Olviden las cosas de antaño; ya no vivan en el pasado. ¡YO voy a hacer algo nuevo! Ya está sucediendo, ¿No se dan cuenta? Les estoy abriendo un camino en el desierto, y ríos en lugares desolados. Isaías 43:18-19. Piensen en todo lo verdadero, en todo lo que es digno de respeto, en todo lo recto, en todo lo puro, en todo lo agradable, en todo lo que tiene buena fama. Piensen en toda clase de virtudes, en todo lo que merece elogio. Filipenses 4:8.
El prudente ve el peligro y lo evita; el imprudente sigue adelante y sufre el castigo. Proverbios 27:12. Por lo tanto, cuiden mucho su comportamiento. No vivan neciamente, sino con sabiduría. Aprovechen bien este momento decisivo, porque los días son malos. Efesios 5:15-16.
Si esta nación contra la cual he hablado, se vuelve de su maldad, me arrepentiré del mal que pensaba hacer sobre ella. Jeremías 18:8, 26:3 y 13. Piensen en las cosas del cielo, no en las de la tierra. Colosenses 3:3.
Dios, el curso de la historia y el movimiento de la nación nos introducen a grandes cambios donde no podemos quedarnos mirando con los brazos cruzados como simples espectadores y crítios; el Padre celestial permite circunstancias y eventos en la vida y que la tierra se mueva produciendo grandes transformaciones del relieve, con el propósito de que su pueblo no duerma ni se quede en la luna; tenemos que salir de la inercia, la rutina y la monotonía, no solo física, sino emocional y espiritualmente para que tanto personal como comunitariamente, su pueblo se active y se organice para enfrentar los tiempos que vendrán, pues en el SEÑOR y con Él no podemos ser sorprendidos por el mal. Porque, si alguno está en Cristo, es una nueva persona.! Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo. 2 Corintios 5:17; entonces, Nadie te podrá hacer frente en TODOS los días de tu vida...esfuérzate y se valiente...Josué 1:5.
Nuestra renovación integral es todo el tiempo mientras vivamos; renovar en hebreo es lejadesh, traducida como innovar, modernizar y rehacer algo gastado a lo nuevo jadash, es decir, dejar algo que estimamos obsoleto, imperfecto, viejo y caduco para recuperarlo al estado de su diseño original, restaurándolo con su vida útil para encaminárlo al correcto proceso de crecimiento y servicio conque fue creado pero que se vió interrumpió por alguna razón; en esa restauración se reemplaza y se quita lo que se dañó, restaurando y hermoseando lo que está mal y lo afea; también es shabar, quebrantar, es decir, romper y desbaratar algo que ya dió su uso, para volverlo a hacer diferente y hermoso, por dentro y por fuera como la vasija en las manos del Alfarero, Jeremías 18:1-17; es exactamente lo que nuestro Salvador hace cuando nacemos de nuevo, nos arrepentimos y lloramos con dolor por haber sido pecadores, Él rompe lo viejo, no solo porque lo aceptamos en el corazón con una confesión verbal, sino que nos hace nuevas criaturas desde adentro y con un nuevo sentir y pensar para servir como sus discípulos y seguidores visibles. Solo Dios nos hermosea y renueva espiritualmente desde el corazón, para que ese cambio se evidencie afuera en nuestro comportamiento y estilo de vida. No se amolden a este mundo, transfórmense cambiando su manera de pensar; renueven su entendimiento para que comprueben, que la voluntad de Dios es buena, agradable y perfecta. Romanos 12:2.
Dios ordena a su pueblo en Colombia, que sea diferente al mundo, que se ajusten a la visión moral y espiritual del pensamiento de Dios, establecido en su palabra y siendo avivados por el Espíritu Santo conque somos sellados en el nuevo nacimiento, porque solo así se producirá un efecto transformador en nuestra vida y nuestra familia impactando la nación, con el propósito de que el enemigo no nos intimide, no nos acobarde, ni nos toque, ni nos sorprenda; necesitamos renovación espiritual e integral genuina en la unidad del Espíritu Santo porque solos no podemos, el Espíritu del SEÑOR es nuestro Ayudador; esto no es algún don nuevo que se nos otorga, es un despertar, activación y avivamiento espiritual en el poder de Jesucristo con el correcto desarrollo de la vida cristiana. Porque cuando se manifestó la bondad del Padre en nuestro salvador, con su amor para con los hombres, nos salvó no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración, y por la renovación del Espíritu Santo. Tito 3:4-5.
Necesitamos ser renovados de manera total por la acción e intervención del Espíritu Santo que mora en los nacidos de nuevo, es a Él que debemos rendirnos y entregarle todas las áreas de nuestra vida para permitirle gobernar nuestros cinco sentidos espirituales y que reine Jesucristo; la renovación es un trabajo continuo de Dios con la disposición de nuestro corazón, espíritu, alma y cuerpo, pero que se ve interrumpido a causa del pecado, la rebeldía, la desobediencia y las iniquidades que violan los mandatos que Dios ha establecido para ordenar y orientar nuestro horizonte, enderezar nuestros pasos y direccionar nuestras decisiones para que nuestros pies no resbalen, y si fallamos, hacemos un alto en el camino y rectificamos. No debemos desmayar, aunque nuestro hombre exterior se vaya desgastando, nuestro hombre interior debe renovarse día tras día. 2 Corintios 4:16.
Renovarnos es una respuesta bien dispuesta que los cristianos tenemos que darle al Padre celestial mediante la reflexión y auto evaluación continua, Salmos 26, 51 y 139, donde el Esprítu de Dios trae arrepentimiento, con el fin de abandonar definitivamente la vida vieja de pecado y emprender un nuevo comienzo de verdadera vida a la manera de Dios y de la mano de Jesucristo, con oídos atentos a la voz del Espíritu que nos ayuda a recordar las cosas de Dios, evitándonos actuar solos y que NO nos equivoquemos tanto. El Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, Él les enseñará todas las cosas, y les recordará todo lo que YO les he dicho. Juan 14:26.
Las Escrituras nos aseguran que como hijos de Dios, no estamos desamparados, si es que en verdad hemos nacido de nuevo y somos seguidores de Jesucristo; nuestra tarea y disciplina diaria es venir continuamente a la presencia de Dios para buscar su rostro y ser llenos de su gracia y sabiduría para saber vivir en este mundo oscuro y lleno de maldad; el amor de Dios a través del Espíritu es nuestra fuente de renovación. Eso se logra perseverando en oración, en ayunos continuos bajo la dirección de Dios, escudriñando la palabra, creyendo y obedeciendo lo que ella dice. Es así que nuestro ser integral se va refaccionando y regenerando para no vivir en la carne sino en la santidad del Espíritu. Por lo tanto, para que sean borrados sus pecados, deben arrepentirse y volverse a Dios, así vendrán de su presencia, tiempos de descanso. Hechos 3:19.
Si este proceso espiritual es juicioso y consciente, será lo que haga que nuestro Creador y Salvador pelee nuestras batallas, nos de fuerzas y se ponga a favor de esta bendita tierra colombiana. Es el pueblo de Dios el encargado de provocar el cambio, con aquellos que se disponen porque de corazón desean la bendición transformadora del país y trabajan por llevarla a la realidad espiritual que impacte lo social y geopolítico que esta sumamente deteriorado y sigue hasta hoy con la corrupción de antaño que debe fenecer del todo; necesitamos mejorar la condición del país desde cada uno de nosotros siendo aceptos ante los ojos del SEÑOR y que la nación sea liberada por la acción del Eterno, con la colaboración de su pueblo santo. Y vio el SEÑOR sus acciones, que se habían apartado de su mal camino; entonces se arrepintió del mal que había dicho que les haría, y no envió sus juicios. Jonás 3:10.
Conversión y renovación van de la mano, porque si no hay conversión no hay cambio y para experimentarlo debe morir el viejo hombre y quedar sepultado en el bautismo. No nos deben importar las corrientes políticas ni las ideologías humanas, si estamos enfocados y activos en Dios, todo eso quedará relegado a un último plano, si nos consagramos a Él, Dios mismo se encargará de poner en orden el país poniendo el querer como el hacer entre las gentes, para elegir inteligentemente y que lleguen al poder gobernantes conforme al corazón y la voluntad del Padre, y como personas de fe que confian en Dios, sabemos que el Creador sigue al mando, solo Él muda los tiempos, quita y pone gobernantes en las naciones, Dios es soberano Rey de sabiduría y ciencia para con los entendidos en trabajar llevando las Buenas Nuevas y que ruegan en oración por los necios y tontos, Dios se glorificará y habrá un futuro glorioso. Habrá allí calzada y Camino, y será llamado camino de santidad; no pasará el inmundo por este camino, sino que el mismo SEÑOR estará con nosotros; el que anduviere en ese Camino, por torpe que sea, NO se extraviará. Isaías 35:8.
Estudiemos algunos aspectos importantes para renovarnos espiritualmente:
1. Buscar a Dios, su reino y su justicia. Busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todo lo demás les será añadido. Marcos 6:33. La condición actual de nuestra nación es muy parecida a la situación del Israel del AT. Y hoy, a pesar de todas las bendiciones y misericordias del SEÑOR, muchos de su pueblo le han dado la espalda. Pero gracias a Dios que siempre hay santos fieles, sensibles y de corazón dispuesto para volverse al SEÑOR y tomar en serio su lugar en el trabajo que les corresponde entre el pueblo, para atraer el favor divino a la nación. Somos más de diez justos, podemos evitar la catástrofe. Génesis 18:16-23.
Ezequías fue un rey justo en Judá, gobernó en tiempos de Isaías, hizo grandes reformas espirituales que afectaron positivamente al pueblo de Dios: suprimió la idolatría, restauró el servicio en el templo y el SEÑOR prosperó su gobierno y fue el primero en construir un acueducto, pero le falló a Dios al haber hecho alianzas con los asirios, por lo cual recibió sentencia de muerte de Dios a través del profeta, pero se arrepentió y lloró ante el SEÑOR, y Él lo perdonó y le dio quince años más de vida. Ezequías hizo mucho bien a Judá; ejecutó lo bueno, recto y verdadero delante de YHWH su Dios. En todo cuanto emprendió en el servicio de la casa del SEÑOR, estuvo de acuerdo con la ley y los mandamientos, buscó a Dios, de todo corazón, y fue prosperado. 2 Crónicas 31:21. Debemos pedir por gobernantes así.
2. Arrepentirse y volver a Dios. Produzcan frutos que demuestren su verdadero arrepentimiento. Mateo 3:8. Si fallamos a Dios, debemos correr cuando el Espíritu redarguye, asi el arrepentimiento es una oportunidad renovadora dada por Dios para liberarnos de nuestros pecados y culpas, con el beneficio de recibir su perdón salvador; el estilo de vida viejo nos sabotea y nos roba, pero el arrepentimiento hace que nuestras bendiciones se recuperen en todas las áreas y salgamos del estancamiento y crezcamos espiritualmente; con arrepentimiento para tener un nuevo comienzo, nos levantamos, progresamos y seguimos adelante en el plan de Dios. Lo bonito del arrepentimiento es que nos pone tristes según Dios para vida si tomamos la seria decisión de cambiar rechazando y echando fuera el pecado y la vana manera de vivir, 2 Corintios 7:2-10.
El arrepentimiento es producido por el SEÑOR cuando Él desea salvar, cambiar y bendecir a la gente, lo cual nos trae muchos beneficios porque: a) Nos acerca a nuestro Padre celestial en la persona de Jesucristo mediante el poder del Espíritu. Zacarías 1:3; b) Son lavados nuestros pecados en la sangre del Cordero de Dios, Hechos 3:19; c) Somos purificados y justificados, 1 Juan 1:9; d) comenzamos a prosperar y todo nos sale bien, Proverbios 28:13; e) Pasamos a ser herederos del reino de Dios, Marcos 1:15; f) comeremos las cosas buenas que produce la tierra, Isaías 1:19-20; g) recibiremos la vida eterna, Juan 10:27-28.
3. Enfrentar y vencer la carnalidad para retomar la vida en el Espíritu. Sean sobrios, y velen, porque su adversario el diablo, ruge continuamente como un león alrededor de ustedes, buscando a quien devorar; a él es a quien deben resistir firmes en la fe, 1 Pedro 5:8-9. Al nacer de nuevo debe ser notoria y evidente nuestra nueva forma de vivir porque nos hemos sometido al trato y los procedimientos de Dios, soportados y sostenidos en su gracia, por decisión nuestra y gobierno del Espíritu, hacemos morir nuestras pasiones, instintos e impulsos del cuerpo, anhelando continuamente la nueva vida en Cristo. Romanos 8.
Nuestra nueva vida de fe es un compromiso 24/7 que responde al amor perdonador y la misericordia de Dios que nos mantiene vivos y con salud, entonces reconocemos que necesitamos y somos agradecidos con Él perpetuamente, pues somos humanos muy vulnerables; la renovación empieza por nuestra mente, cambiando los pensamientos y los recuerdos, pero alineándonos a la mente de Jesucristo. La renovación es un cambio total del ser humano, es regeneración, algo que no podemos experimentar por si mismos, solo se logra con la ayuda del Espíritu Santo y la palabra, que nos proveen las herramientas y armas necesarias para el completo y genuino cambio. Cristo ya padeció por nosotros en la carne de su cuerpo, nosotros también debemos armarnos del mismo pensamiento; pues quien ha padecido en la carne, terminó con el pecado, para que no vivamos el tiempo que resta en la carne, ni en las concupiscencias de los hombres, sino conforme a la voluntad de Dios. 1 Pedro 4:1-2.
4. Restaurar la importancia de la palabra. Toda la Escritura es inspirada por Dios, es útil para enseñar, para convencer de pecado, para corregir, para instruir en justicia, con el propósito que los hijos de Dios sean perfectos, enteramente preparados para toda buena obra. 2 Timoteo 3:16-17. Debemos aplicar una acción crucial de cambio en nuestra vida, escudriñando, conociendo y viviendo la biblia, para pasar de lo carnal a lo espiritual, y para ello se requiere leer y retener diariamente la palabra de Dios, ella es nuestra brújula en el desierto de este mundo, Salmos 119:105.
Retener versículos y recordar historias bíblicas nos permiten llenar el corazón de vida saludable, hablar y decidir sabiamente poniendo limites al viejo hombre, así el mundo, las tinieblas y el pecado no podrán vencernos fácilmente. Para eso debemos disponernos y poner tida nuestra voluntad y decisión para vencer los malos deseos y bajos instintos. ¿Cómo pueden los jóvenes guardar puro su camino? Practicando la palabra de Dios. Salmos 119:9.
La palabra de Dios nos ayuda a estar totalmente rendidos al SEÑOR, amarlo profundamente y tener un deseo continua de agradar al Padre haciendo su voluntad, matando la carne, llenado la mente con textos bíblicos y purificando las intenciones del corazón para vivir en el propósito de Dios, mirando a Cristo y siguiendo sus pisadas. La palabra de Dios es importante en sí misma y ella debe tener en nosotros la preeminencia que se merece, para que produzca el impacto para el cual Dios la estableció, porque la Biblia es la misma voz de Dios y tenemos que conocer las cosas que están en ella, lo cual nos instruye para vivir y servir a Dios. Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, más cortante que toda espada de doble filo; porque penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, discerniendo los pensamientos y las intenciones del corazón. Hebreos 4:12.
5. SER verdaderos adoradores. Ezequías hizo que toda la multitud adorara a Dios, los salmistas cantaban y los trompeteros tocaban…todo eso duró hasta consumirse los sacrificios, 2 Crónicas 29:28. La adoración es poderosa, al adorar y alabar al Eterno, cambia nuestro corazón, aleja nuestra mente del mundo, nos introduce en la gloria, nos une a los coros celestiales, y nos produce creatividad para ofrendar cántico nuevo porque en adorar a Dios hay una entrega total y ministramos directamente al corazón del SEÑOR, dándole la preeminencia, el honor y el lugar que le corresponde en nuestra ser.
Cuando adoramos damos testimonio de nuestro amor y agradecimiento a Dios, porque adoración es señal de humildad y mansedumbre, Dios nos quebrante, nos revela y nos transforma porque experimentamos su ternura y el poderío de su grandeza, entonces Él derrama aguaceros de bendición sobre nuestra vida; al mismo tiempo que adoramos, Dios pelea con sus ejércitos celestiales a nuestro favor, asi es que batallamos espiritualmente contra las hordas del mal porque rendimos culto al único digno, reconociendo su soberanía, alcanzamos el favor del Eterno, y se garantiza nuestra liberación y victoria. Entonces Josafat y todo el pueblo se postraron rostro a tierra, y delante del SEÑOR adoraron. Y se levantaron los levitas para alabar a YHWH, el Dios de Israel con fuerte y alta voz…Y cuando comenzaron a entonar cánticos de alabanza, el SEÑOR puso contra los enemigos las emboscadas de ellos mismos que traían contra Judá, y se mataron los unos a los otros…2 Crónicas 20:18-30, Amén.
Nosotros, el pueblo de Dios en Colombia y las naciones donde hay redimidos, debemos tener claro que no somos de este mundo, por lo tanto no podemos estancarnos, sino avanzar unidos para mantenernos como atalayas guerreros y soldados de Cristo con la visión de que haya a nuestro alrededor un nuevo ambiente pacífico a nuestro, especialmente en estos tiempos de violencia y delincuencia organizada que enfrenta el mundo. Dios nuestro Buen Padre es quien debe enrumbar el presente y el futuro de Colombia hacia mejores tiempos, porque con un pueblo santo y unido al Espíritu, será el Todopodroso quien pondrá nuestros próximos presidentes y gobernantes; y si nos mantenemos alineados a Él, serán buenos dirigentes y jefes de estado. Asi que, Despójense del viejo hombre que está corrompido según los deseos engañosos de la carne para que sean renovados en su mente por el Espíritu; y vistan del nuevo hombre que ha sido creado en justicia y santidad de la verdad, a la semejanza de Dios...Efesios 5:22-24. Y los que esperan en el SEÑOR, renovarán sus fuerzas; se remontarán a las alturas como las águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán. Isaías 40:30-31.
Oremos para que se rompa la división en la Iglesia y la polarización en la nación, que estemos unidos y cercanos a Dios, que toda alma viviente sea guiada por el Espíritu Santo para decidir y actuar sabiamente bajo la gracia bienhechora del Padre; y nuestro próximo presidente sea lleno de la gloria de Dios. Que venga el reino de Dios y caiga su temor sobre todo colombiano y extranjero, que la gloria de su presencia haga huir las tinieblas y todo mal que se haya fraguada o pactado contra el país se rompa, quede inoperante y nulo desde la raíz, que reinen la verdad, la justica, el orden, la libertad y la rectitud en el gobierno y la población. Tomemos tiempo para estar en la presencia de Dios adorando, clamando, orando e intercediendo guiados por el Espíritu Santo, con humildad y sencillez de corazón; nuestra vida santa y mansa debe ser visible para mover el corazón de Dios; El Señor cambiará cualquier situación adversa, porque la oración eficaz del justo puede mucho, Santiago 5:16.
Mg. MEHC hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino.
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