#34 HUMILLADOS Y ARREPENTIDOS-Oramos todos por Colombia

#34 HUMILLADOS Y ARREPENTIDOS ANTE EL CREADOR

Oramos todos por Colombia

Quien encubre su pecado, no prosperará, pero quien lo confiesa y lo abandona, alcanzará misericordia, Proverbios 28:13.

Así que arrepiéntanse y conviértanse, para que sean borrados nuestros pecados, y vengan de la presencia del Señor, tiempos de refrigerio, Hechos 3:19.

El día 03 de febrero de 2018, se reúnen los hijos de Dios, en las distintas plazas de las ciudades de Colombia, en ayuno y clamor ante el Dios Eterno y poderoso Creado, para ponernos a favor de esta nación, estando todos en el mismo Espíritu y con mucho dolor en el corazón, deseosos de encontrar misericordia y respuesta en Él, confesando los pecados e iniquidades de cada quien y de sus familias, así como para pedir perdón por toda la maldad e injusticia de los gobernantes que han pasado a través de la historia de la nación. Pues la vara de impiedad de los inicuos NO permanecerá sobre la tierra de los justos, para que los justos no extiendan sus manos para hacer el mal. Salmo 125:3.

Nos levantamos para bendecir y adorar al Dios del cielo, porque solo Él es Dios, desde la eternidad y por la eternidad, y en el poderoso nombre del Hijo nos atiende el Padre y responde con su diestra de majestad, Él debe ser bendecido y proclamado en toda esta nación, pues Él es el Alto y el Sublime y está por encima de todas las cosas, personas y circunstancias. Porque solo Tú SEÑOR omnipotente pudiste crear el universo con el poder de tu voz para hacer las maravillas que hoy vemos con sus formas, colores y diseños extraordinarios, los aires, las aguas y la tierra y solo Tú Altísimo SEÑOR das vida y libertad y a ti acudimos...Adoren al que hizo los cielos y la tierra, el mar y los manantiales de aguas. Apocalipsis 14:7b.

Tú eres el Dios que ha escogido esta nación para ser probada, molida y transformada en tu diestra; tu nos has sacado del Egipto del mundo para trasladarnos de las tinieblas a la luz de tu Hijo, y nos has dado nombre nuevo como redimidos, nación santa y real sacerdocio para nuestro Cristo, quien nos ha justificado con su muerte, su sangre y su resurrección. Sabes que hay muchos fieles en esta tierra bendita de Colombia, por ese puñado o multitud que te ama, ayúdanos y libéranos SEÑOR de la mano opresora, y santificanos en ti para hacer tu voluntad; recuerda que nos injertaste en la Vid verdadera y has hecho Pacto Nuevo de gracia con nosotros tu pueblo y nos has dado esta nación como nuestra tierra prometida, por favor derriba y acaba con los espíritus amorreos, heteos, jebuseos, gerjezeos, ferezeos y cananeos que hoy nos rodean, pues tu digiste: Es inevitable que vengan tropiezos, pero ¡ay de aquellos que causan los tropiezos! Lucas 17:11.

Ahora SEÑOR Eterno, nos humillamos y pedimos tu perdón y misericordia para que nos protejas y defiendas de tantas tinieblas mientras nos consagramos a Ti; mira hoy a aquellos espíritus asirios, filisteos y babilónicos que en este tiempo oprimen, y libéranos de su asedio como hiciste con tu pueblo en la antigüedad, pueblos que fueron enemigos de tus hijos, ofenden humillan y vituperan a tu pueblo blasfemando tu nombre y quebrantando tus mandamientos, provocando tu ira y queriendo atemorizar a tu pueblo con amenazas, violencia e inseguridad, pues ellos representan en mal para esta nación que es tuya, porque Aunque andemos en medio de la angustia, Tú nos vivificarás; extenderás tu mano contra la ira de los enemigos, para salvarnos. Salmos 138:7. 

Dios santo y bondadoso, toma la aflicción, el dolor y la muerte de muchos de tus hijos, y arranca de raíz la violencia, la idolatría, la hechicería, y toda clase de maldad que se comete bajo el cielo de Colombia, destruye, quema, derriba y consume todos los planes de las tinieblas, todas las artimañas del maligno, todo su engaño, todo su abuso, mentiras e injusticia y haz tu perfecta obra en esta patria bendita. Libéranos de los enemigos, oh Dios; ponnos a salvo de los que se levantan contra nosotros. Libéranos de los que cometen iniquidad, y sálvanos de hombres sanguinarios...Salmos 59.

Haz HOY señales, maravillas y prodigios contra ellos, como lo hiciste con Faraón y los pueblos enemigos en tiempos de Israel; mira sus amenazas, mira la corrupción que manejan en el gobierno, lo malo que en oculto hacen y toda la maldad que traman contra ti y contra tu pueblo, la iglesia y sal a defendernos, ponte a nuestro favor y cúbrenos con tu misma gloria y presencia a partir de este día. Tú sabes que los que no te temen son gente soberbia, con codicia de poder y avaricia de riquezas mal habidas, pronúnciate contra toda su maldad y engrandece tu poderoso nombre YHWH de los ejércitos. Porque Tú SEÑOR eres el que pelea por nosotros. Deuteronomio 3:22.

Divíde a los malvados, abátelos y dispersarlos con el viento de tu Espíritu a causa de su perversión como dividiste el mar y hundiste a los egipcios y su ejército, y permite a tu pueblo pasar a tu libertad, justicia y seguridad bajo tu poderosa diestra; saca a nuestros perseguidores de nuestros territorio y de nuestros ímites y échalos a las profundidades como cae una piedra en lo profundo del mar. Levántate Dios, sean esparcidos tus enemigos, y huyan delante de Ti los que te aborrecen. Salmos 68:1.

Guíanos con la columna de gloria y del fuego de tu Espíritu de día y de noche para que alumbres nuestro entendimiento para que caminemos diariamente en tu presencia. Desciende desde los cielos de los cielos y pelea nuestras batallas, envía tus juicios contra toda impiedad e injusticia, libértanos y ayúdanos a actuar en rectitud, en unión y armonía bajo la unción de tu Espíritu, en el poder de tu palabra y tu glorioso nombre Jesucristo. Avivamos en el fruto y los dones, háblanos, libertanos y danos HOY un corazón limpio y entendido para vivir una fe obediente que guarda tus mandamientos y principios. Ciertamente Tú nos salvarás de nuestros adversarios, y avergonzarás a los que nos aborrecen. Salmos 44:7.

Nos has dado abundancia de pan y provisiones, has bendecido nuestro suelo con riquezas naturales, y alimento sobre abundante, hemos vivido en esta tierra por muchos años, pero nosotros, nuestras casas y la nación toda se ha corrompido y ensoberbecido, perdónanos SEÑOR. Muchos han endurecido su corazón y levantando su cerviz se han vuelto tus enemigos por lo cual se olvidaron de ti y no han cumplido tus mandamientos, se han apartado de tu verdad y tu justicia y por eso hoy vivimos toda esta angustia y zozobra. Porque si cuando éramos tus enemigos, nos reconciliaste contigo en la muerte de tu Hijo, mucho más ahora siendo reconciliados, nos salvarás por tu nombre para darnos vida. Romanoa 5:10.

Pero Tú Dios Eterno Creador, eres misericordioso, clemente y lento para la ira y piadoso porque no nos has abandonado, a pesar de toda la idolatría, la brujería, la injusticia, la corrupción y la perversión que hay en esta nación, haces diferencia entre los tuyos y los que no lo son; Tú con todo, por tus muchas misericordias no nos has abandonado, Tu presencia continua en medio de tus redimidos y nos has dado tu Buen Espíritu, nos has alimentado y vestido bajo techos de seguridad. Nos has sustentado todos estos siglos y de nada básico tenemos necesidad. Tú nos sacas a lugar espacioso, nos rescatas, porque te complaces en tus santos. 2 Samuel 22:20.

Te hemos provocado a ira y muchos se han levantado contra Ti, la gente de mi país ha echado tu palabra y tus leyes tras sus espaldas, han matado a los pequeñitos, a los indefensos y débiles y han dejado muchas viudas y huérfanos; los han lanzado a la calle y les han arrebatado y usurpado sus casas y hogares; nuestra tierra se ha cubierto de sangre inocente a causa de las manos violentas, genocidas y homicidas de la delincuencia organizada que ha cometido oprobio y sigue haciendo grandes abominaciones delante de Ti y contra la gente buena de este país. Por eso hoy vemos a los enemigos de la vida y la justicia, rampantes, riéndose y burlándose y asechando con sus planes torcidos, sentados gobernando, ¡qué vergüenza, perdónamos SEÑOR en la profundidad de tu amor y danos nuevos tiempos. Tú SEÑOR eres nuestra ayuda y solo Tú eres nuestro libertador; nos librarás de los impios y nos pondrás a salvo, porque en Ti nos refugiamos. Salmos 37:40.

Hasta hoy estamos afligidos y en gran angustia, porque son tiempos de incertidumbre e inquietud clamamos a Ti, sabemos que Tú nos escuchas desde los cielos, nos ves y nos respondes; y según tu gran misericordia, puedes extender tu brazo liberador para resguardarnos de todo el mal que nos asecha; liberanos de las manos tiranas, mentirosas y homicidas, defiéndonos y protégenos de los corruptos, del hambre y la injusticia que ha traído el espíritu Jezabélico del comunismo, las políticas corruptas, las falsas ideologías humanistas y todo aquello que es contrario a tu Verdad. A causa del pecado, esta nación ha  sido entregada en manos enemigas que oprimen, pero en este tiempo de angustia clamamos a Ti, y Tú nos escuchas desde el cielo, conforme a tu gran compasión, danos libertadores que salgan de tu pueblo, porque Tu obrarás a través de ellos para librarnos de las manos opresoras. Nehemías 9:27.

Padre Eterno, por tu amor y tu favor danos paz y seguridad para vivir en este hermoso y bendito país de Colombia, según tus bondades y permitenos disfrutar tu libertad y seguridad para predicar tu palabra y extender tu reino. Amonéstanos cuando tengas que hacerlo, no nos dejes sin corrección, pero por amor a tu nombre defiéndenos. Haz que nuestros enemigos resbalen en el cebo de su perversión, se dividan y se acaben entre ellos a causa de su codicia y corazón malo. Consúmelos a ellos y no nos desampares. Eres Dios grande, fuerte y temible, fiel a tu pacto; no sea tu pueblo tenido en poco delante de tus enemigos; no permitas que nuestro pueblo colombiano siga sufriendo, por favor, ven y se nuestro Guerrero contra el mal. Si han venido juicios es porque Tu actúas rectamente y aborreces el pecado y la maldad, y nosotros hemos hecho lo malo delante de tus ojos. Tú respondes hoy como respondiste a Israel en el pasado, los libraste de los egipcios, de los hijos de Amón y de los filisteos, y cuando los sidonios y amonitas los oprimían; ellos clamaron a Ti y los ayudaste, hoy también atiende, ayúdanos y libéranos de sus manos. Jueces 10:11-12 

Multiplica tus bendiciones y cuidado a tu pueblo como lo dice Salmos 23 y 91 y a todos los justos de esta nación, guarda provisión y fruto de la tierra, cubre con tu gloria los aires, demarca con tus ejércitos celestiales los límites de nuestra nación y que tus ángeles guerreros impidan la entrada de toda fuerza de maldad.

Hoy nos comprometemos contigo a vivir en santidad, a buscar tu rostro y tu dirección en todo tiempo y lugar; ayúdanos a ser fieles a ti y a tu palabra, guarda y prospera a tu Iglesia y bendice a toda la  nación. En el nombre de Jesús, Amén. BASADO EN NEHEMÍAS 9 adicionando versículos que respaldan.

Mg. MEHC, Hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino.