COLOMBIA BUSCA EL CAMINO EN CRISTO
Entren por la puerta estrecha. Porque es ancha la puerta, y espacioso el camino que conduce a la destrucción, y muchos entran por ella. Pero estrecha es la puerta, y angosto el camino que conduce a la vida, y son pocos las que la encuentran, Mateo 7:13-14.
Así dijo el Eterno, el alto y sublime: párense en los caminos, y miren y pregunten por las sendas antiguas, cuál sea el buen camino, y anden por él, y hallarán descanso para sus almas. Pero ustedes dijeron: No lo seguiremos, Jeremías 6:16.
Con relación al camino cocemos muchos temas poéticos y musicales que hablan acerca del camino: el caminante, caminito que el tiempo ha borrado, por el camino verde que va a la ermita, senderito de amor, el camino de la vida, pero lo que esas poesías y canciones dicen no es verdad; a veces en la vida personal y la vida de una nación nos encontramos en encrucijadas que nos exigen una decisión importante para tomar, son momentos en los cuales hay que detener el paso.
La palabra del SEÑOR nos habla claro para esos momentos: Paren, deténganse, y pregunten; no se apresuren, no corran, esperen y miren qué camino tomar, esos momentos nos exigen claridad mental y espiritual. Es ahí donde nos debemos detener en las sendas antiguas, es decir que hay varias opciones y varios cruces en el camino caminos, al frente de nuestros ojos, pero la reflexión a que el SEÑOR nos lleva es: Pregunten por las sendas antiguas cuál sea el buen camino, eso nos lleva a pensar, que hay que averiguar primero por el buen camino para poder marchar por él.
El sistema lleva a la mayoría a transitar por sendas equivocadas, pero el SEÑOR nos aconseja investigar, revisar e inspeccionar para que no nos extraviemos, así que la tarea es investigar, aclarar y conocer ¿cuál es el buen camino? y andar por él. Hay muchos caminos por los cuales el enemigo ha puesto a la gente a caminar en cosas inciertas, no es cierto que el camino se hace al andar, tampoco es cierto que todo camino ni cualquier senda lleva al cielo, ni que cada uno hace su propio camino hacia Dios, todo eso son falsedades del mundo y la nueva era para quienes cualquier camino es bueno. Nuestra manera de andar debe estar basada en lo que dice la Biblia:
1. Hay caminos falsos, Hay camino que al hombre le parece correcto; pero al final encuentra la muerte, Proverbios 14:12. Hoy en día hay muchos disfrazados de caminos cristianos pero no tienen la verdad, son solo atajos que desvían de la verdad, por eso el rey Salón lo repite en Proverbios 16:25, para enfatizar y llamar la atención acerca del camino que estamos andando. Pero hay un buen camino, averiguemos cuál es y andemos por él.
2. El camino verdadero, Ustedes ya saben a dónde voy, y saben también el camino que deben tomar. Pero Tomás le dijo: Señor si no sabemos dónde vas, ¿cómo vamos a saber qué camino tomar? Jesús le respondió: YO SOY el camino, la verdad y la vida, sin Mí nadie puede llegar a Dios el Padre, Juan 14:4-6. Tomás el cuestionador, razonador y materialista, alguien que tiene que confirmar todo para creerlo, pregunta al Señor, y Él le responde enfáticamente: YO SOY el camino, no dijo yo les trazo el camino, ni soy un camino, ni tampoco uno de muchos caminos, sino YO SOY EL CAMINO.
Ese es el Camino Bueno que pregunta Jeremías, y que dice que debemos identificarlo para caminar por Él, Jesucristo terminantemente es el Camino, y nadie llega al Padre sino por Él. Jesucristo es el Camino Verdadero.
En la vida humana cuando termina una etapa y comienza otra, lo que ordena la palabra es detenerse porque surgen una serie de opciones donde debemos tomar la decisión correcta, lo importante es no dudar que el Camino Verdadero es Jesucristo, y Él te puede mostrar cuáles otras sendas puedes tomar en determinadas circunstancias.
Es exactamente lo que está viviendo Colombia, que según la decisión del pueblo pasará de una etapa a otra, lo cual marcará el futuro de nuestra nación y sus habitantes. Estamos al frente de una encrucijada, hay posibilidades, hay opciones, hay caminos. Pero el Espíritu Santo a través de la palabra nos está diciendo: Deténgase, observen, pregunten, no se precipiten, miren las sendas antiguas, lo que hemos recorrido, ¿seguiremos en las mismas o cambiaremos para mejor o para peor?
¿Qué nos han dejado las experiencias del pasado? Averigüen el buen camino y marchen por él. Identifiquemos una vez y para siempre el camino verdadero y hacer radicalmente lo que indica ese camino.
3. Al Señor no le gusta que nos aferremos al pasado. El cristiano es una nueva criatura, las cosas viejas pasaron y todo ha sido hecho nuevo, 2 Corintios 5:17. Vivir en el pasado nos paraliza, no es verdad que todo tiempo pasado fue mejor, Nunca digas que todo tiempo pasado fue mejor porque esas quejas demuestran falta de sabiduría. No añores viejos tiempos, no es nada sabio. Eclesiastés 7:10. Ese fue el problema de la mujer de Lot, fijo sus ojos atrás en el pasado, y se volvió estatua de sal en medio del desierto.
El SEÑOR aconsejó a sus discípulos no quedarse mirando el pasado. Porque no se puede pertenecer al reino de Dios y hacer lo mismo que hace un mal campesino, que cuando se pone a arar el terreno y mirando hacia atrás los surcos le salen torcidos. Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios, Lucas 9:62. Tampoco significa que nos volvamos olvidadizos, sino que recordemos las cosas ingratas del pasado sin que nos causen daño.
Debemos aprender a sanar los malos recuerdos del pasado con la sanidad interior de Dios, eso es meditar en las sendas antiguas para no volverlas a recordar. Las personas que no perdonan es porque no han sido víctimas ni han sufrido como aquellas que han atravesado por el dolor profundo, ellos pueden perdonar porque saben lo que es ser víctima y protagonista de la injusticia en un conflicto, y solo Cristo puede sanar el corazón herido para pasar a recordar solo lo bueno.
Quiero hablar del amor de Dios, y cantar sus alabanzas por todos sus favores. Dios ha sido muy bondadoso con el pueblo de Colombia, le ha mostrado su bondad y su gran amor, Isaías 63:7. Échenle cabeza a las cosas pasadas buenas, a las bendiciones que el Señor nos ha dado, olvidemos y desechemos las obras del diablo, olvidemos los pecados y no nos auto acusemos otra vez, todo lo malo que el mundo y las tinieblas les ha puesto en el pasado olvídenlo, pero acuérdense de las todas las cosas buenos que el Señor nos ha dado y que hizo en el pasado porque mayores son las que nos hará en el futuro. Así sea, Amén.
De las misericordias y bondades del Señor hay que vivir haciendo memoria, porque las cosas malas pasaron y todo será hecho nuevo. Él nos ha dado la grandeza de sus beneficios y la multitud de sus piedades.
4.Pensemos en la marcha hacia el futuro, Amado pueblo de Colombia, ¡Regresa ya a tus ciudades! ¡Pon señales en el camino para que puedas encontrarlo! ¡Deja ya de andar perdido! ¡Deja ya de serme infiel! YO SOY el Dios de Colombia, y he creado algo nuevo y sorprendente, tanto que nadie podrá imaginarlo, Jeremías 31:21.
Analiza tu situación objetivamente, mira, no solo veas. Porque cuando ves, observas con cuidado para poder analizar lo que ha sucedido y lo que está por suceder. Desecha la injusticia, no sigas con ella, agradece las bendiciones del Señor de todo tu corazón, desecha todas tus sendas equivocadas. Marchemos hacia adelante. Fíjate bien en el sendero. ¿Qué significa? ¿Qué aplicación tiene?
En medio de la encrucijada pon majanos, delinea los senderos que vas a seguir, estás ante una nueva situación, colócate metas altas que serán posibles pasar y atravesar con el Señor tu Dios. Busca tu buen camino Colombia.
¿Seguirás con la guerra, o buscarás tu paz? ¿Seguirás con la violencia, el odio, la destrucción y la violencia, con la sangre derramada, con la viudez, con la orfandad? Cada uno, de manera personal, párate en tu camino delante de tu Creador, pregúntale, analiza y anda hacia adelante. Toma una decisión donde solo puedan intervenir tu Dios y tú. Busca lo nuevo, no te equivoques otra vez. Busca en Dios hazlo conforme a la voluntad de Dios.
Date cuenta que la constitución y las leyes de tu país se han ido cambiando en el proceso, no permitas que te sigan atacando aludiendo que son asuntos religiosos, lucha contra esas leyes que atentan contra el diselo original de familia, el modelo de vida y los principios que Dios ha establecido para tu bienestar. Si hombres en otros lugares hablan y defienden lo establecido por Dios, aún sin ser del pueblo del Señor, ¿qué haces tú? Párate firme, y aprende a escoger tus opciones pero dentro del Camino. Jesús es tu Camino, su palabra te da las sendas por donde debes andar.
¡No sigas indiferente, protesta ante la inmoralidad, no te quedes callada! Eres pueblo de Dios, Cristo ya pagó por ti. Haz una decisión consciente escuchando a Aquel que te dice: YO SOY tu camino, y hazlo como Él lo dice no como a los otros les parece. Dile SÍ a tu Salvador, que te dice: Puse centinelas sobre ustedes, que dijeran: Escuchen el sonido de la trompeta. Pero dijeron: No prestaremos atención, Por eso escuchen naciones y entiende, oh congregación, lo que sucederá. Oye, oh tierra. He aquí YO traigo mal sobre este pueblo, el fruto de sus pensamientos; porque no han escuchado mí enseñanza, y han menospreciado mi ley, Jeremías 6:17-18. No permitas que reine en tu tierra aquello que contradice a tu Señor, ni en ti, ni en tu familia, ni en tu ciudad ni en tu nación.
Aunque veas que todavía está oscuro descansa en Mí, si ves que aún estás en el desierto, no te afanes, cuando las tinieblas son más densas, es porque se aproxima el amanecer, y en medio de tu desierto, el Señor te abrirá ríos y manantiales para sus hijos.
Amado Padre te doy gracias porque nos recuerdas la vida excepcional que hay en Ti, danos dirigentes capaces de colocar tu palabra por encima de lo secular, ayuda a esta nación para que todos lleven vidas entregadas a Ti, gente que con coraje y determinación reflejen la luz del Evangelio en la política, en los negocios, en la vida social, en las familias, y en lo personal, danos tu sabiduría en esta encrucijada que nos encontramos.
SEÑOR los tiempos son tuyos, haz que tu Espíritu nos tome a cada uno, y guiados por tu palabra, nos detengamos en esta encrucijada de caminos para hacer tu voluntad, porque Tú moriste por todos nosotros y en tu corazón está incrustado el mapa de Colombia, ayúdanos a ponernos metas santas para que salga un grito de victoria en corazones unánimes para que las murallas caigan y tomemos nuestra tierra prometida, esta Colombia que fluye leche y miel, Amén.
Les comparto este mensaje que acabo de oír de un siervo del SEÑOR.
Les comparto este mensaje que acabo de oír de un siervo del SEÑOR.
Solo por tu gracia Oh Dios.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario