿Cómo podemos construir puentes?

1. Al ponernos en el lugar del otro, esto es alteridad, identificándonos con la necesidad y condición del otro, porque todos somos humanos que podemos reconocer con humildad que somos vulnerables y nos necesitamos unos a otros, De qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras?

2. Al dar sin esperar nada a cambio, esto es altruismo que es generosidad y desprendimiento de lo material, Y si un hermano está desnudo y con necesidad de ser alimentado, pero no le damos nada, ¿podrá esto llamarse fe?

3. Aceptando al otro tal y como es, dándole el valor y la dignidad que todos merecemos como personas que sienten, esto es empatía, que es misericordia, compasión y cercanía para comprender y ayudar al su prójimo.

4. Perdonando y olvidando toda ofensa, sea grande o pequeña, esto es ministrar sanidad al alma herida para que todos seamos libres y podamos amarnos con sinceridad y confianza, mostremos nuestra fe por los hechos y las actitudes correctas.

5. Extendiendo la mano para levantar al caído y darle otra oportunidad, esto es bondad y fe en acción de buenos samaritanos que socorren al débil y al menesteroso.

6. Mostrando a Cristo con nuestra manera de vivir, testigos de su amor con un estilo de vida limpia, porque somos embajadores de su reino, por lo tanto debemos dar testimonio viviendo en el Espíritu,

7. Muriendo a nosotros mismos para servir sin límites, si queremos ser los mayores en el cielo; trabajando juntos con visión de reino, marcando la diferencia entre el bien y el mal y entre la vida y la muerte.

Tú y yo hemos sido renovados en Cristo para construir puentes y derribar murallas, como Él lo hizo, sin importar la situación que vivamos, si estamos llenos del amor de Dios podremos cultivar alegría, fomentar fe y sembrar esperanza en el alma de muchos; podremos construir una nueva era, haciendo que el infierno tiemble, porque somos poderosos en Dios para la destrucción de fortalezas de maldad; Así como Jesús rompió el abismo que nos separaba del Padre, de igual manera, rompamos las barreras que impone el mundo, donde miles deben conocer a Dios como Padre y amar a Cristo como Señor y Salvador; nuestro lema diario debe ser el servicio y el afecto sincero como Jesús nos dio ejemplo, Él nos amó con entrega incondicional y total, Así que somos embajadores de Cristo, lo cual es como si Dios mismo rogara por medio de nosotros. Así, pues, en el nombre de Cristo les rogamos que acepten reconciliarse con Dios, 2 Corintios 5:20.

Que el mundo vea que estamos unidos y nos amamos de corazón, para que construyamos puentes de paz y de justicia derribando las paredes de maldad con que el mundo separa las familias y divide la sociedad; desde nuestro hogar, nuestro vecindario, nuestra ciudad, nuestra nación y hasta lo último de la tierra seamos puentes vivos que unen a la gente, porque a paz nos llamó el Señor; Por el camino nuevo y vivo que Jesús nos abrió a través del velo, esto es su carne traspasada, y teniéndolo como el Gran Sumo Sacerdote sobre la casa del Padre. Acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificando nuestros corazones de mala conciencia, y lavados nuestros cuerpos con agua pura. Mantengámonos firmes y sin fluctuar en nuestra esperanza, porque fiel, es el que prometió, Hebreos 10:19-20.  Amén.

Lic. MEHC hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino

PRINCIPIO DE OBEDIENCIA

PRINCIPIO DE OBEDIENCIA 

Acontecerá que, si oyeres atentamente la voz de YHWH tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también YHWH tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra. Y vendrán sobre ti estas bendiciones y te alcanzar. Deuteronomio 28:1.

Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios…1 Samuel 15:22.

No todo el que me dice SEÑOR, SEÑOR, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, Mateo 7:21.

Recordemos por un momento qué es un principio: así como el Génesis es el Bereshit, principio y comienzo de la narración histórica bíblica de la humanidad y de un pueblo en particular que nos ha dejado ejemplo y aprendizaje, los principios son el punto de partida que Dios el Creador ha estipulado y marcado para que el hombre sea correcto e íntegro en su comportamiento y estilo de vida para que sea ejemplar, de testimonio y agradable, no solo a Dios, sino a quienes nos conocen y rodean. El que me ama, obedece mi palabra, y mi Padre lo amará, y habitaremos en él. Juan 4:23.

Obediencia es un principio bíblico que si lo cumplimos llegamos a ser personas virtuosas; la raíz hebrea es sh´ma, que alude a oír y prestar atención para cumplir, acatar y seguir mandatos, asumiendo órdenes y teniendo en cuenta las restricciones; la raíz griega es arché, arqhé, arjhé o ARJÉ, que significa fundamento, inicio, base, origen, punto de partida, estos dos conceptos son muy profundos para entender la importancia de ser obedientes al SEÑOR con humildad y pasos de fe. Más aún, hallándose en la condición de Hombre, el Hijo de Dios se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte de cruz. Filipenses 2:8.

Dios es el Creador origen del universo, es Él quien ha entregado la sustancia de la vida y nos ha dejado herencia de salvación y vida eterna en su Hijo, supremo ejemplo de obediencia y su Manual que contiene los deberes básicos pero grandiosos que nos instruyen para la vida. Del Creador y su palabra brota la esencia y valor de la vida humana en dependencia a Dios, quien es el máximo Maestro y SEÑOR, origen de las leyes, instrucciones, enseñanzas, advertencias, juicios y retribuciones. Nuestro máximo ejemplo de obediencia, Jesucristo obedeció al Padre para cumplir su misión, toda la ley y los profetas. Aunque era Hijo, mediante su sufrimiento aprendió a obedecer; y consumada su perfección, llegó a ser Autor de salvación eterna para todos los que le obedecen. Hebreos 5:8-9.

Los principios nacieron en el corazón de Dios y los gravó en la conciencia humana, como sustancia, origen, fundamento y fuente del bien para vencer el mal, para que los vivamos y mostremos en nuestra forma de hablar, manejarnos y actuar al relacionarnos con Dios, con los semejantes y con el medio ambiente. Sigan por el camino que el SEÑOR su Dios les ha trazado, para que vivan, prosperen y disfruten de larga vida en la tierra…Deuteronomio 5:33.

Cuando la primera familia falló, Dios decidió venir en forma de hombre para mostrar y recordar sus principios, que son fundamento y valuarte de la vida para marcar la diferencia con los valores relativos que se balancean entre lo bueno y lo malo, lo correcto y lo incorrecto, lo que es y lo que no es; algo que el engañador trajo a confusión después de la caída; nuestro Salvador vino a recordar y personificar la pureza, inmutabilidad y verdad de los principios y ordenanzas que deben ser vigorizados, aprendidos y recordados por todos nostros con el carácter  del Hijo de Dios; así que los principios no son opciones, alternativas o escogencias al azar según la conveniencia, son obligaciones morales imperativas para conservar la vida sana y limpia, gestando asi una sociedad sobre la base de lo santo, lo bueno y la transparencia al 100%. Por lo tanto, así dice el SEÑOR: YO pongo por fundamento en Sión una piedra, preciosa, fundamental, bien colocada, el que crea en ella, NO será perturbado. Isaías 28:16.

La obediencia además de ser un principio sustentado en Dios también es una virtud y un arma de guerra que nos proteje y debe caracterizar la personalidad y comportamiento de los redimidos para que el maligno no tenga acusación en contra; como arma de guerra y principio debemos prestarle mucha atención para vivir en la voluntad de Dios, porque obediencia es sumisión y sometimiento a nuestro Dios y si somos obedientes, Dios tomará el control de nuestra vida cotidiana para vivir seguros y sin afanes en el descanso del Padre. Hebreos 4. Ser obedientes implica aceptar los designios de Dios, con contentamiento, sujetos a su gobierno y su autoridad, asi como la de nuestros padres, para acatar sus instrucciones, leyes y advertencias que nos guardan del mal y nos permiten vivir rectamente delante de Dios. Guarda, hijo mío, el mandamiento de su padre, y no abandones la enseñanza de tu madre. Proverbios 6:20.to

La obediencia no nace con nosotros, necesitamos aprenderla, desarrollarla y perfeccionarla con el paso de los años para que se convierta en un hábito. Nuestra obediencia primera la aprendemos cuando somos niños atendiendo a las enseñanzas de nuestros padres, así es como aprendemos a ser obedientes a Dios; esta obediencia aprendida desde la niñez nos permite ser respetar a los maestros, los mayores, los ancianos, las leyes de la nación y autoridades superiores en general. Sométase toda persona a las autoridades que gobiernan…Romanos 3:1-7, Colosenses 3:22 y Tito 3:1.

Si aprendemos obediencia cuando somos niños y jóvenes, esto nos ayudará a ser buenos ciudadanos, personas serias, sociables y responsables en la edad adulta; obedecer es uno de los mandatos y principios más importantes para una vida en orden, llena de paz y progreso porque va unida a la sujeción, el cumplimiento, el compromiso y la humildad frente a quien nos dirige y tiene autoridad sobre nosotros en determinado momento de la vida. La obediencia como mandato y principio de Dios no admite tibiezas ni términos medios de pasividad o indiferencia, debe ser una estricta resolución del corazon, en negación de nosotros mismo, propio de un carácter firme que acata órdenes y presta atención a la orientación y dirección. Camino de la vida es guardar la instrucción; pero quien desecha la reprensión, yerra. Proverbio 10:17.

Una persona obediente no está exenta de experimentar problemas, desiertos y pruebas en la vida, pero ciertamente debe estar seguro que, al vivir y mantener este principio, obtendrá recompensas divinas, porque Dios es fiel para con el fiel y justo para con el justoñ Él cumple sus promesas. Y nosotros somos testigos suyos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen. Hechos 5:32. 

La obediencia es además, la condición de un corazón que ama a Dios, es por que los obedientes sin enseñables y dóciles para aprender y sujetarse con espíritu afable y dispuesto, sin importar las circunstancias ni quien esté a favor o en contra, puesto que en ciertos casos podría resultar difícil obedecer y acatar instrucciones, quizá tengamos que hacer un esfuerzo superior con algo que nos cueste abandonar, como en el caso de cambiar hábitos y costumbres o dejar apegos que en nada nos benefician, por lo tanto debemos pagar un precios de obediencia y sometimiento primero a Dios, luego a los hombres, pero nunca podemos negociar nuestros principios y nuestra fe y mucho menos poner en entredicho nuestra dignidad e integridad de personas morales, como tampoco debilitarnos en  nuestra confianza en Dios, sino pararnos firmes en su gracia y su verdad, de seguro seremos recompensados por hacer lo que nos corresponde. Si obedecen a Dios y le sirven, Dios les concederá días de paz y bienestar. Job 36:11.

Para ser obedientes necesitamos la fe como escudo y andando en la verdad como coraza de justicia para esquivar todo dardo de fuego del malo y avanzar Con Pasos Firmes en Dios, llenos de gozo y esperanza, de la mano de Cristo, mayores cosas que las que hemos visto veremos. Nuestra obediencia demuestra la calidad y firmeza de nuestra fe, obedecer a Dios glorifica su nombre, nos proteje y nos hace gratos a sus ojos, pues asi le demostramos nuestro amor y fidelidad. Entonces Samuel dijo: A Dios le agrada más que se le obedezca, y no que se le ofrezcan sacrificios…; vale más obedecerlo y prestarle atención que traerle ofrendas de animales. 1 Samuel 5:2.

La obediencia nos permite tener una vida sobrenatural, de milagros, llena de alegría, tranquilidad y buenas cosas; obedecer demuestra que no confiamos en nosotros mismos, ni nos apoyamos en nuestras propias fuerzas, sino que toda nuestra vida reposa y esta escondida en Dios, mostrando fruto en el Espíritu que desde nuestro interior enaltece al Salvador pues seguimos sus pisadas. Pues para esto nos llamó el Padre, ya que Cristo sufrió por nosotros, dándonos ejemplo para que sigamos sus pisadas. 1 Pedro 2:21.

Nuestro Padre celestial todo el tiempo está dispuesto a defender y pelear a nuestro favor, Él se agrada de los que le creen y obedecen su voz, aunque muchos salgan contra nosotros por un camino para atacarnos, Dios los hará huir por siete caminos en nuestra obediencia y sometimiento a Él, nuestro Padre es Varón de guerra y hará que los enemigos corran despavoridos, porque la obediencia representa justicia, rectitud y verdad. Queridos hermanos, si el corazón no nos condena, tenemos confianza delante de Dios y recibimos todo lo que le pedimos porque obedecemos sus mandamientos y hacemos lo que le agrada…1 Juan 3:2-22.

Presento algunos tips que nos ayudan a ser obedientes: 1) Estudiemos y meditemos en la grandeza y poderío de Dios, veamos cuán grande es Él ante el insignificante enemigo, Juan 5:32; 2) Conozcamos a fondo las verdades bíblicas, meditemos e investiguemos acerca de cada tema a profundidad, Colosenses 3:16; 3) Creamos que Dios verdaderamente tiene un plan extraordinario para nuestra vida en particular, Jeremías 29:11; 4) Demos pasos de fe y tomemos riesgos decisorios actuando con la mirada y el corazón puesto en Cristo. Hebreos 11.

Existen buenas razones para obedecer a Dios sin importar las circunstancias o lo que opinen los demás. Hay muchas e innumerables bendiciones y beneficios importantes para prestar atención y acatar sin razonamientos humanos lo que el Creador ordena, manda, establece y decreta para el bienestar de su pueblo; saber que es Dios quien lo dice es suficiente razón para ser obedientes sin cuestionar, así no existieran otras razones, somos hijos de Dios, por lo tanto debemos atender y obedecer al Padre y seguir al SEÑOR en su ejemplo e instrucciones, de vida. ÉXODO 19:5, nos dice que si obedecemos a Dios, venimos a ser su especial tesoro, imagínense si seres cuidados, protegidos y defendidos. ¡Sublime gloria!

Ser obedientes y estar atentos a la voz de voz de Dios es lo más importante para que vivamos las promesas, las bendiciones nos alcancen y su mano nos liberte de los enemigos opresores, 2 Reyes 13:4-5.

1.  Ser obedientes nos permite estar sanos y libres de enfermedad. Éxodo 25:26.
2.  Ser obedientes a Dios es la clave del éxito, Josué 1:8.9
3.  Él escucha nuestras oraciones y las responde. Salmos 66:18-19.
4.  Podremos disfrutar de la profunda presencia de Dios Juan 14:23.
5.  Obtendremos mayor sabiduría, Deuteronomio 4:5-6. Proverbios 2:7.
6.  Podremos ser verdaderos amigos de Dios, Juan 15:14.
7.  Tendremos una existencia segura y feliz. Levítico 25:18.
8.  Nos perfeccionamos constantemente en Dios.1 Juan 2:5.
9.  Recibimos bendiciones continuamente, Deuteronomio 1:26-28,28:1-14.
10.  Encontraremos la verdadera felicidad, Proverbios 29:18.
11. Tenemos y vivimos paz, Salmos 37:37.
12. Tendremos una larga vida, Proverbios 3:1-2.
13. Somos herederos en su reino junto a Él. Mateo 9:16-17, Apocalipsis 21:1-4, 22:6-7.
14. Somos guiados y justificados, Romanos 6:16-18.

Consecuencias de la desobediencia, Proverbios 10:17

1.  Reprensión y castigo de Dios, Jonás 1:17, Romanos 2:8-9.
2.  Angustia y desesperación, Jonás 2:2, Salmos 18:6. Hebreos 4:6.
3.  Separación de Dios, y opresión demoniaca, Jonás 2:3a-4, 1 Samuel 15. Efesios 5:6.
4.  Confusión, enojo y muerte. Levitico 10:1-10, Jonás 2:5, Jonás 4:4, 1 Timoteo 1:8-11.
5.  Puertas cerradas y destrucción, Jueces 16, Jonás 2:6a, Job 12:13-14, Génesis 7:16b.
6.  Trae prueba, dolor y Muerte, 2 Samuel 6:6-7, Jonás 2:6b-7, 1 Reyes 13:24.
7.  Se aleja la misericordia de Dios, 2 Samuel 24:4, Jonás 2:8.
8.  Trae enfermedad, Números 2, 1 Reyes 13:4 Salmos 35:8.
9.  Trae escases, Jeremías 18:10, Hageo 1:5-6, Lucas 15:14.
10.  Produce temor e inseguridad, 1 Samuel 15:24 y 18:11-12.
11. Nos alcanzan las maldiciones, Deutoronomio28:15-68 y Malaquías 2:2. 12. Podríamos ser desechados por el SEÑOR, 1 Samuel 28:16-20.

¡Aleluya, vale la pena ser obedientes y no rebeldes!

Pregúntate: ¿Caminas obedientemente en todas las cosas? ¿Eres un discípulo fructífero para Cristo y el reino de Dios? ¿La prueba o el sufrimiento que estás pasando es quizá por un acto de desobediencia? No te inquietes, el SEÑOR te ama y te anima hoy para que empieces a caminar en obediencia dando pasos de fe, confiando en tu Padre celestial y reflejando a Cristo, podrás ver la recompensa; arrepiéntete, corrígete y vuelve al camino que Él te ha indicado en su palabra. Dios te bendiga grandemente.

Lic. MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino.

INSTRUMENTOS DE HONRA EN LAS MANOS DE DIOS

INSTRUMENTOS DE HONRA EN LAS MANOS DE DIOS

El Señor le dijo a Ananías acerca de Pablo: Ve, porque él me es un instrumento escogido, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, de los reyes y de los hijos de Israel, Hechos 9:15.

Y serás corona de gloria en la manos del Señor; y diadema real en la mano del Dios tuyo, Isaías 62:3.

En aquel día, dijo el Señor de los ejércitos, te tomaré, oh Zorobabel, hijo de Salatiel, siervo mío, dijo el Señor, y te pondré como anillo de sellar; porque YO te escogí, dice el Señor de los ejércitos. Hageo 2:23.

Somos muy valiosos para Dios, Él nos redimió en su Hijo Amado y nos  escogió para llevar a cabo su obra, hemos sido sellados con autoridad como propiedad de Dios, por lo tanto, nuestra responsabilidad es cuidar de nosotros mismos y vivir como espirituales. Ten cuidado de ti mismo (de tu conducta) y de lo que enseñas a otros y sigue firme en todo. Si lo haces así, te salvarás a ti mismo y salvarás también a los que te escuchan, 1 Timoteo 4:16.

Hay mensajes que no les gusta a las personas, hay mensajes que Dios envía pero muchos hacen caso omiso, como si no fuera para ellos, y se incomoden, acaso ¿no es necesario hablar lo que Dios nos ordena, instruye y enseña para confrontar nuestra vida? No es el ser humano quien nos incomoda, es Dios mismo que como Buen Padre, nos ama, exhorta y corrige porque Él quiere ayudarnos a ser verdaderos, hijos, verdaderos discípulos, e instrumentos de poder en sus manos. Algunos de ustedes dicen: Soy libre de hacer lo que yo quiera, ¡claro que sí! Pero no todo lo que uno quiere, conviene; por eso no permitas que nada te domine,1 Corintios 6:12. 

Cuidamos de hacer muchas cosas, y está bien, pero debemos recordar que Dios nos ha hecho el encargo de ser bendición para otros, pero gran cantidad de hijos no lo cumplen por andar centrados en sí mismos. Él nos ha enviado a predicar las buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, a los presos apertura de la cárcel...Isaías 61:1.

Tenemos que darle gracias a Dios porque Él nos ha escogido para ser sus hijos y representantes de su reino, sin que lo merezcamos, ¡qué privilegio y qué gran responsabilidad! Lo que Dios desea es que seamos santos, que nos llenémos del Espíritu, que vivamos por fe y que practiquemos la verdad y la justicia viviendo ordenadamente, cumpliendo sus mandatos y arraigados a su diseño.  Siempre tenemos que dar gracias a Dios, unos por otros, porque somos hermanos amados por el SEÑOR, porque Él nos escogió como sus primicias, en alcanzar la salvación por medio del Espíritu que nos hace santos por la verdad que hemos creído. 2 Tesalonicenses 2:13. 

Tenemos que sacar la mentira de nuestra vida; para nada bueno aprovecha el engaño, los celos ni la envidia que algunos ejercen con sus mismos hermanos, y que en vez de ayudar, tener misericordia, apoyar y complementarse unos a otros, compiten, codician y usurpan, cuando la palabra dice que NO codiciemos nada del prójimo.Éxodo 20:17.

Reflexiona, al haber sido escogidos para el servicio a Dios, nos otorga grandes bendiciones, como saber que todo lo que pidamos al Padre en el nombre de Jesús, se nos concederá, pero solemos pedir sin dar y sin haber cumplido la encomienda, por lo tanto, no podemos esperar que recibamos lo que pedimos, Ustedes no me escogieron a Mí, sino que YO los he escogido a ustedes y les he encargado que vayan y den mucho fruto, y que ese fruto permanezca. Así el Padre les dará todo lo que le pidan en mi nombre, Juan 15:16. 

Tenemos que dar fruto, tenemos que honrar el nombre del SEÑOR Jesús, no podemos alterar el orden de Dios, ni las prioridades, ocupándonos de miles de cosas, pero ignorando a Dios sin hacer la tarea primera. Les he dado a escoger entre la bendición y la maldición; bendición si escuchan y obedecen los mandamientos del SEÑOR; y maldición por desobedecer y tener dioses ajenos, apartándose del camino. Deuteronomio 11:26-28.

Si en verdad queremos disfrutar el privilegio de ser instrumentos en las manos de Dios, tengamos presente que nuestra prioridad es Dios, después el cónyuge, la familia, la congregación, etc, t9do lo demás va después,  porque sin Dios no podemos vivir, ni hacer bien las cosas como debiéramos; si descuido mi relación con Dios, y no estoy bien con Él, ¿cómo puedo estar bien con los de mi casa y cómo voy a dar lo mejor de mi a otros si yo no estoy dando lo mejor de mi al SEÑOR? Cuidemos mucho nuestra vida espiritual. Yo puedo orar por ti, pero si tú mismo no oras ni tienes intimidad con tu Creador, lo que yo haga por ti será ínfimo y mínimo, comparado con lo que podrás obtener si tienes a Dios en primer lugar, No descuides el don que hay en ti…2 Timoteo 4:14a.

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Como hijos de Dios, nuestra vida es importante, pues somos discípulos de Cristo, somos instrumentos mediante los cuales el Espíritu Santo revela al Padre y al Hijo a las personas que nos rodean, NO somos unos cualquiera, démosnos nuestro lugar, el precio que Cristo pagó por ti y por mí fue muy alto, si nos detenemos a pensar todo lo que Él hizo por nosotros, !wow¡ sorprendente, ¡Cuán valiosos somos para Dios! Entonces, demos importancia a lo que somos en Cristo, entonces, lo que hacemos, decimos y mostramos es importante y de cuidado. Somos columna y sostén de la verdad, esto es algo fuerte, algo para no tomarse a la ligera. Te escribo estas cosas…para que sepas cómo debe conducirse uno en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios vivo, columna y sostén de la verdad, 1 Timoteo 3:14-15. 

Cuando no estamos dependiendo de Dios y nos deslizamos de su presencia nos pueden suceder muchas cosas desagradables que no son enviadas por Dios, son las consecuencias de haber abierto puertas que no tendríamos que haber abierto. La Escritura lo dice claramente: No le den cabida al diablo. Efesios 4:27; no demos cabida a algo o alguien que puede destruirnos. Si quiero cuidar mi espiritualidad, debo proteger toda mi vida por los cuatro costados y estar atento de no abrir puertas que me pueden dañar, y si algo o alguien me hiere, yo no estaré bien ni con Dios, ni con los de mi casa y menos con los de afuera para serles de bendición. Si se enojan, no pequen; que el enojo no les dure todo el día. No le den cabida al diablo, Efesios 4:26-27.

Los instrumentos suenan bien cuando el artista los afina, los pule y los cuida con esmero, así Dios lo hace con nosotros, pero si nos alejamos, si descuidamos su presencia, sonaremos discordantes y luciremos destemplados, si Pablo fue usado como un gran instrumento en las manos de Dios, ¿por qué no nosotros? Podemos ser muy valiosos en las manos de Dios y estando bajo su gobierno, pero si nosotros se lo permitimos a Él, pues Dios no pasará por encima de nuestras decisiones, aunque Él nos haya eligido, nos dio libertad. Busquen al SEÑOR y su fortaleza, busquen su rostro continuamente. 1 Crónicas 16:11.

Fuimos creados para vivir en la presencia de Dios conectados a la eternidad no a lo terrenal, si nos separamos de Dios crearemos vacíos espirituales que aprovechará el enemigo y sus demonios para meterse, repercutiendo en muchas cosas malas que nos desvian del camino correcto; por ello debemos vivir en el Espíritu para pensar y actuar a la manera de Dios, no carnal ni mundanamente, el enemigo siempre merodea para meterse y destruir, él usa personas y situaciones para acabarnos. Si has estado pensando carnal y humanamente sin la dirección de Dios, las decisiones que tomes, serán del mismo estilo, luego neciamente te enojas y le echas la culpa a Dios y a la gente. Sométanse a Dios, resistan al diablo, y éste huirá de ustedes, Santiago 4:17.

Es maravilloso saber que Dios pudo haber escogido, llamado y usado a otros, pero nos eligió a ti y a mí entre millones, por eso, cuidemos nuestra integridad personal y espiritual, este privilegio es importante y valioso, donde Dios, nos causa gozo. Y es que para avergonzar a los sabios Dios ha escogido a los que el mundo tiene por tontos; y para avergonzar a los fuertes, ha escogido a los que el mundo tiene por débiles 1 Corintios 1:27.

Hoy Dios quiere incomodarnos y confrontarnos para que pensemos más seriamente, que no podemos pasar un momento de la vida sin Él, Él es nuestro aire y Aliento de vida, por lo tanto, examinérnonos cada día para conservar nuestra santidad, pureza e integridad, estando atentos de qué posibles puertas hemos abierto al enemigo; Dios es poderoso y grande pero muchos de los que dicen ser de su pueblo no lo conocen, como Saúl que cuando se apartó de Dios para hacer su voluntad, un espíritu inmundo lo atormentaba; si no le servimos a Dios, si no le obedecemos a Él y si no estamos en su presencia, somos presa del maligno. 1 Samuel 16:14. 

En el capítulo 7 de Josué, se nos narra el pecado de Acán que trajo perturbación a todo el pueblo de Israel, vemos cómo por causa de un solo hombre, todo el pueblo quedó bajo juicio de Dios, pero Josué, una persona digna de imitar, fue valiente y se presentó ante el SEÑOR, postrado todo un día para saber la razón de la derrota ante el enemigo, el SEÑOR le respondió; luego de saber que alguien había tomado del anatema, confrontó al pueblo para ver quién había pecado, el SEÑOR le reveló a Acán, quien fue apedreado por todo el pueblo, después ordenó al pueblo santificarse; si alguien del pueblo del SEÑOR peca, todos salimos afectados, y no podremos hacer frente al enemigo. Y todos los israelitas apedrearon a la tribu de Acán, y después los quemaron...Josué 7:25-26.

El SEÑOR ordena a sus ángeles destruir para sacar el anatema; así que como valientes de Dios, tengamos coraje para señalar el pecado y cortarlo de raíz, evitando así los juicios de Dios. Hoy no apedreamos ni asesinamos a nadie, pero podemos interceder como jueces para que todo lo oculto dentro del pueblo santo salga a la luz. Y YHWH respondió a Moisés: al que peque contra Mí, a ese raeré YO de mi libro. En el día del castigo, YO castigaré en ellos su pecado. Y si aún con estas cosas no me oyen, YO volveré a castigarlos siete veces más por sus pecados. Éxodo 32:33-35.

Resulta fácil pararse delante de mucha gente para hablar de Jesús, y eso sería una actitud de obediencia si el SEÑOR te envió a que lo hicieras. Pero la demostración de valentía más grande de un hijo de Dios es decidirse a honrar a Dios con su vida siendo un instrumento santo que lo exalte, por encima de todo obstáculo y tropiezo; haciendo lo correcto a pesar de todo, Sin cansarnos de hacer el bien. 1 Tesalonicenses 3:13.

Es hermoso y reconfortante saber, que hay muchos fieles que viven en victoria, muchos santos que toleran en su vida cosas complicadas y difíciles pero siguen honrando a Cristo. Sin embargo, también hay muchos cristianos que viven con su mente plagada de pensamientos que no convienen porque anidan temor, duda y carnalidad, sin hacer nada por cambiar eso; hay que tener la valentía de sacarse todo eso de encima para ser verdaderos vasos de honra en las manos de Dios, Así que si alguno se limpia de estas cosas, será instrumento para honra, santificado, útil al Señor, y dispuesto para toda buena obra, 2 Timoteo 2:21.

Hay que ser valientes y reconocer lo que somos en Cristo para quitarnos de encima toda la basura y la suciedad del mundo, no se requiere valentía para pecar, hacer bobadas y locuras, hay que ser valientes para ser santos y cuidar nuestra espiritualidad y amistad con Dios con un estilo de vida que glorifique su nombre santo; mi vida no es valiosa por la cuna de dónde vengo, no por lo que yo posea o los títulos que haya logrado alcanzar, sino que mi vida es valiosa por lo que Cristo hizo por mí en ese madero cruel, y a eso debo responder con amor y gratitud en justicia. Y que nadie se jacte delante de Dios. 1 Corintios 1:20.

Josué era una persona valiente, él pensaba espiritualmente, por eso es digno de imitar; Dios le da una victoria gloriosa a Josué derrotando a la gran ciudad de Jericó, pero luego van a un pueblucho pequeño llamado Hai y son derrotados, así el pueblo de Dios sufre su primera derrota en la tierra prometida.

Si Josué hubiera pensado humanamente habría mandado matar a sus ayudantes, pero él tenía comunión con su Padre, por eso entendía que había una razón para haber perdido. Hay una sola razón por la cual nos puede ir mal: que Dios no esté delante de nosotros con lo que hacemos, Josué lo tenía claro, pero hoy una gran cantidad de pueblo no lo tienen claro, o quizá lo tienen claro pero no les importa, Porque en una casa grande, no solamente hay vasos de oro y de plata, sino también de madera y de barro, unos son para usos especiales, y otros para uso común, 2 Timoteo 2:20.

Muchos se han acostumbrado a vivir de derrota en derrota, en lugar de vivir de victoria en victoria. Lamentablemente hay una gran parte del pueblo volando rastrero, bajito como las gallinas, cuando hemos sido llamados a volar alto como las águilas en las manos de nuestro Dios, porque lo importante no es haber sido escogidos, sino ser útiles y honrar a quien nos escogió, Y les dije: ustedes están consagrados al SEÑOR, y los utensilios son sagrados…Esdras 8:28.

A Josué, instrumento de honra y espiritual, le fue mal, ¿qué hizo? Corre a Dios, porque es imposible perder si Dios está con nosotros. Por eso va a Dios para preguntarle ¿qué pasó?  Entonces Josué se rompió sus vestidos, y se postró en tierra sobre su rostro, delante del arca de Jehová hasta caer la tarde, él y los ancianos de Israel; y echaron polvo sobre sus cabezas. Josué 7:6.

¿Cuántos ayunamos y gemimos cuando vemos que el Cuerpo de Cristo necesita santificarse, o que nuestra nación necesita a Dios? Pero ¿cuántos otros en vez de eso buscan culpables, se enojan, se justifican y abren puertas que no deben abrir?  Josué ayunó, imitémoslo si en verdad somos del pueblo santo, tenemos que hacer la diferencia; pero oímos y vemos “cristianos” que parecen más gente del común del mundo que creyentes, pero yo prefiero vivir feliz siendo una vasija de honra y una hija de Dios para que otros puedan ver la diferencia. Hay una gloria del sol, otra gloria de la luna, y otra gloria de las estrellas; pero una estrella es distinta de la otra en gloria. 1 Corintios 15:41.

Definitivamente el peor mal que hay en el mundo, es el anti-testimonio, el daño que se hace es irreparable, y muchos son así porque se acostumbraron a vivir con su guardado, su pecado oculto. En el AT se nombran utensilios en el tabernáculo, con que se ministraba al SEÑOR, hoy somos nosotros los instrumentos en el Altar del Espíritu, gente de honra al Padre en ese Tabernáculo vivo que es Jesús para su pueblo. Números 3:31.

Ser instrumentos de honra y vasos que glorifiquen al Creador es un trabajo entre Dios y nosotros, Él determinará si somos finalmente de honra o deshonra, dependiendo de nuestra consagración, entrega y obediencia a Él. Y tú, hombre, ¿quién eres para que alterques con Dios? ¿Acaso dirá el vaso de barro al que lo formó:  ¿Por qué me has hecho así? O no tiene potestad el alfarero sobre el barro, para hacer de la misma masa un vaso de honra y otro de deshonra? Romanos 9:20-21.

Lo más importante es entregarnos totalmente y sin reservas en las manos del Alfarero divino para permitir que Él nos forme; todos hemos sido llamados a ser instrumentos de honra, pero lo seremos o no según en las manos de quien hayamos depositado nuestra vida, de ello dependerá el resultado final, por nuestra conducta, comportamiento y proceder. Inicialmente Saulo estuvo en las manos del enemigo haciendo mucho daño a,los santos, pero al final estuvo en las manos de Dios, derramando amor, compasión y revelando el evangelio haciéndose una persona de bien, un instrumento honroso en las manos del SEÑOR Jesús. Bello contraste entre Hechos 8 y Hechos 9. Amén.

Lic.  MEHC hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino