No tengas miedo, que YO estoy contigo; no te desanimes, que YO SOY tu Dios. YO SOY quien te da fuerzas y siempre te ayudaré; siempre te sostendré con mi mano derecha de justicia…Isaías 41:10-20.
El SEÑOR es mi luz y mi salvación; ¿a quién habré de temer? El SEÑOR es la fortaleza de mi vida, ¿a quién he de tenerle miedo? Salmos 27:1.
Donde hay amor no hay miedo, pues el amor perfecto echa fuera todo temor, y el miedo supone un castigo, así que el que tiene miedo no ha llegado a amar perfectamente. 1 Juan 4:18.
El mundo tiene miedo por los acontecimientos de odio, desorden, revolución, terrorismo, discriminación, maldad, injusticia, división y guerra que están desatados sobre la tierra, pero para un mundo asustado, debe existir una iglesia sin miedo, un pueblo santo, osado y arraigado a su fe en Dios como Daniel que no tuvo miedo demostrar su fe, aunque fue echado en el foso de los leones, él oró fervientemente y confío en su Dios y Él envió su ángel y guardó la vida del profeta. Daniel 6:19-28.
Los amigos de Daniel también fueron valientes, se mantuvieron firmes en sus convicciones y valores hebreos, y aunque fueron echados en un horno de fuego ardiente, adoraron y reverenciaron la soberania de Dios atesorando sus principios eternos; gente así necesita Dios para completar su obra, fieles que se muevan reverentemente en el poder del Espíritu Santo y la palabra dicha por Dios, porque si hemos creído en Jesucristo, lo respetamos, reverenciamos su nombre, lo amamos y atesoramos sus enseñanzas y no nos avergonzamos de ser llamados cristianos. Jesús lo dijo: No temas; cree solamente, y serás salvo. Lucas 8:50.
No tengas miedo, arrepientete, santifícate, busca a Dios y alábalo, una forma de agradecerle tanta fidelidad, conserva tu paz interior respetando a Dios, estando en su presencia con reverencia y actitud de adoración; prestale atención a Él porque siempre está presente, cree lo que Él dice en su palabra porque Dios todo el tiempo habla; si amamos y atesoramos a Dios con todo nuestro ser, derrotaremos el miedo, la duda, la incredulidad y el desorden del mundo. YHVH se complace en los que le temen, y en los que esperan en su misericordia. Salmos 147:11.
Si no hay miedo entre el pueblo de Dios, entonces nos comportándonos como valientes guerreros que admiran la grandeza y soberanía de su Comandante, Varón de guerra y Capitán de las huestes; ser valientes para Dios es vivir en fe obediente para contender por ella y luego actuar intrépidamente sobre la base del sometimiento a su majestad, sus ordenanzas e instrucciones. Oh SEÑOR, ¡que grande es tu bondad para aquellos que te temen! Y para los que te honran delante de los hombres. Salmos 31:19.
No ser miedosos está en guardar fidelmente nuestro compromiso de lealtad y confianza en Dios; no tener miedo es ser definidos, firmes y determinados para mantener nuestra identidad y pertenencia en el bendito Hijo de Dios, y con su Espíritu en nosotros ser sabios, prudentes, constantes, fuertes y aguerridos espirituales con discernimiento, para tener el poder de desechar las astucias del mundo y las artimañas del enemigo; la iglesia de hoy debe perder el miedo al mundo y a los hombres para recuperar el temor reverente a su Creador y salvador, por eso El principio de sabiduría es el temor a Dios. Proverbios 1:7.
En el versículo anterior, temor hace referencia al respeto reverente hacia Dios cuando lo amamos tal como lo ordena el Gran Mandamiento en Deuteronomio 6:5, algo que escasea no solo en el mundo, sino en la iglesia de Jesucristo; y deberíamos avergonzarnos por eso, porque si amamos a Dios, lo respetamos y adoramos con libertad; amor y reverencia, dos principios opuestos al miedo y la cobardía que pululan. El temor a Dios proporciona seguridad y confianza, el miedo por su parte, es una sensación de inseguridad, sosobra, susto y sobresalto ante el peligro, la amenaza o el riesgo, lo cual afecta la capacidad de auto control, según sea la persona, la situación y el contexto en que se experimenta el miedo, Porque el perfecto amor, echa fuera el temor. 1 Juan 4:18.
los miedos según el concepto humano son emociones adquiridas en la cultura, la crianza, los aprendizajes diarios y los condicionamientos del entorno, sin embargo, el miedo también podría ser una sensación buena si reaccionamos eficazmente ante el peligro para proteger la vida, fijando los ojos en el objeto desencadenante del miedo, para así esgrimir conductas defensivas. No tengas miedo a los peligros nocturnos, ni a las flechas (amenazas) que hay durante el día, ni a las plagas que llegan con la oscuridad, tampoco tengas miedo de los que destruyen a plena luz del sol. Pues mil caerán muertos a tu izquierda y diez mi a tu derecha, pero a ti no te tocarán. Salmos 91:5-7.
La raíz hebrea para miedo y temor es Yará, pero toma su correcto sentido según el contexto, ya que esta palabra unas veces significa susto, pero otras veces es temor en respeto reverente a Dios, por ejemplo, en Salmos 23, el salmista está experimentando un pavor visceral a causa de los enemigos, pero la presencia de Dios le ayuda a eliminar el miedo, Aunque camine en valles de sombras de muerte, no temeré mal alguno, porque Tú, estarás conmigo. Salmos 23:4; en este caso se describe una amenaza apremiante de muerte, pero hay seguridad por la fe de que Dios está cerca para proteger y guardar, lo cual produce confianza y valentía para vencer el miedo, y aun a los enemigos; en Génesis también se describe el miedo como el pavor que Dios pone en los animales frente a Noé, es la forma en que ellos se le someten y obedecen a la autoridad del hombre por voluntad divina. Génesis 9:2.
La razón de esta enseñanza la ha puesto Dios en mi corazón, debido al miedo generalizado que hay entre la gente por los acontecimientos de violencia, muerte y guerra en el cumplimiento profético sobre la tierra, porque la voluntad de Dios es que ninguno de su pueblo se quede paralizado en la oscuridad del miedo y la corriente del mundo; somos la iglesia sin miedo, que se levanta segura en la fe del Hijo de Dios y su palabra con valor y autoridad para dar ejemplo de valor y fe a un mundo asustado, pues no podemos ceder ante las artimañas del enemigos y sus lacayos que atemorizan e intimidan con miles de cosas adversas para robar la fe, y debilitar la esperanza, que constantemente deben ser fortalecidas para que no se afecte negativamente al cuerpo, incapacitándonos para hacer la voluntad de Dios, y alcanzar nuestro propósito; debemos vencer el miedo para salir a ganar almas y cumplir la gran comisión. Pues Dios no nos ha dado espíritu de cobardía, sino que nos ha dado poder, amor y dominio propio. 2 Timoteo 1:7.
El miedo más que una emoción o sensación es un espíritu inmundo angustiador que nos impide avanzar y nos roba la paz, entrando a las vidas por muchas cosas malas que sucedieron en el pasado, o cuando hemos abierto una puerta a la incredulidad y la duda, esos miedos intentan destruir nuestra identidad de hijos y la esencia humana como persona determinada y definida por Dios, dentro de lo absoluto de la familia y el orden para las naciones que se dividen y destruyen a causa del miedo, la ansiedad y la preocupación por lo que pasará mañana, reacciones propias del miedo mal sano y paralizante. Depositemos sobre el SEÑOR toda ansiedad, porque Él cuida de nosotros. 1 Pedro 5:7.
Si no vencemos el miedo, este llega a convertirse en una atadura que oprime, ata y domina a una persona en todas las áreas de su vida; satanás ha lanzado en estos últimos años legiones de demonios que infunden miedos a la gente, especialmente a los cristianos para impedirles caminar Con Pasos Firmes en Dios, incapacitando a mucho pueblo para vivir en el poder de la victoria que Jesucristo ya nos dio en su resurrección, de tal manera que muchos han vuelto atrás, han abandonado su fe en Dios y su confianza en Jesucristo como salvador y SEÑOR; el espíritu de miedo se arraiga en la vida de muchas personas y se convierte en manipulador que trastorna todo en la vida, pero el SEÑOR ya venció públicamente en la cruz y la tumba vacía. Dios despojó de poder a esos seres espirituales y les quitó toda autoridad; por medio de Cristo los humilló y avergonzó públicamente y los hizo prisioneros con su victoria de la cruz. Colosenses 2:15.
Vencer el miedo no es una opción, es una orden y mandato divino que debemos cumplir y obedecer, el mundo necesita valientes intrépidos, que reverencien, amen y proclamen a Jesucristo a pesar de las amenazas del mundo y las tretas de las tinieblas; hay miedos difíciles de sacar, pero si estamos aferrados al amor perfecto, Él expulsará todo miedo, porque el amor perfecto no es una emoción, es la persona del SEÑOR Jesucristo, solo en Él podremos arder en llamas de amor, afecto, compasión y justicia para salir a pescar miles de vidas que engrosen las filas del ejército de Dios, donde una iglesia sin miedo trabaja para el reino de Dios, haciendo discípulos. Donde hay amor, no hay miedo. El perfecto amor echa fuera todo miedo, pues el miedo produce castigo. Por eso si alguien tiene miedo, es que no ha llegado a amar perfectamente. 1 Juan 4:18.
Para vencer el miedo es necesario orar sin cesar, en lenguas, y permitiendo que Jesucristo tome de nuestra vida y la atmósfera, gobernándolo todo para que volvamos a ver con frecuencia los milagros y maravillas que durante años hemos dejado de ver, para que millares de jóvenes crean y sean salvos, pues estas generaciones recientes deben conocer a Jesús cara a cara para que sean libres de las ataduras que el mundo les ha impuesto, que se sientan sanos, valientes en Cristo y vivos conociendo su propósito, identidad y razón de ser en este mundo. No se preocupen por lo que comerán ni vestirán mañana, Lucas 2.22b.
Es necesario sacudir todo miedo, rchar fuera toda confusión, toda falta de identidad y sentido de pertenencia para enfocarnos en el reino y consagrarnos a Dios, incrementando la oración y la adoración, porque si Cristo reina en cada corazón, se le estará declarando la guerra al lo miedo y las debilidades del cuerpo, que debilitan y tienen preso a muchos, tenemos que derribar esos espíritus inmundos. YO SOY quien te mando que tengas valor y firmeza. No tengas miedo ni te desanimes, porque YO tu SEÑOR y Dios, estaré contigo donde quiera que vayas. Josué 1:9.
Desaloja la preocupación que llama al miedo, conságrate a Dios y su palabra, así combates el miedo y los temores malsanos para que el SEÑOR Jesús ocupe en nuestra vida y hogar el lugar que le corresponde; nuestra vida es como un gran rompecabezas, nosotros vemos algunas piezas dispersas a causa de lo que vivimos en el pasado, solo el Creador puede ver todo el rompecabezas terminado hasta el final, lo cual sucederá a medida que rompamos con los miedos y las inseguridades; Dios se toma su tiempo para ordenar y unir cada pieza, colocándola en el lugar que le corresponde; si queremos salvar la vida, primero debemos perderla en Jesucristo y por Él, crucificados juntamente con Él, es decir, negándonos a lo que queremos y deseamos para sí mismos y por nuestros propios medios. Mateo 16:25-26. El SEÑOR le habló a Pablo en visión de noche y le dijo: No tengas miedo; sigue hablando y no te calles, pues YO estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal…Hechos 18:9-10.
En este tiempo Dios quiere que rompamos con el miedo, para que disfrutemos su paz y confianza, porque el miedo se entrona en la ansiedad, depresión y dudas, pero la fe es fuerza y esperanza de vida; el miedo hace que se pierde la fe, la paz y la esperanza, porque se apagan el amor y la alegría, es decir, el fruto del Espíritu Santo; necesitamos creer la palabra y amar a Jesucristo para recibir el raudal de fuerza y valor que emanan del trono del Padre. YHVH dará fortaleza a su pueblo; Él bendecirá a su pueblo con paz. Salmos 29:11.
Somos sal, somos luz, somos cuerpo del Vencedor más grande y exitoso de la historia, llevémos cautivo todo pensamiento a la mente de Cristo y quitemos el prepucio de pecado del corazón que acobarda e impide el discernimiento de espíritus; el enemigo sabe que está vencido, pero debe vernos dar pasos de fe y obedeciendo a la voz de Dios, porque el que debe tener mucho miedo es satanás, que le queda poco tiempo para ser atado por mil años. Moisés le dijo al pueblo: No tengan miedo. Manténgase firmes, y vean la salvación que el SEÑOR llevará a cabo a favor de ustedes. Los egipcios que hasta hoy hemos visto, nunca más los volveremos a ver…Éxodo 4:13-18.
Aunque este tema ya ha sido tratado en varias ocasiones en este Blog, Dios desea que escudriñemos, e investiguemos el mayor número de versículos para memorizar y que aprendamos para fortalecernos en el momento preciso, pues algunos estudiosos afirman que hay 365 versículos que nos hablan acerca de NO tener miedo y se relacionan con no temer. Busqué al SEÑOR, y Él me respondió; y me libró de todos mis temores. Salmos 34:4.
Dios me ha confirmado esta enseñanza con dos hombres de Dios y me envío su versículo para que yo no tuviera duda en escribir, pues todos debemos reconocer que no hay excusa para paralizarnos y callar; tenemos que compartir la palabra del evangelio sin ningún temor ni miedo, podemos opinar y denunciar la maldad que vemos alrededor; es necesario ser voceros de la verdad y mensajeros fieles de la palabra de Dios que cambia vidas. Filipenses 4:6-7; Tenerles miedo a los hombres resulta en una trampa, pero el que confía en el SEÑOR, sale bien librado. Proverbios 29:25.
No debemos temer, son tiempos proféticos, que como pueblo de Dios sabemos que deben acontecer situaciones un tanto inquietantes que nos obligan a tomar medidas de seguridad, ser prudentes y saber expresarnos aunque corramos riegos por decir la verdad, condenar el pecado y señalar la iniquidad; trabajemos en pro de la vida, la libertad, el orden de Dios, la justicia y la democracia de los pueblos y las naciones, porque hay incapacidad en los gobernantes para gobernar recta y justamente; enfrentemos moralmente la corrupción y depravación que pulula a todo nivel social. Porque Dios nos esconderá en su tabernáculo en el día del mal; nos ocultará en lo reservado de su morada, y sobre la Roca nos pondrá en alto. Salmos 27:5.
El temor entra y usurpa el lugar de Cristo en nuestra vida y corazón porque algunos siguen creyendo las mentiras del mundo; como creyentes no debemos atender las herejías y apostasía de los renegados, rebeldes e incrédulos, no seamos como el pueblo que creyó el informe negativo de los diez espías, y rechazó las buenas nuevas de dos hombres que conocían a Dios, creían, andaban por fe, y eran visionarios de los grandiosos planes y proyectos de Aquel que todo lo conoce y lo puede, pues Él no engaña ni miente; no nos rebelemos contra Dios causa de los miedos, la incredulidad, las dudas y las inseguridades personales que llegan a ser gigantes para la queja, murmuración e ingratitud; seamos valientes con certidumbre de fe, porque la presencia de Dios siempre estará con nosotros. No tengas miedo, pues YO estoy contigo; no temas, pues YO SOY tu Dios, YO te doy fuerza, YO te ayudo, y YO te sostengo con mi mano victoriosa. Isaías 41:10.
Observemos los acontecimientos de la historia con serenidad, fe y conocimiento de lo que sucede, sin miedos ni angustias, sino orando y clamando por Israel y las naciones para miles tengan la experiencia personal de salvación conociendo a Jesucristo cara a cara. El SEÑOR los salvó por amor de su nombre, para dar a conocer su poder. Reprendió al mar y se secó; y los hizo ir por el abismo como por un desierto. Los salvó de manos de los enemigos y los rescató de manos del adversario. Las aguas cubrieron a sus enemigos, y no quedó ni uno de ellos. Salmos 106:8-11.
Aquí algunos versículos relacionados al tema:
Pues ahora, Zorobabel, esfuérzate, dice YHVH; esfuérzate también, Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote; y cobren ánimo, pueblo todo de la tierra, dice YHVH, y trabajen; porque YO estoy con ustedes, dice YHVH de los ejércitos. Según el pacto que hice con ustedes cuando salieron de Egipto, así mi Espíritu estará en medio de ustedes, no teman. Porque así dice YHVH de los ejércitos: De aquí a poco YO haré temblar los cielos y la tierra, el mar y la tierra seca; y haré temblar a todas las naciones, y vendrá el Deseado de todas las naciones; y llenaré de gloria esta casa, ha dicho YHVH de los ejércitos. Mía es la plata, y mío es el oro, dice YHVH de los ejércitos. La gloria postrera de esta casa será mayor que la primera, ha dicho YHVH de los ejércitos; y daré paz en este lugar, dice YHVH de los ejércitos. Hageo 2:4-9.
No se angustien ni tengan miedo. Confíen en Dios, y confíen también en Mí, dijo el SEÑOR Jesús. Juan 4:1.
No tengan miedo, ovejas de mi rebaño, porque aunque ustedes son pocos, el Padre en su bondad, ha decidido darles el reino. Lucas 2:32.
…el SEÑOR le habló a Abram en una visión y le dijo: No tengas miedo, Abram, porque YO SOY tu protector. Y tu recompensa va a ser muy grande. Génesis 15:1.
Dios oyó que el hijo de Agar lloraba; y desde el cielo el ángel de Dios llamó a Agar y le dijo: Agar no tengas miedo, porque Dios ha oído el llanto del muchacho ahí donde está. Anda, ve y busca al niño, y no lo sueltes de tu mano, pues YO haré que de él salga una nación muy grande. Génesis 21:17-18.
Esa noche el SEÑOR se le apareció a Isaac y le dijo: YO SOY el Dios de tu padre Abraham. No tengas miedo, YO estoy contigo. Por causa de mi siervo Abraham te bendeciré y aumentaré mucho tu descendencia. Génesis 26:24.
En el momento más difícil, la partera le dijo a Raquel: no tengas miedo porque has dado a luz otro hijo varón. Génesis 35:17.
El mayordomo de José contestó a los hermanos: Cálmense, no tengan miedo, el Dios de sus padres y de ustedes, debe haber puesto ese dinero en los costales, pues yo recibí el dinero que ustedes pagaron…Génesis 43:23.
Y dijo a Jacob: YO SOY Dios, el Dios de tu padre Isaac, no temas descender a Egipto, porque allí YO haré de ti una gran nación. Génesis 46:3.
Pero José le contestó a sus hermanos: no tengas miedo, yo no puedo ponerme en lugar de Dios. Génesis 50:19.
José dijo a su pueblo: no tengan miedo, yo les daré de comer a ustedes y a sus hijos. Así José los tranquilizó, pues les habló con mucho cariño. Génesis 50:21
Pero el SEÑOR me dijo: No digas que eres muy joven. Tú irás a donde YO te mande, y dirás lo que YO te ordene…Tú, ármate de valor, ve y diles todo lo que YO te mande. NO tengas miedo delante de ellos; no sea que YO te quebrante delante de ellos…Pelearán contra ti, pero no te vencerán; porque YO estoy contigo para librarte, dice YHVH. Jeremías 1:7 y 17-18.
La casa de Israel no te querrá oír, porque no me oyen a Mí; ellos son duros de frente y obstinados de corazón. Pero YO he hecho tu rostro fuerte como el diamante contra el rostro de piedra de ellos y tu frente fuerte contra sus frentes. Como diamante, más fuerte que el pedernal he hecho tu frente; no les temas ni tengas miedo delante de ellos, porque son casa rebelde. Hijo de hombre, toma en tu corazón todas mis palabras que YO te hable, y oye con tus oídos. Ezequiel 3:7-10.
Mg.
MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino eterno.