DINAMITA ESPIRITUAL IMPACTANDO VIDAS DESDE EL CORAZÓN DE DIOS CON EL PODER DE SU PALABRA.
BLOG LEÍDO EN 132 PAÍSES. Dios está obrando de manera poderosa por este medio.
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# 31. COMUNIÓN ESTRECHA CON DIOS Fiel es Dios por el cual fuimos llamados
a la comunión con su Hijo Jesucristo nuestro Señor, 1 Corintios 1:9. El Señor
aborrece al perverso, pero su amistad íntima es con los justos, Proverbios
3:32b.
Pero tú, cuando ores, entra en tu
cuarto, cierra la puerta y habla a tu Padre que está en el secreto. Y tu Padre
que ve en lo secreto, te dará la recompensa, Mateo 6:6. Cuando tenemos comunión con otras personas, reflexionamos juntos en
el cumplimiento de tareas, intercambio de experiencias y deberes que nos ayuden
a estrechar los lazos de integración, amistad y colaboración mutua.
Nuestra comunión con Dios debe basarse en untrato
familiar, íntimo y amistoso de dos personas que caminan juntas y que comparten experiencias,
pero que al mismo tiempo participamos de compañerismo en espacios de diálogo y
camaradería. Una estrecha amistad con nuestro Dios es un continuo diálogo con
Él, llenando nuestra mente de su palabra, el corazón con su presencia y el alma
con su gloria para irradiarla a quienes nos rodean, En
Cristo, todo el cuerpo, bien conectado y unido entre sí por las coyunturas, se
ayuda mutuamente, y según la actividad propia de cada miembro, recibe su
crecimiento para ir edificándose en amor, Efesios 4:16.
Amistad íntima con
Dios desde la raíz hebrea significa cohesión y unión estrecha de una entidad
compuesta de dos o más personas que permanecen juntas en íntima relación,
conocimiento y tiempo, al punto que llegan a saber cómo piensa, qué le gusta y
cómo obra cada una de ellas, esto es para el cristiano, tener la mente de
Cristo, 1 Corintios 2:16, y en griego es koinonia que alude a mantener
activos los vínculos entre los miembros de un grupo.
La común unión con Dios es un permanente caminar con Cristo
guiados por su Espíritu. La comunión con Dios está tácita en el Tabernáculo de
reunión; al lugar santo entraban los sacerdotes a quemar incienso todos los
días al amanecer y en la noche, mantenían la iluminación del lugar y cambiaban
los panes de la proposición, esto es para el cristiano un andar permanente,
alto y de calidad con Dios andando bajo la nube de su gloria para escucharlo
hablar, como lo escuchó Zacarías el padre de Juan Bautista.
Es esa intimidad donde nadie más interviene, es unión profunda y
privada a solas donde se comparten sentimientos, actos y palabras de afecto con
sinceridad; las personas hablan y se expresan claramente lo que cada uno siente
por el otro sin esconderse nada; se abre el corazón y se desnuda el alma para
revelarse uno al otro como lo hacen los esposos.
La intimidad con Dios está representada en el lugar santísimo, la
cámara interior de la morada de Dios, la parte principal del tabernáculo donde
solo podía entrar el sumo sacerdote para estar ante la gloria de Dios y
santificarse, porque allí en la intimidad con Dios no encontramos con su excelsa
presencia, cada uno cara a cara con el Eterno.
En nuestra intimidad con Dios ya no se juntan el siervo y el
Señor, sino se unen dos amigos estrechos y cercanos que se aman, sin reservas
el uno al otro, como en el caso del matrimonio, Ya no los
llamó siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su amo. Los llamo mis
amigos, porque les he dado a conocer todo lo que mi Padre me ha dicho, Juan
15:15.
Así que comunión es intimidad reveladora desde el corazón, privacidad
en la habitación donde cada uno entrega el tiempo para escucharse hablar con
atención y amor, Juan 14:3. En la comunión con Dios, nos conectamos dos, pero uno depende
del otro; allí Dios se manifiesta y nos revela sus planes; nos corrige, nos confronta
y nos enseña con infinita ternura; somos uno con Él, transformados y purificados
por Él y en Él, nos fundimos en un solo Espíritu trayendo el cielo a la tierra
para dar a conocer y vivir los deseos del corazón divino...Como Tú, oh
Padre, estás en Mí y YO en Ti, que también ellos estén en nosotros…Juan 17:21.
Pero Dios siempre quiere que vayamos más allá, Él nos anhela con el
ansia que supera nuestro entendimiento y expectativas humanas. Él nos desea
continuamente de manera personal, lo cual es un honor y privilegio
extraordinario para el cristiano, hijo de Dios y nacido de muevo. Esa intimidad
con el Amado la pudieron experimentar Moisés y David, pero Jesús la mantuvo con
el Padre y recibían la voluntad del corazón del Padre a sus corazones, Antes
bien, como está escrito: cosas que ojo no vio, ni oído escuchó, ni han subido
al corazón del hombre, son las que Dios ha preparado para los que lo aman. Pero
Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo
escudriña, aún lo profundo de Dios, 1 Corintios 2:9-10.Entonces: ¿Cómo podemos
desarrollar la intimidad con Dios?
1. Abriendo nuestro
corazón, humillándonos y siendo honestos. Todas las
cosas me han sido entregadas por mi Padre, y nadie conoce al Hijo, sino el
Padre; y nadie conoce al Padre, sino el Hijo, y todo aquel a quien el Hijo se
lo quiera revelar, Mateo 11:27.Un buen ejemplo en las
Escrituras es la vida de Job y David, fueron fieles, obedientes y rendidos al
Eterno Dios de amor, ellos no solamente abrieron totalmente su corazón al
Señor, sino que lo entregaron todo, fueron honestos delante del Él. No se
guardaron nada de su yo para sí mismos, sino que se despojaron de su propia
vida para humillarse y dedicarse a buscarlo y agradarlo todo el tiempo, Con mi alma te he deseado en la noche, y en
tanto que me dure el espíritu dentro de mí, madrugaré a buscarte…Isaías 26:9.
Esta intimidad solo la podemos desarrollar cuando nos encontramos
a solas con Jesús en el lugar secreto o caminamos con su presencia desde lo
profundo se nuestro corazón, Siete
veces al día te alabo, Salmos 119:62, y Jesús dijo: Pero tú,
cuando ores, entra en tu cuarto, cierra la puerta y habla a tu Padre que está
en el secreto. Y tu Padre que ve en lo secreto, te dará la recompensa, Mateo
6:6.
En nuestra intimidad con Dios, desnudamos completamente nuestro
corazón ante Él, por eso la intimidad que Dios quiere con su Iglesia, es como
la del esposo con la esposa; algo profundo, estrecho, sincero y de total
entrega, que produce descanso y placer al alma estando entre sus brazos de
amor. En esa intimidad se une nuestro espíritu con el del Santo, y llegamos a
ser uno solo, esa fue la razón por la cual Jesús oró por la unidad entre Él y
sus discípulos, Juan 17.
2. Debemos quedarnos
quietos y en silencio para escucharlo. ¡Ríndanse!
¡Quédense quietos y reconozcan que YO SOY Dios! ¡YO estoy por encima de todas
las naciones! YO seré exaltado en toda la tierra! Salmos 46:10. No podemos
desarrollar intimidad con Dios estando de prisa o con la mente dispersa. Moisés
solía entrar en el Tabernáculo de reunión para hablar con Dios, y allí escuchó
su voz, Números
7.89. Era
un lugar perfecto para buscar su gloria y hablar de tú a tú con el Grande y
Señor del universo.
Jesús al clarear el día, cuando aún era oscuro, buscaba apartarse
de sus discípulos para tener intimidad con el Padre, levantándose
muy de mañana, siendo aún muy oscuro, salió y se fue a un lugar desierto, y
allí oraba, Marcos 1:35. Hoy tenemos al Espíritu Santo y a través de Él podemos mantener
una estrecha intimidad con el Padre y con el Hijo. Ustedes
no han recibido un espíritu de esclavitud que lo lleve a tener miedo, sino que
tienen al Espíritu que los hace hijos de Dios. Por medio de Él nos dirigimos a
Dios, diciendo: ¡Abba, Padre! Romanos 8:15. Esto quiere decir que podemos desarrollar
con confianza para hablar como a Padre tierno y comprensivo: Papito Santo, aquí
estoy para Ti, busquen a
YHWH y su poder; busquen su rostro continuamente,1 Crónicas 16:11.
Para llegar a estar adheridos con Dios, necesitamos estar quietos,
guardar silencio y no distraernos para poder oír sus misterios y revelaciones,
es algo que requiere disposición, disciplina, tiempo y práctica. Dios nos llama
y nos habla en la quietud del silencio como le sucedió a Samuel, Y vino
YHWH y se paró, y llamó como las otras veces: ¡Samuel, Samuel! Entonces Samuel
dijo: Habla porque tu siervo oye, 1 Samuel 3:10.
3. Permitir que sea Dios
quien tome el control. El hombre
debe quedarse quieto y callado, solo cuando el Señor se lo impone,
Lamentaciones 3:28; solo el Espíritu Santo es quien escudriña y examina nuestro
corazón, Él nos da revelación del Padre y del Hijo; es con Él que tenemos conocimiento
y discernimiento para nuestra vida y ministerio en un despertar de los dones, Juan
14:26 y 16:13.
El Espíritu Santo, nuestro Ayudador, nos revelará al presente,
tres cosas básicas que ya conocemos: el amor, el perdón y la salvación; también
nos revelará las cosas del futuro: la verdad de los hechos y lo profético, para
saber orar, hablar o actuar según la perfecta voluntad divina, Juan 3:16. Y finalmente el Espíritu
Santo actuará a través de los dones que nos han sido concedidos y nos ayudará a
mantenernos en la presencia de la gloria de Dios, para ser luz y sal y bendecir
e instruir a quien Él nos indique, 1 Reyes
19:9-12.
Mg. MEHC, hija del Fios vivo, real y verdadero y servidora de su reino.
SEGUIMOS EN AYUNO Y ORACIÓN POR COLOMBIA Y SEGUIMOS CON LA PARTICIPACIÓN DE LA REGIÓN ANDINA
Santidad para
con Dios e integridad entre unos y otros.
Como Aquel que los llamó es santo,
también sean ustedes santos en toda su manera de vivir; porque escrito esta:,
Sean santos, porque YO SOY Santo, 1 Pedro 1:14-16. Sigan la paz con todos, y la
santidad, sin la cual nadie verá al Señor, Hebreos 12:14.
Por lo tanto, ya no se mientan más
unos a otros, sino diga siempre cada uno la verdad a su prójimo, porque todos
somos miembros del cuerpo de Cristo, Efesios 4:25.
Amarás al Señor tu Dios, de todo tu
corazón y de toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas,
Deuteronomio 6:15. Mateo 22:37, Marcos 12:30 y Lucas 10:27. Porque por haberse
multiplicado la maldad sobre la tierra, el amor de muchos se enfriará, Mateo
23:12. Esta
es una de las más tristes realidades que está viviendo la humanidad en estos últimos
tiempos, antes de la Segunda Venida de nuestro Señor Jesucristo. La falta de
amor ha hecho que el corazón de las personas se endurezca de manera alarmante,
al grado de creerse dueños de la vida de su prójimo; el extremo del desamor y la maldad les hace creer que
al privar de la vida a sus semejantes, hacen el bien según su parecer, pero es la oscuridad del pecado que cubre las mentes de esas personas sin Dios.
Nos
quejamos de todo, echamos culpas a todo el mundo, evadimos responsabilidades,
reclamamos derechos sin cumplir deberes; muchos viven encendidos en ira, odio, resentimiento y fastidio contra los que piensan y actúan diferente, porque la pureza y las buenas acciones confrontan su conciencia llena de pecado; se comparan unos a otros, compiten y
se rodean de venganza y malos deseos; pero no se dan cuenta que actúan así
porque no conocen a su Creador ni aman a su Salvador, no han tenido un encuentro personal con Jesucristo, no pueden arrepentirse de sus baja pasiones porque su corazón se ha endurecido a tal grado, que siempre buscan un culpable para responsabilizarlo de todo el dolor que hay sobre la tierra, culpan hasta al mismo Dios y no reconocen que ellos mismos son parte del dolor y del problema, No
se engañen a ustedes mismos, de Dios nadie se puede burlar; lo que cada uno
siembra, eso mismo cosechará, Gálatas 6:7. La vida es un bumerán.
Dios
ha dado instrucciones claras, ha dejado principios para vivir honesta
y dignamente y que todos podamos disfrutar de un ambiente lleno de bienestar y
armonía en esta tierra, aún en medio de las diferencias y las dificultades normales de la vida,
pero la gran mayoría de la gente hace caso omiso a lo que Dios dice y ordena sembrando su propia desdicha, no solo en esta tierra sino en la eternidad, pero si oyes atentamente la voz del Señor tu Dios, para guardar y poner por obra sus
mandamiento...También el Señor te exaltará sobre todas las naciones de la
tierra…siga
leyendo en su biblia y preste oído para vivir una fe obediente, así el bien te
seguirá todo el tiempo de tu vida, Deuteronomio 28:1-14.
La
situación que afronta el mundo de hoy, nos indica que es tiempo de dejar de
culpar a los otros y tomar nuestras propias responsabilidades, es tiempo de enfrentarnos con nosotros mismos y examinarnos
para ver en qué debemos cambiar, cómo debemos ser mejorados seres humanos, en
qué debemos ser renovados para agradar el corazón del Santo. Si cada uno de nosotros se empeña en transformarse en un ser humano de calidad y de ejemplo, que ama, obedece y se somete al Eterno,
las fuerzas del mal tendrán que huir, y el cambio en la sociedad será visible. Así
que, cada uno, según el don que ha recibido de Dios, úselo a
favor de los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de
Dios, 1 Pedro 4:10. Necesitamos ser
íntegros para con nuestro vecino, para con nosotros mismos y con la sociedad.
Tú
y yo somos los que hacemos y damos forma a la sociedad donde vivimos; son nuestras
acciones las que marcan el derrotero que lleva el rumbo de este mundo, que se
ha olvidado de su Creador, se ha olvidado de dar lo mejor de sí mismo, por es muchos se han tornado en total enemigos de la justicia y la verdada, son energúmenos a quienes les importa nada el otro, porque su ego los domina y reina en el centro de su alma desplazando al Cristo. Lea Romanos 1:18-32 y verá la radiografía de la sociedad actual.
La
única manera de derrotar tanta barbarie, tanta maldad, tanto desamor, tanta
crueldad y tanta irresponsabilidad, es con Cristo en el corazón, gobernando
nuestras almas y dirigiendo nuestras vidas día a día, la respuesta contra toda locura del mundo se encuentra en la palabra de Dios, Así
brille la luz de ustedes delante de todos los seres humanos, para que vean sus
buenas obras y glorifiquen a su Padre que está en los cielos, Mateo 5:16. Sométanse
a Dios, resistan al diablo y de ustedes huirá, Santiago 4:7. Si satanás huye de cada
uno de nosotros, huirá también de nuestra sociedad.
Someterse
al Eterno Creador implica integridad a toda prueba, limpieza desde adentro del corazón reflejada en los hechos,
pureza de intenciones al relacionarnos unos con otros, transparencia de vida, cumplimiento en lo que prometemos, y rectitud en el camino recto y angosto
por donde andamos; con pensamientos permanentes en Dios para ser guardados y
fortalecidos en todo bien y lo que Él Padre ha establecido para que seamos llenos de vida y
bienestar, Porque Tú, Señor, guardarás en perfecta paz a todos los
que confían en Ti; a todos los que concentran en Ti sus pensamientos, Isaías
26:3.
Necesitamos
ser gobernados totalmente por el Espíritu de Dios para vivir en Él y en su
fruto: Digo pues, anden en el Espíritu, y no satisfagan los
deseos de la carne. Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del
Espíritu es contra la carne; y estos se oponen entre sí, para que no hagan lo
que ustedes quieren. Pero si somos guiados por el Espíritu, no estaremos bajo
la ley del pecado. Porque las obras de la carne son claramente visibles, y
estas son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicería,
enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, divisiones, herejías, envidias,
homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de los
cuales, YO le advierto, como ya lo he dicho antes, que los que practican tales
cosas, No entrarán al reino de Dios. Pero el fruto del Espíritu es amor,
gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe obediente, mansedumbre, dominio
propio, y no hay ley que condene estas cosas, Gálatas, 5;16-23.
Está
en nuestras manos cambiar e impactar el mundo, si deseamos paz y ser gratos ante los ojos de nuestro Creador y Salvador; y como hijos de Dios vivir una continua fe obediente, alcanzado cada día la estatura de Cristo; ES URGENTE
INTENSIFICAR la vida espiritual a la manera de Dios, orando, ayunando, y viviendo lo que
nos enseña la Biblia para mostrar a Jesucristo; debemos ser verdaderos adoradores en espíritu y verdadad, ofreciendo a Él nuestras vidas santas como holocausto
vivo; necesitamos ser mansos y humildes de corazón como Jesús,
lo cual Él nos enseñó en el Sermón del Monte donde nos instruye en la esencia del verdadero carácter cristiano, del auténtico discípulo que anhela ser como
su Maestro, Mateo 11:29.
Dios sigue hablando para que su Iglesia sea testimonio de santidad y esté como atalaya y virgen prudente porque el fin de satanás para quedar encerrado por mil años, está cerca, por eso ha volcado todo su arsenal maligno engañando a miles para que sean instrumentos de su maldad, el trabajo del cruel es sembrar todo el mal que vemos ante nuestros ojos. Pero nuestra consagración, integridad y santidad lo harán huir despavorido de nuestras vidas y nuestro entorno, Dios nos está llamando a la pureza total, para salir de la tibieza y la liviandad consagrándonos a Él y su evangelio; de esta manera el Eterno, le dará la estocada de gracia al enemigo de las almas, por consigiente habrá despertar en el Cuerpo de Cristo y avivamiento en el mundo, Nuestra mejor manera de discipular es nuestro testimonio de amor, bondad y rectitud ante los ojos del mundo. No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos, Gálatas 6:9; pues el que persevere hasta el fin, ese será salvo, Mateo 24:13. Oremos con Salmos 141 para que nuestros sentidos no nos engañen y nuestra vida sea guardada de todo mal Amén. Mg. MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino eterno.
Antes que me llamen, YO les responderé, antes
que terminen de hablar, YO los habré escuchado, Isaías 65:24.
Que el SEÑOR esté con nosotros como estuvo con nuestros padres, que NO nos deje ni nos abandone, y que incline nuestro corazón hacia Él, para que andemos en todos sus caminos para que guardemos sus mandamientos, estatutos y preceptos que ordenó a nuestros padres...1 Reyes 8:57-59.
Claman los justos, y YHWH oye y los libra de todas sus angustias. Cercano está el SEÑOR a los quebrantados de corazón y salva a los contritos de espíritu. Salmos 34:17-18.
Oremos como lo hizo Nehemías, con lloro y lamento, haciendo duelo y ayuno por algunos días, humillados delante del Dios de los cielos que oye los ruegos de sus hijos que claman a favor de la nación y las ciudades de la tierra, para que venga arrepentimiento, haya perdón, seamos guardados y se reconstruyan los muros espirituales en el pueblo de Dios, para que haya vida, orden y libertad! El SEÑOR es refugio de los oprimidos, es nuestro baluarte en tiempos de angustia. Salmos 9:9.
El Intercesor Nehemías oró engrandeciendo el nombre de Dios, reconoció su grandeza y poderio, y confesó que ante la presencia del Eterno todo el mundo tiembla, porque Él cumple su palabra de juicio contra los enemigos, pero ama a los que le obedecen. SEÑOR, escucha, atiende y responde nuestra oración porque Tú sabes quienes somos tuyos y tus servidores; reconocemos que hemos pecado contra Ti, no solo nuestros antepasados, sino también hoy nosotros. La nación toda ha pecado y actuado mal porque hemos transgredido tus mandamientos. Pero has dicho que si nos arrepentimos y obedecemos tu palabra nos ayudarás a ser santos y mantenernos en unidad para sanar nuestra tierra porque toda tu nación, tu remanente santo decide dejar todo camino de impiedad e injusticia. 2 Crónicas 7:14. Bueno eres SEÑOR, eres refugio en el día de la angustía, eres protector de los que confían en Ti. Nahum 1:7
Ten piedad SEÑOR, porque en
extremo se han corrompido los gobernantes, dictando leyes contrarias a tus principios, atentando contra la integridad, la moral y la pureza espiritual del pueblo, en gran manera se han violado tus mandamientos,
estatutos y preceptos, pero así como escuchaste el clamor de los antigüos, óyenos hoy, y como Josué oró y adoró, hoy nos postramos ante tu majestad, reconociendo que Colombia es tierra que te pertenece; ahora SEÑOR levanta un pueblo de adoradores que provoquen que el Ángel de YHWH salga a ayudarnos con su espada de fuego en la mano para ponerse de nuestro lado, y como ellos conquistaron Jericó, guíanos con poder y autoridad para conquistar esta tierra para tu gloria y tu alabanza y que nosotros podamos vivir en ella bajo tu gobierno mientras Tú prolongas nuestros días para adorarte y servirte. Josué 5:13-15. Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestra ayuda segura en momentos de aflicción. Salmos 46:1.
SEÑOR, como escuchaste a David tantas veces que oró para ser librado de sus enemigos que se multiplicaban y se levantaban contra él, hoy muchos imaginan que no hay salvación para los justos, también hoy confesamos que Tú Dios, eres escudo alredor de mi, de mi casa y mi nación; solo Tú SEÑOR eres nuestra gloria y el que levantas nuestra cabeza. Clamamos con gran voz porque sabemos que Tú nos respondes desde tu monte santo. Dormimos tranquilos porque Tú mi Dios eres quien nos sustentas y guardas. Por tanto, en Tú amor nos refugiamos y no tememos tenemos miedo ante esos hombres impíos que quieren ponernos sitio, pues con seguridad sabemos que Tu, Salvador Amado nos salvarás. Salmos 3. Tú SEÑOR eres nuestro refugio; Tú nos protegerás del peligro y nos rodeas con cánticos de liberación. Salmos 32:7.
Nosotros,
pues, somos tus siervos y tu pueblo, atiéndenos por tu misericordia, no porque lo merezcamos, sino porque nos arrepentimos, nos humillamos y reconocemos tu santidad frente a nuestro pecado, nos ponemos a tus pies para luchar hoy con tus fuerzas; quita todo mal en Colombia que hemos cosechado, pues Tú SEÑOR, nos redimiste con tu gran poder, y
con tu mano poderosa en la cruz y von sangre, oh divino Cordero Santo. Te rogamos Padre, en el nombre de Jesús que esté ahora atento tu oído a la
oración de tus siervos, y a la oración de tu pueblo, porque deseamos reverenciar
tu nombre; concédenos ahora buen éxito y danos tu gracia delante de aquellos que con avaricia, codicia y maldad quieren apropiarse de nuestra nación, danos tu respaldo, tu libertad y tu victoria. Nehemías 1:9-11.
Como Ezequias oró y presentó las cartas en contra de los adversarios, hoy te presentamos todos los planes que ellos han tramado en oculto para desestabilizar la nación y el destino de Colombia, nosotros oramos porque asi como fuiste en el pasado el Dios de Israel, también eres hoy el Dios que reina en nuestros corazones, y nuestra patria; solo Tú eres Dios sobre todos los pueblos y gobernantes de la tierra. Inclina YHWH tu oído y oye nuestra oración, y Tú que lo conoces todo y oyes las amenazas de nuestros enemigos que blafeman tu nombre, aplaca y consume todo plan del comunismo que ya ha destruido naciones y ha arrasado con tierras, y NO permitas que entre a Comombia, líbranos SEÑOR; ahora, pues, Dios nuestro, Sálvanos, te lo suplicamos, libéranos de las manos corruptas y derramadoras de sangre, y que sepan las naciones de la tierra, que solo Tú eres Dios y SEÑOR en esta tierra de Colombia y de este pueblo. Respóndemos como lo hiciste con Ezequias: Lo que te pedimos, haz oído y actúa, pues ellos se han revelado contra el Santo de Israel. 2 Reyes 19:14-22.
Intercedemos desde lo profundo de nuestras entrañas a favor no solo de nosotros mismos, sino de nuestro pueblo y toda la tierra donde hay pueblo tuyo para que tu gloria sea vista y tu pueblo liberado, Porque Tú SEÑOR, nos libraste de las tinieblas y nos trasladaste al reino de tu amado Hijo, en quien tenemos redención, y el perdón de los pecados. Colosenses 1:13-14.
Dios nos
enseña a buscar su presencia y nos da su ayuda cuando conocemos el problema y lo ponemos frente a la palabra para que sea vencido; en este momento son cuestiones geo-sociopolíticas que nos inquietan profundamente pero sabemos que no solo hay que orar y ayunar, es más que oración, es un gemir y un clamor para ver la liberación de Dios, y en ese punto de dolor reconocemos nuestro
pecado y nos duele el alma frente a la maldad nacional, vemos todo tan claro, que nos duele hasta las lágrimas; esta será una oración que el Eterno
Dios de amor escuchará y pronto responderá porque estamos tocando su corazón y nos alineamos al deseo de Él, anhelando la pureza, el amor, la unidad y el orden sobre la tierra de Colombia y las demás naciones del mundo, y como Josafat recibió la palabra: No nos amedrentamos delante de esa multitud de enemigos grande, porque no es nuestra la lucha sino de Dios. Y Él descenderá contra ellos porque le hemos entregado todo en su mano. 2 Crónicas 20:15-17.
Es orando e intercediendo de tal manera por nuestras familias, por la nación, por nosotros mismos y las naciones que la gloria y la respuesta desde el corazón del Padre se verá, y se derramará su gloria victoriosa como rocío; porque orar es un oficio grande y agradable delante de Dios; gemir es un acto de audacia y valentía, en amor y entrega a Dios, en un privilegio para sus guerreros. Interceder es el
mayor privilegio que podamos disfrutar, porque nos conecta en estrecha intimidad con el
corazón del Varón de Guerra, YHWH Gibor Zabaot, SEÑOR de los ejércitos celestiales y Él acude a derrocar los enemigos al ver corazones rendidos como el de Daniel; Dios nos hace entender y sale para darnos sabiduría y entendimiento, porque desde el principio de nuestro clamor Dios da la orden a los arcángeles para defendernos y ayudarnos, aunque el principe de este mundo se oponga. Daniel 9:20-23, pero así como oramos, debemos trabajar.Nehemías 4:9.
Cuando intercedenos buscamos el rostro de Dios, nos examinamos frente a su santidad y nos ofrendamos al SEÑOR, enarbolando su palabra a favor para unirnos a los deseos del corazón del Padre Bueno para que se haga su voluntad porque somos instrumentos de su gloria y puentes de
bendición para hacer su gran obra en medio de los hombres y las naciones. Salmos 26.
Queridos
intercesores, Dios ama a sus soldados valientes y cuando venimos ante Él con
humildad y mansedumbre conmovidos profundamente por el pecado, la maldad y la
injusticia que hay en el mundo, Él nos consuela. Todo su pueblo, el Cuerpo de Cristo, somos sus atalayas que
Interceden, gritan y gimen ante el peligro para que la mano del Creador se
mueva en nuestro bien y su ayuda venga desde su trono para bajar a la tierra. A Tí SEÑOR levanto mi alma, porque yo en Tí confío para que no seamos avergonzados. Salmos 25:1
Jesús
es nuestro mayor ejemplo Intercesor y debemos hacernos como Él, debemos
llevar nuestra cruz; hoy el SEÑOR pasea su mirada por toda la tierra buscando
intercesores genuinos y adoradores que se pongan en la brecha para
liberación y salvación no solo de su Iglesia, sino de todos los habitantes de
la tierra, su palabra es nuestra fuente de oración y seguridad en Él, no olvidemos que los salmos son el más grande manual de oración y ayuda en la batalla por excelencia, y dado por Dios a su pueblo. El SEÑOR está cerca de quienes lo invocan, de quienes lo llaman con verdad. Salmos 145:18.
No temas, permanece firme, y mira la salvación que el SEÑOR hará hoy contigo…Éxodo 14:7 No somos nosotros los que pelearemos esta batalla. Tomamos nuestra posiciones (de rodillas orando), estémonos quietos delante del SEÑOR, y veremos cómo Él nos librará…No tengamos miedo ni nos asustemos; marchemos (en adoración) contra los enemigos, porque el Todopoderoso está con nosotros. 2 Crónicas 20:7.
Bienaventurados los
que tienen hambre y sed de justicia Porque
ellos serán saciados, Mateo 5:6
Porque El que va tras la justicia y la
rectitud halla vida, prosperidad y honra, Proverbios 21:21.
Pero tú,
hijo de Dios, huye de las cosas del mundo, y sigue la justicia, la piedad, la
fe, el amor, la paciencia y la mansedumbre, 1 Timoteo 6:11. Por lo cual no
resbalarás jamás; en memoria eterna será el justo, Salmos 112:6. Porque el
SEÑOR todopoderoso ama la justicia y no abandona a quienes le son fieles, para
siempre serán guardados…Salmos 37:28. El cristiano genuino se
preocupa por las almas perdidas y la paz de su tierra, mientras vive la vida a la luz del evangelio,
sabe que el problema del género humano es el pecado, por eso llora ante Dios
mientras gime y clama misericordia al ver el estado de su nación y del mundo, el dolor de la
gente, la mortandad rampante y las amenazas de posibles guerras, así es como
somos bienaventurados, eso es tener hambre y sed de justicia de Dios, Él anhela
volver a tener a todos los que eran suyos desde el principio de la creación, pero que a
causa del engaño de la serpiente antigua se perdieron, por tanto, ¡tú, vuélvete a Dios!
Con ese profundo anhelo
fue que el Padre envío a su Unigénito a morir en la cruz, para recuperar lo que
se había perdido. Si todos pudiéramos entender lo que significa esto, no habría
tanto dolor ni violencia en el mundo, porque en Cristo y nuestra fe en Dios tenemos el único camino
verdadero a la paz: que el cristiano genuino, el que es hijo de Dios, el que ha
nacido de nuevo y ha tenido un encuentro personal con Jesucristo, ofrezca su
vida en holocausto con santidad, orando, ayunando, velando, dando la batalla espiritual y ejerciendo su autoridad para que las almas vuelvan a las manos de su Creador y nuestra tierra se sane. Solo así veremos el
cambio en la sociedad, claro, empezando el cambio por cada uno de los miembros del cuerpo de
Cristo tomando su lugar y siendo responsables en lo que el Eterno nos ha
encomendado. Amén. Mg. MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino
Yo conozco tus obras,
que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueras frío o caliente! Pero por cuanto
eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca, Apocalipsis 3:15.
Al que venciere, YO
lo haré columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí; y
escribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios,
la Nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo,
Apocalipsis 3:11-12.
La grandeza
de la sabiduría de Dios, es tan sencilla que la entienda todo ser humano, su
palabra se revela a sí misma. El Creador siempre usa lo natural para enseñar lo
sobrenatural; todos podemos entender sus instrucciones, así que cada uno
decide: ¡eres hijo de Dios o vómito que Él
tira¡ Jesús usa el vómito en este texto para aclarar que los que no son de
Él, tampoco son parte de su cuerpo, por lo tanto serán desechados y echados
fuera a las tinieblas del enemigo, los tibios son aquellos que entran a las iglesias
encubiertamente, gente que no cambia y siguen vestidos de la justicia propia de
sus obras y no de las justicia de Dios.
Tú dices; yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo
necesidad, y te das cuenta que eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudos, Apocalipsis
3:17. En el mensaje a Laodicea el Señor revela lo que impide tener la salvación en el corazón de
muchos personas que creen ser ricos y poderosos, que van a una iglesia y no tienen
necesidad de nada; son personas que nunca han sentido en su vida la necesidad
de Dios, no han podido reconocer que sin Dios están perdidos. Aunque sean adinerados,
con familia, empresa y todo lo material del mundo, están perdidos eternamente,
mientras no reconozcan a Cristo como su Salvador, Cuida
de no olvidarte de tu Dios, para que puedas cumplir sus mandamientos, sus
decretos y estatutos que YO te ordeno hoy, Deuteronomio 8:11.
Cuando crees
que todo está bien, estás en peligro espiritual, tu corazón se ensoberbece, y
el alma se enaltece, las alturas del aplauso, la riqueza, el éxito y la, vanagloria
del mundo te afectan gravemente y como ser humano te descompones. Puedes ir a
una iglesia para cumplir con una religión, pero Dios no está allí. ¡Oh almas infieles! ¿No saben ustedes que ser amigos del
mundo es ser enemigos de Dios? Cualquiera que decide ser amigo del mundo, se
vuelve enemigo de Dios, Santiago 4:4.
Dios está a
favor del bienestar de la gente, Él lo creó todo bueno para nuestra bendición;
el problema es no tener la mirada en Cristo. Tenerlo todo hace que muchos se
crean auto suficientes y se independicen de Dios, quedando a merced del pecado, hay "creyentes" que van en contra sentido…los malignos… como hierba serán pronto cortados, y como
hierba verde se secarán, Confía en Dios y haz el bien, y habitarás en la
tierra, y vivirás en la verdad. Deléitate en Dios, y Él concederá las
peticiones de tu corazón. Encomienda al Señor tu camino, confía en Él, y Él
hará, Salmos 37:2-6.
La raíz de todos los males es el amor a las riquezas, 1 Timoteo 6:10.
Ir a una
iglesia sin tener a Cristo en el corazón es lo mismo que tener olvidado a Dios,
es mera religión, cuando sales de allí solo te preocupas de los bienes del
mundo, lo cual es un gran peligro, Estos son los que
fueron sembrados entre espinos; los que oyen la palabra , pero los afanes de
este mundo, el engaño de las riquezas, y las codicias de otras cosas, entran y ahogan
la palabra, y se hace infructuosa, Marcos 4:18-19.
Esas personas
están en ignorancia, son ricos pero no tienen entendimiento para la realidad de
Dios, aunque están rodeados de riquezas, son desventurados, andan afligidos por
el vacío de su corazón sin Cristo y están llenos de temor y depresión; todo
ser humano tiene un vacío que solo Dios puede llenar; esa es la razón por la que
muchos se casan, se divorcian se vuelven a casar y se comprometen muchas veces
sintiéndose siempre infelices e insatisfechos; el trono de su corazón solo
puede ser llenado con la presencia de Jesucristo; esa fue la razón por la cual
Jesús le dijo a la samaritana: Si conocieras el don
de Dios, y quien es el que dice dame de beber, tú le pedirías, y Él te daría
agua viva, Juan 4:10.
La vida sin
Dios es una falacia, Vanidad de vanidades,
todo en este mundo es vanidad, Eclesiastés 1: 2. Sin Cristo todo carece de sentido,
no hay propósito para vivir, el texto dice a esas personas que son desventurados,
miserables y pobres, alguien digno de lástima; anda atormentado, ciego y desnudo;
no tiene la capacidad de ver ni comprender la realidad del mundo espiritual en
Dios, y lo que practican es una religión sin Cristo; en vez de ir ascendiendo, van
hacia abajo; viven el empirismo de sus cinco sentidos; en realidad son
incrédulos y no pueden ver más allá de sus limitaciones sensoriales, son naturales sin entendimiento a la vida sobrenatural, lo
espiritual no les interesa, no perciben el nivel invisible de Dios, para ellos
es locura, nada pueden discernir espiritualmente, 1 Corintios 2:14.
Algunos creen
que esto es para gente de afuera, pero lamentablemente es para muchos que se
congregan, que oyen y oyen pero no practican la fe de Cristo, son solo oidores, pero no hacedores, Santiago 1:22;son como los demonios, creen y
tiemblan, pero no obedecen la palabra, Santiago 2:19. Los templos están llenos de gente
que no tiene una relación personal con Cristo, por eso están insatisfechos todo
el tiempo, se quejan, no tienen paz, no tienen un propósito, no saben para qué
nacieron, no saben para qué tienen que vivir, viven sin dirección, con
presiones, con afanes, andan sin los extraordinrio de Dios; están ciegos a sus
necesidades espirituales, Salmos 73::22.
Están
desnudas espiritualmente hablando, como Adán y Eva en el Edén cuando pecaron y perdieron la inocencia; antes de pecar vivían en el plano
espiritual, por eso no se daban cuenta de su falta de vestido físico, tenían
comunión con Dios y vivían con tranquilidad; Génesis
2:25, pero en el
momento que pecaron, se desconectaron de Dios y del mundo espiritual con Él, así
entró la muerte espiritual al ser humano separándose de su Creador, por lo cual
la raza humana comenzó a vivir y depender de sus cinco sentidos, Génesis 3:11-12.
Si vivimos en
lo espiritual de Dios, estaremos en inocencia, nos miraremos con pureza y
limpieza de corazón; si viviéramos así todo el tiempo, el hombre no codiciaría
a la mujer carnalmente, ni sería esclavo de la lascivia, seriamos inocentes como los niños menores de siete años que se
bañan juntos, sin malicia, se besan con besos santos, y con amor limpio, trasparente
y sincero sin hipocresía ni malas intenciones, Mateo 18:3. Si eres una persona que te mueves
opuesto a esto, NO ERES CRISTIANA. Cristo nos ha vestido con su justicia, para
que andemos vestidos de pureza y transparencia de alma.
En Apocalipsis 3:18a que simboliza la redención, el Señor da tres consejos a
los tibios que se congregan y no han nacido de nuevo, los miembros de la
Iglesia de Laodicea no tenían la salvación de Cristo, hoy también hay muchas
personas llenando las iglesias que no son salvas, Mateo
7:21-23.
a.Apocalipsis 3:18a, te aconsejo que de Mí compres oro
refinado en fuego, significa llenarse del Espíritu: Esto no significa que la salvación pueda ser comprada o
ganada por sí mismos, somos como trapo de
inmundicia ante los ojos de Dios,Isaías 64:6. Una persona sin Dios, es como una hoja que cae del
árbol y el viento la lleva de un lugar a otro, Salmos
1.
El justo se
compara a un árbol que da fruto y permanece verde porque bebe agua de la fuente
que lo mantiene, pero el injusto es como el tamo seco lanzado por el viento de
un lugar para otro, esto indica la inestabilidad de los que no son cristianos; llegan
a tener varios matrimonios, van de un empleo a otro, de filosofía en filosofía,
de iglesia en iglesia; son personas totalmente inestables, son de doble ánimo como dice Santiago 1:8. Esa inestabilidad muestra claramente
que no están plantados en las corrientes de agua que es la palabra de Dios que nos
da vida, están secos porque no tienen una relación íntima y diaria con Dios.
b.Apocalipsis 3:18b, te aconsejo que compres vestiduras
blancas, significa vivir en pureza, una persona sin Cristo, no se da cuenta que Dios lo ve desnudo; antes
de conocer a Cristo teníamos una religión, éramos como plantas de higuera sin
fruto; Mateo 21:18-22, por lo cual Jesús maldijo a la
higuera. Esto es para el que cree que la religión le tapa sus faltas y lo
salva, pero está bajo maldición los de la fe son
bendecidos…y los que dependen de las obras de la ley están bajo maldición, Gálatas
3:9-10. Las buenas
obras no te salvan y mueres en tus propios pecados si no te arrepientes, dejas
tu mal camino, recibes a Cristo como Salvador y vives en santidad.
La religión es
idolatría, estás desnudo y bajo maldición delante de Dios; la muerte de Cristo
nos viste, porque Jesús se atribuyó y cargó nuestro pecado, nuestro cuerpo
desnudo en injusticia, fue envuelto en su justicia, por eso Jesús fue crucificado desnudo, estamos protegidos contra
el pecado y llegamos al cielo justificados en las obras de Cristo, que nos
viste de lino fino, blanco y resplandeciente,
Apocalipsis 19:8. Si no
tienes a Cristo, tampoco tienes sus vestidos, estás desnudo, por lo tanto no
puedes recibir salvación.
c.Apocalipsis. 3:18c. Unge tus ojos con
colirio, significa sabiduría en la palabra; la ceguera representa la falta de entendimiento y de conocimiento de
la verdad de Dios; sin el Espíritu Santo no podemos ver más allá del
intelecto humano por tener una mente entenebrecida en el pecado y nublada por
la corrupción que te impide conectarte con el cielo de Dios, Porque nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el
Hijo se lo quiera revelar, Mateo 11:27;
Jesucristo es el puente, el camino y la
conexión con el Padre. No hay otro nombre
bajo el cielo en que podamos ser salvos, Hechos 4:12. Las personas ciegas espiritualmente,
solo ven lo físico, no conocen el mundo espiritual que es más real y fuerte que
el físico.
Las personas
sin Cristo creen que el mundo y el éxito es la meta y fin último, están atesorando lo temporal y lo que perece, Mateo
6:19-21; son guías ciegos de otros ciegos, ambos caerán en el hoyo,
Mateos 15:14. Ten
cuidado quien guía tu vida, solo Cristo es el Camino, la Verdad y la Vida, y
fuera de Jesús, nadie. Cuando somos hijos de Dios, el Señor nos reprende y castiga
para corregirnos, Proverbios 3:11-12 y Hebreos
12: 5-8. Si te crees
cristiano pero sigues viviendo como los del mundo, en adulterio, fornicación,
mentiras, máscaras de doble vida, cosas que ocultas, y andas tranquilo como si
nada pasara, lo único que indica es que NO ERES CRISTIANO,
Dios hace entender
el camino en que debemos andar si somos sus hijos, Salmos 32.Si vas a la
iglesia y no te ha pasado nada, es porque no eres HIJO DE DIOS, porque si lo
fueras, Dios ya te hubiera castigado, reprendido y disciplinado, así como un
padre no castiga a otro que no es su hijo; si no has sido reprendido es que no
eres hijo de Dios, andas suelto y solo lo verás el día del juicio, pero si eres
su hijo, Él te hará entender de alguna manera.
En Apocalipsis 3:20; que tanto se predica
para los de afuera, en realidad lo está diciendo para los que están dentro de
la iglesia y no han cambiado de vida, Dios en su amor, toca la puerta del
corazón, llamándote al arrepentimiento y la salvación, Te congregas, pero NO eres
cristiano, porque a Jesús lo tienes afuera, has estado yendo a un templo, has
oído la palabra pero no has recibido a Cristo como Señor y Salvador; tienes religión
y vas a la iglesia para acallar tu conciencia. Jesús quiere
entrar en tu corazón para salvarte, que tu carne religiosa no te siga
engañando. El mundo no oye a Dios, porque no es de Cristo.1 Juan 4:4.
Pero si eres oveja de Jesús oyes su voz, Juan
10:27; Cristo quiere tener una unión en común contigo, 1 Corintios 1:9,
Finalmente la
palabra dice: el que venza, se sentará en su trono; lo que nos ayuda a vencer en
la vida es nuestra confianza en Dios, esa confianza la tenemos cuando
practicamos su palabra, para guardarnos en el nivel de salvación, No le cierres
la puerta de tu vida a Jesús porque quizá podría ser tu último día o tu última
noche. Reconoce la necesidad de esa salvación tan grande, maravillosa y gratuita
que le costó a Jesús su sangre. Necesitas caminar con Él todo el tiempo para
que vivas en paz y con la seguridad de qué camino andar, y para qué vivir, y para
quien trabajar. Amén
La pregunta:
¿Vas a seguir yendo a una iglesia local por acallar su conciencia o realmente
quieres tener una relación personal con Cristo y ser salvo?
Dios desecha a los que aparentan ser sus hijos y no lo son
Todos
nosotros vivíamos en otro tiempo, siguiendo nuestros malos deseos, haciendo la
voluntad de nuestra naturaleza pecadora y de nuestros pensamientos. Y éramos
por naturaleza hijos de ira lo mismo que los demás; merecíamos el terrible
castigo de Dios igual que los demás, Efesios 2:3.
Me serán, pues, santos, porque YO el SEÑOR, SOY santo y los he apartado de los pueblos para que sean míos, Levítico 29:26.
Hasta
que todos lleguemos a estar unidos por la fe y el conocimiento del Hijo de
Dios, y alcancemos la condición y madurez de un ser humano, a la medida de la
estatura de la plenitud de Cristo, Efesios 4:13.
Definitivamente el amor y la paciencia del Padre Eterno son increíbles y
maravillosos, Él insiste en hablarnos para que reflexionemos, recapacitemos, nos
examinemos y veamos sinceramente qué necesitamos transformar en nuestra vida,
porque si el SEÑOR Jesús es el Hijo de Dios, nosotros también somos sus hijos,
y como tal debemos vivir, comportarnos y actuar cono Cristo y su Evangelio nos
lo ordenan, porque aún siguen sus reconciliadores brazos abiertos
diciendo: Vengan, vamos a discutir este asunto. Aunque sus pecados sean negros
como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueran rojos como el
carmesí, vendrán a ser como blanca lana, Si aceptan ser obedientes comerán de
lo mejor que produce la tierra, Isaías 1:18-19.
Ahora bien, aclaremos el punto de ser hijos de Dios, la primera vez que
se menciona hijos de Dios en la Biblia, es en Génesis, identificando a seres
celestiales, en este caso, ángeles caídos, que al ver las mujeres en la tierra,
las codiciaron, se llegaron a ellas, las prostituyeron y dieron lugar a la
depravación sobre la tierra, dando origen a gente rebelde; estos seres que
fueron creados por Dios tomaron cuerpo humano en forma de gigantes Nefilim, que
alteraron la genética humana, por lo cual, hasta el día de hoy, los arqueólogos
encuentran restos de seres descomunales con seis dedos en cada mano y en cada
pie. Cuando los hombres comenzaron a poblar la tierra,
tuvieron, y viendo los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran
hermosas, tomaron mujeres escogiendo entre todas, y se casaron con las que
quisieron. Génesis 6:1-2.
La segunda vez que se menciona en la Biblia hijos de Dios es en Job, padre
de los asiáticos, con estos seres que se presentaron delante de Dios en el cielo,
acompañados de satanás; así que, en estos dos casos, el término hijos de Dios,
se usa para referirse a seres creados, es decir criaturas, ángeles que sirvieron a Dios, pero que, con su rebelión, se transformaron en demonios hijos de su padre el diablo. Un día vinieron a presentarse delante
de YHVH los hijos de Dios, entre los cuales vino también satanás. Y dijo YHVH a
satanás ¿de dónde vienes? Respondiendo satanás a YHVH, dijo: recorriendo la
tierra de un lado al otro. Job 1:6-7.
En el tercer caso, el sentido de hijos de Dios es aplicado a los seres
humanos, primero al referirse a la nación de Israel con sus doce tribus, que fueron dados
a Abraham en cumplimiento de la promesa al amigo de Dios; Dios los llama
hijos al hablarle a Moisés cuando le ordena ir a faraón para que deje salir a Israel de Egipto, Éxodo 7:1-23, Dioslos está adoptando como hijos propios en el AT, y el profeta Isaías tiempo después, llama a
Dios Padre Eterno al referirse al Mesías en Isaías 9:6; es Dios mismo que llama hijos a la nación de Israel fundada por Él, y confirma que ellos lo llamarían Padre, …Me llamarán Padre
mío y no se apartarán de Mí, Jeremías 3:19, la cuarta vez que se aplica el
término hijos de Dios es en el NT, involucrando ya la salvación para todos aquellos que creen lo que dice la Biblia y reconocen a Jesucristo como único Salvador. No son los hijos de la carne los que son hijos de Dios, sino que los
hijos de la promesa, son considerados descendientes. Romanos 9:8. Y a quienes
reciben al Hijo y creen en Él, el Padre les concede el privilegio de ser hechos
hijos de Dios. Juan 1:12.
Entonces,el término hijos de Dios se aplica tanto
a seres celestiales por creación, como al pueblo hebreo por nacionalidad y adopción, y a
nosotros los cristianos nacidos de nuevo, por conversion, redención, adopción y convicción en Jesucristo, tal como Él
mismo lo dice en su encuentro con Nicodemo en Juan 3, es en el
encuentro del rabino celestial con un rabino terrenal donde Jesús mismo nos dice cómo ser verdaderos hijos de Dios; el SEÑOR Jesús le dice
a Nicodemo que le es necesario nacer de nuevo del agua y del Espiritu, para entrar al reino de Dios, pues a su reino entran solo los hijos. El que cree en Jesucristo, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios. Juan 3:18.
Necesitamos ser redimidos en Cristo para ser hijos de Dios y ser parte de su familia, al creer en el Hijo, y recibirlo en el corazón por fe, como único y suficiente
SEÑOR y Salvador; con esta aclaración entendemos que no todos los seres humanos
son hijos de Dios, como algunos lo aseguran.Aquí vale recordar que la Biblia enseña en Efesios 2:12-22, que de esos dos pueblos: hebreos y cristianos, Dios hizo un solo pueblo, una nación santa de reyes y sacerdotes, que es la Iglesia, el cuerpo de Cristo, que le pertenece a Él, que son sus embajadores, y que Él llama la esposa del Cordero, por la cual vendrá un día, estos son los hijos reales de Dios reunidos en UNO. El Espíritu Santo da
testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios…Romanos 8:16. Y que Cristo no solo moriría por esta nación, sino que también moriría para congregar y unir a todos los hijos de Dios dispersos por el mundo. Juan 11:52.
El reino de Dios no es lugar donde toda clase de gente entra, al cielo
solo entran los nacidos de nuevo, los auténticos hijos de Dios, y nuestro
registro de nuevo nacimiento es el libro de la vida, el que esté registrado
allí y sea sellado con el Espíritu Santo como propiedad de Dios, ese es hijo de
Dios, Él es nuestro Padre celestial y Jesús nuestro Hermano Mayor en la gran familia de Dios. Y porque somos hijos de Dios, el Padre ha enviado el Espíritu de su Hijo
a nuestros corazones, por lo cual clamamos: ¡Abba! ¡Padre! Gálatas 4:6.
Nuestro misericordioso y amoroso Dios repite y aclara su palabra una y
otra vez, porque sorprendentemente gran mayoría de los hijos de su pueblo, la
iglesia, sigue ausente de Él, dividida, escarneciéndose unos a otros, sembrando
cizaña, saltando de un lugar a otro como cabras unos, y como lobos otros, gente que no es hijo, peca y sirve de tropiezo, en
medio de las ovejas, porque no valoran el sacrificio de Cristo, ni el gran amor del
Padre, sino que lastiman su corazón y crucifican muchas veces al Hijo de Dios, Aquel que
murió por salvarnos. Porque caen de nuevo y no se les puede hacer
volver a Dios; ellos mismos están crucificando otra vez a Jesús, exponiéndolo a
la burla de todos. Hebreos 6:6. ¿No
creen ustedes que mucho mayor castigo merecen los que pisotean al Hijo de Dios y
desprecian su sangre, los que insultan al Espíritu Santo de Dios que los ama?
Esa sangre que confirma la alianza, y con ella han sido lavados, Hebreos 10:19.
¿Por qué insisten en su pecado? ¡No se entiende esto!
El ardiente anhelo de Dios es que sus hijos reflejen verdaderamente la
imagen, semejanza y carácter del Hijo, lo cual se logra andando en el Espíritu
para santidad, discerniendo los tiempos y los movimientos del mundo; se
requiere del pueblo de Dios, que se manifieste con corazón sincero y
limpio en amor al Padre, trabajando, luchando y esforzándonos unidos por
alcanzar mayor número de almas para el reino. Nuestra integridad es delante de
toda circunstancia, porque no podemos seguir viviendo en la vieja naturaleza
que nos esclavizó por mucho tiempo y nos llenó de dolor, ira y resentimiento
contra nuestros semejantes, peor aún, contra nuestros propios hermanos; y hoy los
creyentes, se causan daño a sí mismos, robándose las bendiciones como si no fueran hijos ni hermanos, y si no cambian,
podrían perderse finalmente, Si crees estar firme, ten cuidado de no resbalar y caer, 1 Corintios 10:12.
Todo verdadero hijo de Dios debe entender que el Arquitecto perfecto, el
Alfarero divino mueve y permite constantes y variadas circunstancias para pulir
y santificar nuestro carácter, todo lo que sucede día a día son oportunidades
que Dios usa para educarnos, romper moldes, derribar estructuras, cambiar modos
de pensar, acabar con la competencia y el egoísmo, mostrados en esas malas
maneras de expresarnos y tratarnos unos a otros. Tengan cuidado, porque si ustedes se
muerden y se comen unos a otros, llegarán a destruirse entre ustedes mismos. Gálatas 5:15.
El buen y verdadero hijo de Dios, se caracteriza por amar a Dios por
encima de todo, postrado en su presencia y adorando, Deuteronomio 6:5, actúa buscando primero la sabiduría de lo alto,
por eso se esfuerza en llenar mente y corazón con la palabra y orando en búsqueda
de la dirección divina; caminando en el Espíritu para llenarme de Él, evidenciando el
fruto para impedir que la vieja naturaleza no lo domine, ama a su prójimo por eso
maneja sus relaciones personales con amor, integridad y justicia; sabe perdonar y pedir
perdón, basado en la paciencia de Dios con él mismo, posee fuerza interior para
vencer sus propias emociones y pasiones porque conoce su libertad en Cristo y
siempre es ejemplo de fe obediente, por lo tanto, no dilata hacer la voluntad del Padre. Antes bien, amen a sus enemigos, y hagan el bien a
todos, presten sin esperar nada a cambio, y su recompensa será grande, serán
llamados hijos del Altísimo, porque Él es bondadoso aún con los ingratos y
perversos. Lucas 6:35.
El corazón del Padre se duele y Jesús se entristece al ver la actitud de
un pueblo rebelde, desobediente, perezoso, necio y lleno de críticas
maliciosas, gente que persiste en su maldad, y que deberían recibir castigo,
sin embargo del corazón amoroso del Padre brota oportunidad de salvación y
perdón llamando al arrepentimiento y al cambio de actitud en aquellos que dicen
ser sus hijos, y por los cuales no escatimó a su Hijo, sino que lo entregó para
redimirlos con su sangre. ¡Qué gran responsabilidad tenemos con Dios!Somos nosotros los hijos de Dios los
que damos a conocer a Cristo a todos a nuestro alrededor...Colosenses 1:28.
Vivir como hijos de Dios implica atesorar nuestro lugar en el reino,
aprovechando la gracia para honrar a Dios y bendecir a la gente, estar conscientes
de los beneficios que tenemos del Padre a través del Hijo, representándolo
bien en todo tiempo y circunstancia sin avergonzarnos de nuestra fe o si alguien se burla de nosotros, pero muchos que dicen ser hijos de Dios esconden ante el mundo su fe en Jesús; sin
embargo, debemos reconocer que es mejor obedecer,
servir y permanecer hasta el final, como hijos genuinos que se identifican con los hermanos en la familia de Dios, contribuyendo con el testimonio para
la expansión del reino. El vencedor heredará estas cosas, YO
seré su Dios y él será mi hijo, Apocalipsis 21:7.
Cada cristiano que se considera verdadero hijo de Dios, elige ser responsable antes que
perezoso, no se queja, ni se lamenta, ora y da gracias a Dios por
todo, porque nuestro testimonio y forma de vida afecta no solo nuestra propia existencia,
sino la vida de la familia, la iglesia y la sociedad en general; somos cada uno
en particular llamados y responsabilizados para ser ejemplo digno de imitar por
otros, en amor por lo que Dios es e hizo por ti y por mí, y un día tendremos
que presentarlos a rendir cuentas de nuestra labor; tenemos que madurar como hijos porque no
podemos conformarnos con menos, Y en esto se reconocen los hijos de
Dios y los hijos del diablo: todo aquel que no practica la justicia, no es de
Dios; tampoco aquel que no ama a su hermano. 1 Juan 3:10.
Si hemos renacido en Cristo la dimensión de nuestra vida es espiritual,
no carnal, ni terrenal, hemos renacido en un momento, pero a la vez vamos
madurando paso a paso en la regeneración de nuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sometidos a Dios en obediencia a su palabra, rendimos
y conscientes que debemos disponernos para representar bien a Jesús, esto nos debe hacer verdaderos hijos de Dios, gente que conquista su propia vida y depone su voluntad personal en amor y amistad con Cristo, por ministración de su Espíritu. El amor de Dios en un cristiano maduro es el camino más excelente y la muestra de ser nueva criatura que da fruto. 1 Corintios 13.
El amor de Dios en sus hijos es
superioridad espiritual que debe hacer la diferencia entre nosotros y los de afuera. Esto, pues, es lo que les digo y les
encargo en el nombre del SEÑOR, que ya no vivan más como los paganos, los
cuales viven de acuerdo con sus equivocados criterios, y tienen oscurecido el
entendimiento. Ellos no gozan de la vida que viene de Dios, porque son
ignorantes a causa de su insensible corazón. Se han endurecido y se han
entregado a los vicios, cometiendo sin freno toda clase de cosas impuras. Efesios
4:17-19,
La presencia de Dios por el Espíritu, debe ser evidente en cada hijo de
Dios, porque somos su templo y altar, Él ha ido limpiando nuestro ser interior y expulsado todo lo que no es de Dios ni le agrada a Él; no podemos decir que
somos hijos de Dios y discípulos de Cristo si seguimos con una vida de pecado y mintiendo, si seguimos criticando,
si seguimos sembrando división, en vez de ser instrumentos de bendición y de
honra entonces no somos hijos, porque muchos que se dicen ser hijos de Dios, son instrumentos del diablo, que en vez de bendecir,
maldicen, en vez de dar amor siembran veneno; en vez de ser humildes son
arrogantes, en vez de ser generosos son egoístas y envidiosos. Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios. 1 Juan 3:9.
Tarde o temprano la maldad del pecador lo alcabzará, tarde o temprano la ira de Dios se dejará ver en
sus vidas, por favor, les suplico con el corazón, se los digo con lágrimas
escribiendo ahora, no más, no sigan jugando al cristiano, o somos o no somos, o
sirves a Cristo o sirves al diablo, o te salvas o te condenas. ¡Basta de tanta liviandad
y vida licenciosa! Recuerda el inicio de esta enseñanza y mira bien si eres hijo de
Dios por creación, una criatura de apariencia, o eres hijo por conversión, adopción y convicción, porque...Si por el Espíritu hacemos morir las obras de la carne, viviremos. Porque
todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, ellos son hijos de Dios…porque
hemos recibido el Espíritu de adopción como hijos, por el cual clamamos, ¡Abba
Padre! Romanos 8:12-25.
Ustedes se levantan contra mis designios, sin darse cuenta que están
peleando contra Mí, se rebelan y señalan perversamente a quienes yo levanto,
ustedes están rebelándose contra Mí, y si persisten en su malvado corazón y no se
arrepienten, llegarán mis juicios, y ellos empezan por mi casa, nos sean como
aquellos que se rebelaron en la antigüedad, y perecieron,Porque si esto es cosa de Dios, no
podrán ustedes vencerlos. Tengan cuidado, no se vayan a encontrar luchando
contra Dios…Hechos 5:39.
Números 16es un ejemplo y una advertencia para
los que siguen dando mal testimonio diciendo que son hijos de Dios y no lo son,
aparentan, pero no lo son. lee cuidadosamente Números 16. Por cuanto llamé y no quisieron oír, extendí mi mano y no hubo quien
entendiera, sino que desecharon todo consejo mío y mi reprensión no aceptaron.
También YO me reiré de su calamidad, y me burlaré cuando les venga lo que
temen; cuando venga la destrucción que temen, y su calamidad les llegue como un
torbellino; cuando sobre ustedes venga tribulación y angustia. Entonces me
llamarán y no responderé; me buscarán de mañana y no me hallarán. Porque
aborrecieron Mi sabiduría, y no escogieron el temor de YHVH. No quisieron mi
consejo, y menospreciaron toda reprensión mía, comerán del fruto de su camino,
y serán hastiados de sus propios consejos. Porque el desvío de los ignorantes
los matará, y la prosperidad de los necios los echará a perder. Proverbios
1:24-32.
La gran realidad es que muchos ignoran, que
nadie podrá ser salvo haciendo lo contrario a la palabra de Dios. No existe un
sitio medio después de la muerte, así que ni misas, ni oraciones, ni ninguna otra
cosa sacará de su lugar a los muertos. La única manera de ser salvos es a
través de Jesucristo, y se logra mientras vivimos para creer y recibir al SEÑOR y
Salvador Jesucristo, es con Él que vamos al Padre, pero sin Él miles irán al
infierno porque siguen haciendo los que les da la regalada gana, se gozan
haciendo su propia voluntad dejando a Dios de lado, viven en vanidades
ilusorias y temporales, dándole gusto a su cuerpo y apostatando de la fe y dicen que son hijos de Dios; así
que, si no has tenido un encuentro personal con Jesucristo, lamentablemente te
condenarás. Hasta que todos lleguemos a estar unidos por la fe y el conocimiento del Hijo de Dios, y alcancemos la condición y madurez de un ser humano, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo, Efesios 4:13.
Arrepiéntete, abandona tu pecado y vuélvete a Dios, entrégale tu
vida a Cristo y vive para obedecer su palabra llena de principios y virtudes que nos
hacen merecedores de ser hijos para su reino…Los hijos de Dios no pueden morir ya, pues serán como los ángeles,
y serán hijos de Dios por haber resucitado. Lucas 20:36.
Mg.
MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino