29 nov 2018

POR ENCIMA DE TUS CIRCUNSTANCIAS-DIOS.


DIOS ESTÁ POR ENCIMA DE TODA CIRCUNSTANCIA

De esta manera, ellos hicieron todo lo que Tú en tus planes ya habías dispuesto que tenía que suceder. Hechos 4:28.

Por medio de su Hijo, el Padre hizo todas las cosas;nada de lo que existe fue hecho sin Él, Juan 1:3.

En Él, Dios creó todo lo que hay en el cielo y en la tierra, tanto lo visible como lo invisible, así como los seres espirituales que tienen dominio, autoridad y poder. Todo fue creado por medio de Él y para Él, Colosenses1:16.

Así que contra el pueblo de Elohim no valen maleficios; contra Israel no sirven brujerías. Ahora es preciso decir al pueblo del Eterno YHWH: ¡Cuántas maravillas ha hecho Abba Padre contigo! Números 3:23.

El que vive bajo la sombra protectora del Altísimo y Todopoderoso, dice al SEÑOR: Tú eres mi refugio y mi castillo, ¡Mi Dios Tú eres en quien yo confío.

Sólo Él puede liberarte de trampas ocultas y plagas mortales, pues Dios te cubrirá con sus alas y bajo ellas estarás seguro.

¿Su fidelidad te protegerá como un escudo! No tengas miedo a los peligros nocturnos, ni a las flechas lanzadas en el día, ni a las plagas que llegan con la oscuridad, ni a lo que destruye a pleno sol; pues mil caerán muertos a tu izquierda y diez mi a tu derecha, pero a ti nada te pasará. Solamente lo habrás de presenciar: verás a los malvados recibir su merecido.

Si has hecho del SEÑOR tu refugio, del Altísimo tu lugar de protección. No te sobrevendrá ningún mal ni la enfermedad llegará a tu casa; pues Él mandará que sus ángeles te cuiden por dondequiera que vayas. Te levantarán con sus manos para que tus pies no tropiecen con piedra alguna. Podrás andar entre leones, monstruos y serpientes.

YO te pondré a salvo, fuera del alcance de todos, porque él me ama y me conoce. Cuando me llame, le contestaré; ¡YO mismo estaré con él! Lo libraré de la angustia y lo comaré de honores; lo haré disfrutar de una larga vida: ¡lo haré gozar de mi salvación! Salmos 91.

OH Dios, quitale la vida a los malvados  aleja de mí a los asesinos, a los que hablan mal de ti y se levantan en vano en contra de Ti.

Señor, ¿acaso no aborrezco a los que te odrian, y desprecio a los que te desafía?  ¡Los aborrezco con toda mi alma! ¡Los considero mis enemigos!

Oh Dios, examíname, conoce mi corazón; ponme a prueba, reconoce mis pensamientos; mira que yo no vaya por el camino del mal, y guíame por el camino eterno. Salmos 139:19-24.

Por medio de su Hijo el Padre hizo todas las cosas; nada de lo que existe fue hecho sin Él. Juan 1:3 En Cristo Dios creó todo lo que hay en el cielo y en la tierra, tanto lo visible como lo invisible, así como los seres espirituales que tienen dominio, autoridad y poder. Todo fue creado por medio de Ély para Él, Colosenses 1:16.

El fatalismo es una forma de pensamiento que afirma que ya todo evento está predeterminado y que por consiguiente son inevitables y que se ha traducido en la frase, lo que será será y muchos se identifican con esto, sin embargo, los fatalistas lo afirman vagamente porque no dicen quién ha determinado tales cosas; en otras palabras, el fatalismo deja a la humanidad a merced del azar, de las circunstancias o la malevolencia, pero la biblia dice todo lo contrario.

Dios tiene el gobierno y dominio de todos los eventos y circunstancias, aún de lo negativo, también, los mismos apóstoles lo afirman en Hechos, incluso los eventos de la muerte y sacrificio de Jesús en manos de Herodes  fueron el resultado de la mano y propósito de Dios; la voluntad y soberanía de Dios determinan lo que ha de suceder, y eso no es fatalismo, sino el gobierno de la majestad toda poderosa de nuestro Creador en el curso de los eventos humanos.

La muerte de Jesucristo fue planeada por el Abba Padre desde el origen de la raza humana con el propósito de salvarnos, también Él planea nuestras vidas, Tus ojos vieron la formación de mi cuerpo; todo eso estaba escrito en tu libro. Habías señalado los días de mi vida cuando aún no existía ninguno de ellos, Salmos 139:16.

Cuando aprendamos a confiarle a Dios los detalles pequeños y grandes de nuestras vidas, y mantengamos una relación estrecha e íntima con nuestro Creador, entonces hallaremos muchas razones para adorarlo y alabarle, Encomienda al SEÑOR tu camino, confía en Él y Él actuará a tu favor, Salmos 37:5.

Lic. MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino.







24 nov 2018

ARDE EN EL FUEGO DE DIOS



QUE ARDA EL FUEGO DE DIOS 
EN ESTE TIEMPO

Humo subió de su nariz, y de su boca fuego consumídor; carbones fueron por Él encendidos, 2 Samuel 22:9.

Él los bautizará con Espíritu Santo y fuego, Mateo 3:11.

Porque nuestro Dios es fuego consumidor, Deuteronomio 4:24, Isaías 33:14 y Hebreos 12:29.

El fuego es uno de los elementos más poderosos e importantes sobre toda la creación, se le ha visto con cierta superstición desde la antigüedad a causa del paganismo y las falsas ideas religiosas que surgieron entre los pueblos sincretistas antiguos que no conocienon a su Creador,  pero también se le ha considerado como símbolo de fiesta y celebración en los juegos, posesión de gobernantes y fiestas nacionales de los países porque, el fuego también se ha considerado sagrado, hasta el punto de rendirle culto como a Dios, Levítico 18:21.

El fuego es la fuente de energía más valiosa que conocemos porque con su calor conserva la vida, si lo consideramos desde el punto de vista del sol que es centro de nuestro sistema planetario. Hay fuego en las entrañas de la tierra que habitamos, vemos fuego en la potencia de artillería militar humana y la maquinaria en la industria, el fuego es como dinamita pura que hace explotar una bomba en tiempos de guerra e importante en el empleo de la electricidad con sus incontables adaptaciones que van en aumento en el uso en la industria en el manejo de maquinas y artefactos, que generan trabajo y comercio, La mitad del leño quema en el fuego; sobre esa mitad prepara un asado, come carne y se sacia. También se calienta, y dice: ¡Ah¡, me he calentado, y he visto las llamas, Isaías 44:16.

Dios siempre ha hablado del fuego en su palabra, no como objeto de superstición, sino como símbolo de su gloria trascendente y del poder de la presencia del Espíritu Santo. Dios es el origen del fuego y es la fuente de toda la energía que existe sobre el universo, por medio de Él es que funcionan todas las baterías que mantienen la creación en movimiento, porque todo poder le pertenece al Creador; Dios es el fuego consumidor de todo mal, pero también el seno que emana la vida, porque así como el fuego mantiene el calor de la vida, también el fuego consume todo lo que alcanza, puede ser fuego de castigo que quema el mal, o fuego que purifica, refina y limpia. El SEÑOR hizo llover fuego y azufre sobre Sodoma y Gomorra, Génesis 19:24.

El propio Dios en la persona del Espíritu Santo nos ha enseñado a reconocer en esa tremenda fuerza del fuego, el símbolo de su propia personalidad y esencia sobrenatural que crea el bien y destruye la maldad, Él nos bautiza con Espíritu Santo y fuego, Mateo 3:11. El fuego de Dios no es una fuerza misteriosa deslumbrante inalcanzable, Dios se ha manifestado con fuego como lo vemos en la historia sagrada, con Moisés, con Elías y cuando destruyó el campamento de Israel por haber provocado la ira de Dios, su fuego se manifesta unas veces con gran estruendo como en el monte Carmelo y en otras se presenta silenciosamente como en la zarza ardiendo que no se consumía o como silvido apacible en la cueva con Elias, todo esto nos habla de la presencia divina del Omnipotente Dios santo, sea porque está airado o desea manifestar su gloria. En columna de nube para guiar en el día y columna de fuego para alumbrar el camino de noche. Éxodo 13:21 y Salmos 78:14.

Con la venida de nuestro SEÑOR y Salvador Jesucristo, su muerte y victoriosa resurrección, el fuego de Dios ha descendido sobre nosotros en la persona del Espíritu Santo que nos bautiza con fuego espiritual para habitar y quedarse en nuestro corazón dirigiendo la existencia humana hacia la pureza que proporciona poder y autoridad de Dios contra toda fuerza del enemigoDios purifica con fuego santo y consume lo malo con la gloria de su presencia haciendo huir al enemigo que tiene a miles de cautivos al borde de la condenación, pero que al final quedará bajo el fuego eterno, Mateo 25:41, mientras Dios rodea a su pueblo de su gloria y sus maravillas. Hechos 1:8.

Elohim ha puesto sobre sus hijos, los redimidos en Jesucristo toda su fuerza, su respaldo y sus recursos espirituales, para que seamos vencedores contra las opresiones del mal, y que vivamos a la manera de Dios. Así como se emplea la electricidad en los negocios, la industria y los hogares, así la presencia poderosa de Jesucristo por su Espíritu opera en nosotros para ayudarnos a vivir en la Luz de su verdad que nos hace libres. La ley del Espíritu que da vida en Cristo Jesús, nos liberó de la ley del pecado y de muerte, Romanos 8:2, y Por fuego serán reveladas y probadas las obras de cada quien. 1 Corintios 3:13.

El Santo Espíritu es Emanuel, Dios con nosotros, no solo es el Autor de la vida espiritual más elevada, sino que Él es el compañero, ayudador, consejero y amigo fiel que 24/7 está a nuestro alcance porque Él debe ser el Director de todo lo que somos, pensamos y hacemos. Él está para guiar nuestra conducta y comportamiento para que seamos felices en la vida a pesar de tantos altibajos para que hagamos sonreír al Padre celestial, en lo natural viviendo en lo sobrenatural del perfeccionamiento integral que Dios hace en nosotros. El Espíritu de Dios, es el Único que nos guía a toda verdad, Juan 16:13, y con la Palabra de Dios no nos deja ser engañados, porque A sus ángeles los hace ministros en llama de fuego. Hebreos 1:7.

Así como Abba Padre se manifestó en el fuego de la zarza que no se consumía, hoy se manifiesta en todo aquel que cree, acepta y tiene y Jesucristo en su vida; Dios quiere mantener su presencia viva ardiendo como fuego en medio de su congregación, porque la gloria del fuego sagrado, que estuvo en el lugar santísimo del tabernáculo, hoy se levanta en templos vivos, para responder a las plegarias, oraciones y necesidades que dirigirnos andando por el camino de la Luz hasta que lleguemos a nuestra mansión celestial; esta es la razón por la cual nuestro Dios nos llama a ser ofrenda y sacrificio y vivo santo, agradables a nuestro Dios, Romanos 12:1. Esto es vivir en santidad comprometidos con el Dador del fuego que puririfa, prueba, da vida y victoria, Para que con fe conquistemos reinos, hagamos justicia, alcancemos promesas, tapemos boca de leones, Apaguemos fuegos impetuosos, evitemos filo de espada, saquemoa fuerzas de debilidad, nos hagamos fuertes en batallas, y pongamos en fuga los ejércitos del mal.Hebreos 11:33.

Como en la antigüedad el holocausto que se ponía sobre el altar, debía ser consumido por el fuego, nosotros como Cristo lo hizo en la cruz, debemos ofrecernos por entero a nuestro Creador, mueriendo al cuerpo de pecado y consagrados en rendición total con el fuego Santo de su presencia que quema el pecado; que seamos tal como el cebo del sacrificio que era consumido en las llamas y el pecado era echado en azazel al desierto lejos del campamento para ser olvidado, simbolizando que morimos a las pasiones del cuerpo y nos descargamos en Cristo con arrepentimiento para que el Espíritu Santo obre en nosotros con su fuego purificador y dejemos en el olvido la vida de pecado. Porque ¿Quién podrá resistir el día de su venida? ¿Quién podrá entonces permanecer de pie? Pues llegará como un fuego, para purificarnos; será como un jabón que quitará nuestras manchas, Malaquías 3:2.

La palabra nos enseña que el Rey vendrá por una novia sin mancha y sin arrugas: sin las manchas del pecado y sin arrugas de tanta debilidad e imperfecciones que deben reducirse cada día con la llenura del Espíritu, donde yo menguo y Cristo crece, de modo que cuando el Espíritu Santo nos llena y efectúa su obra perfeccionadora en nosotros, no tenemos nada que ver con el pecado que nos dominaba y abrumaba, lo que nos corresponde ahora, es mantenernos consumidos en las brasas del amor y la pureza en Dios, ese fuego santo que derrite el cebo pecaminoso, para que arda la llama de la pasión a Cristo en nosotros; y para que haya ese fuego de amor intenso necesitamos el Bautismo de fuego en el Espíritu, la Presencia de Dios y el aire del Espíritu que óxigena el alma, y con la leña de nuestro ser alimentando la hoguera espiritual, así como en lo natural ponemos carbón o leña en la chimenea para que se mantenga encendidido el fuego; tenemos que vivir bajo el fuego abrasador del peso de su gloria…Por eso debemos mantenernos limpios de todo lo que pueda mancharnos, tanto en el cuerpo como en el espíritu; y en el temor de Dios procuremos alcanzar una completa santidad…2 Corintios 7:1.

Así como en en AT la llama se mantenía encendida en el altar, hoy el fuego del Espíritu debe ser atizado con la madera de nuestro corazón ardiente y apasionado por Dios, libres de malas intenciones, esto es lo que hace que nuestra vida ante Dios sea un continuo sacrificio, de pureza agradable al Padre que aromatiza su trono, como el olor delicioso que exhala un asado y produce más hambre. 2 Corintios 2:15. Porque nuestra fe es sometida a prueba para que seamos preciosos como el oro, el cual aunque es perecedero se prueba con fuego, pero nosotros debemos ser alabanza, gloria y honra en la manifestación de Cristo. 1 Pedro 1:7.

En los sacrificio de paz el fuego quemaba la grosura, es decir, la grasa y las entrañas del animal hasta que eran consumidos en las llamas, esto nos habla de morir a nosotros mismos en nuestra comunión con Dios, y que nos representa en la paletilla y el pecho que comía el sacerdote; una comunión que solo es posible cuando Cristo reina en nuestro ser por el Espíritu enciendido y avivado en nuestro interior para iluminar las vidas como si fueramos antorchas que guían el camino, y siendo alimentandos con el Pan de Vida cada día. Porque para este propósito hemos sido llamados, pues también Cristo sufrió por nosotros, dejándonos ejemplo para que sigamos sus pisadas, 1 Pedro 2:2, porque al final todo será consumido por el fuego. Apocalípsis 8:8.

El fuego era parte fundamental en las ofrendas de incienso y especies aromáticas que debían ser maceradas y molidas hasta quedar vueltas una fina harina que al quemarse producían humo fragante que llenaba todo el tabernáculo, esto nos habla del ministerio sacerdotal de Cristo y el fuego de la entrega en nuestro ministerio intercesor profético como libros abiertos donde todos pueden leer a Cristo, y también cuando proclamamos la palabra en oración y adoración que viene a ser como incienso a Dios, si somos inspirados por el Espíritu, sin el cual ninguna de nuestras oraciones llegaría al cielo: El Santo Espíritu es quien gime por nosotros, con gemidos que no es posible describir, Romanos 8:26.

El fuego santo que da vida está en el Espíritu de Cristo con el cual hemos sido bautizados, ungidos y sellados como propiedad del Padre, Él hace la obra constante de purificación y limpieza quitando cualquier mancha o contaminación cuando somos quebrantados y tallados como piedras preciosas para producir en nosotros fe y poder en medio del mundo y las cosas terrenales que nos rodean; es allí donde vemos el fuego consumidor que quema la carne orgullosa y pecaminosa de la soberbia y autosuficiencia que deja a Dios de lado, porque aunque duela, es una bendición ser tratados, procesados y purificados constantemente por la mano del Herrero celestial y en el fuego de su taller para ser aceptables al Padre por medio de Jesucristo y alejados del enemigo, Porque YO he venido a prender fuego en el mundo; y ¡cómo quisiera que ya estuviera ardiendo! Lucas 12:49. Jesús desea vernos ardiendo en el fuego de su Espíritu

Vemos, pues, que el Espíritu Santo es el fuego en el cual debemos arder y trabajar por mantenerlo encendido para dar fruto y activar los dones porque es el poder de Dios obrando en sus hijos, es el único fuego que todas las aguas del maligno no podrá extinguir, porque es el fuego que se mueve en los lugares más difíciles y agrestes para realizar la tarea más grande arrebatando vidas del fuego del infierno, con el fuego del amor, que es la hermosa figura de la obra del Espíritu Santo, rodeándonos del afecto y la ternura del Padre y con la pasión por Cristo. Porque ustedes ya no viven según sus inclinaciones, sino según el Espíritu, puesto que el Espíritu de Dios vive en ustedes. El que no tiene el Espíritu de Cristo, no es de Dios, Romanos 8:9, Porque del Santo cielo descenderá fuego de Dios para consumir del todo al enemigo y sus demonios causantes de toda maldad. Apocalípsis 20:9.

Pero existe un fuego extraño que Dios destruye, como fueron destruidos los campamentos de Nadab y Abiu que pretendieron ser sacerdotes, Levítico 10; el fuego de Dios consumió todo lo que era de ellos, por eso no debemos pretender hacer algo que no nos corresponde ni Dios nos ha mandado hacer. El fuego del E.S. es el poder vengador contra los enemigos de Dios, y así como castigó con la muerte a Ananías y Safira, volverá a enviar juicio sobre los falsos, presumidos e hipócritas que aparentar ser de Dios, pues el  Espíritu Santo todo lo escudriña y está presente en la congregación de YHWH y bajo cuyas alas podemos acampar confiadamente para escondernos de nuestros enemigos y de todas las plagas del mundo que han salido del infierno y pululan sobre las cabezas para hacer daño al pueblo. Aterrados están los pecadores…el temblor se ha apoderado de los impíos. ¿Quién podrá habitar con el fuego consumidor? ¿Quién podrá habitar con las llamas eternas? Isaías 33:14.

Mientras el agua limpia la parte externa, el fuego santo purifica por dentro; la predicación de Juan Bautista era fuego para el alma llamando al arrepentimiento; porque con este sencillo acto voluntario empezamos el proceso reformador de nuestro carácter, sembrando la verdad en el corazón, que unido al bautismo de fuego del Espíritu Santo penetra hasta las entrañas midificando nuestra conducta y revelando nuestros más íntimos pensamientos e intenciones. Dios no quiere solo que seamos puros, sino que respiremos pureza desde lo profundo de nuestro ser; asi eso es llama que refina el oro y quema toda la escoria. El Señor se sentará a purificar a los sacerdotes…como quien purifica la plata y el oro en el fuego…Malaquias 3:3.

Necesitamos el fuego de Dios que vivifica así como el calor hace germinar las semillas en los invernaderos, solo el fuego de Dios nos da la fuerza y el poder que necesitamos para germinar, multiplicar y dar fruto. Y toda carne verá que YO, el SEÑOR, he encendido fuego; no se apagará, Ezequiel 20:48.

Así que arrepintámonos, seamos hijos fieles y obedientes, tengamos sed y hambre del Espíritu y la palabra, fortalezcamos la fe, cultivemos la esperanza, vivamos en oración, apropiemonos de la verdad de Dios y seamos llenos del Espíritu para ver los resultados; que la fortaleza y el dinamismo celestial caigan como fuego de lo Alto, para que no sea nada humano sino del Eterno, Dios nos dará su fuego para vencer el frío de la indiferencia y el desamor, y en vez de quejarnos por las circunstancias, arderemos en oración y alabanza para ser útiles en el poder del Espíritu Santo. Amados hermanos, no se extrañen de verse sometidos al fuego de la prueba, como si algo extraordinario aconteciera, 1 Pedro 4:12. Porque has guardado la palabra de mi paciencia, YO también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que habitan en la tierra, Apocalipsis 3:10.

Oremos: Abba Padre, hazme arder en el fuego de tu amor, para bendecir y perdonar a todos como Tú lo haces conmigo, hazme arder en el fuego de tu verdad y tu santidad para irradiar tu luz en medio de tantas tinieblas que se ciernen alrededor de mí; permiteme con tu presencia ser la lámpara que alumbra el camino de miles de almas que necesitan conocerte para que salgan de las tinieblas a tu luz admirable, en el poderoso nombre de Jesucristo te lo imploro. Miqueas 1:4 y Hechos 2:19. Amén.

Mg. MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino.

La amiga del Espíritu Santo.






18 nov 2018

DIOS, DEFENSA DE SUS HIJOS


DIOS ES MI PADRE, POR LO TANTO ES MI DEFENSA Y PELEA POR MI.

Serán luego vueltos atrás mis enemigos, el día en que yo clame; esto se, que Dios está por mí, Salmos 56:9.

No temas, porque YO estoy contigo; no te desalientes, porque YO SOY tu Dios. Te fortaleceré, ciertamente te ayudaré, sí, te sostendré con la diestra de mi justicia. He aquí, que todos los que vengan contra ti serán avergonzados y humillados; los que contiendan contigo serán como nada y perecerán. Buscarás a los que pelean contra ti, pero no los hallarás; serán como nada, como si no existieran, todos lo que te hacen la guerra, Isaías 41:10-12.

Salmos 56, nos recuerda las huidas de David ante el ataque y la persecución de sus enemigos que lo tomaron preso queriéndolo destruir del todo. También hay momentos en la vida de hoy, en que se levantan las fuerzas del mal para tratar de matar, robar y destruir, son tiempos de dura guerra espiritual, porque el enemigo se opone con odio ante la obra salvadora de Dios y los redimidos en Cristo, En Dios he confiado, no temeré…Salmos 56:11.

Así como un niño se siente seguro y confiado cuando su padre es el dueño del colegio, o cuando el hijo se siente seguro porque su padre es el dueño de la empresa, así como nos sentimos seguros y confiados cuando vamos en representación de alguien grande y reconocido, así la presencia de Dios y su palabra se levantan poderosas sobre todo ataque de las tinieblas, Ten compasión de mí, oh Dios mío, pues hay gente perversa que me persigue; a todas horas tratan de atacarme y me oprimen. Los enemigos tratan de pisotearme; pues muchos son los que pelean contra mi con soberbia, Salmos 56:1-2.

La palabra que es la espada del Espíritu en nuestra boca, nos hace recordar que toda nuestra confianza y seguridad está en Dios quien pelea por nosotros a nuestro favor; aunque el enemigo arrecie su ataque haciéndonos creer que estanos solos, NO estamos solos, Dios está conmigo y contigo; si invocamos el nombre de Jesucristo y su palabra, Él nos infundirá aliento y guardará, entonces los enemigos retrocederán el día en que yo te invoque. Esto se: que Dios está a mí favor. En Dios alabaré su palabra; en YHWH su palabra alabaré, Salmos 56:9-10. Este es el punto de entrega total a Dios en medio de nuestra dificultad y circunstancias extremas. Dios es fiel, si ayer me ayudó, hoy lo volverá a hacer.

No podemos dudar ni atemorizarnos aun cuando pasemos por momentos de pesado ataque, enfermedad y dolor, allí es cuando se levanta a guerrear por nosotros el Varón de guerra. YHWH está conmigo como poderoso gigante; por tanto, los que me persiguen tropezarán, y no prevalecerán; serán avergonzados en gran manera, porque no prosperarán; tendrán perpetua confusión que jamás será olvidada. Oh YHWH de los ejércitos, que pruebas a los justos, que ves los pensamientos y el corazón, vea yo tu venganza contra ellos; porque a ti he encomendado mi causa. Cantemos a YHWH, adoremos el nombre de YHWH; porque ha librado el alma del pobre de las manos de los malignos, Jeremías 20:11-13. Dios no me falla, ni me deja sola, por tanto el día que temo, yo en Ti confío, Salmos 56:3.

Dios nos da vida en su palabras y confianza de salvación en Cristo, con Él hay certeza de protección y ayuda para nuestra vida, aunque vivamos problemas, aunque nuestros ojos naturales vean tinieblas alrededor y cosas tremendas nos sucedan, aunque parezca que la batalla arrecia, Dios está a nuestro lado haciendo algo mejor y extraordinario a nuestro favor, y dice: YO estoy contigo, YO te guardaré, Yo pelearé por ti y te daré la victoria.

Todos los días el malo maquina contra el justo, los instrumentos de las tinieblas, no cesan de hacer daño y destruir, los brujos, hechiceros, y todos los que practican las obras de la oscuridad le pertenecen al maligno y él los usa como dardos contra el pueblo de Dios; David era perseguido de manera física por personas enemigas, hoy el pueblo de Dios no solo es perseguido físicamente, sino que espiritualmente hay una batalla continua; todos los días el maligno nos acecha queriendo acabarnos porque sabe que le queda poco tiempo, Todos los días ellos pervierten mi causa; contra mi son todos sus pensamientos para mal. Atacan, se esconden, espían mis pasos, como esperando oportunidad para quitarme la vida acechan a mi alma. ¿Acaso escaparán de su iniquidad? Oh Dios, y derríbalos en tu furor. Salmos 56:5-7.

Todos los días estamos en continuo peligro, y muchas veces no podemos soportar, lloramos y nos escondemos en el cuarto de guerra delante del Señor, porque estamos seguros de contar con su apoyo. Para que el salmista pudiera escribir este salmo, tuvo que vivir circunstancias extremas en medio de gente mala; muchas veces tenemos que pasar por cosas indescriptibles para fortalecer nuestra confianza en Dios y saber con certeza que Él está a nuestro a favor. Necesitamos saber cuatro cosas fundamentales para poder estar firmes, confiados y seguros en medio del ataque.

1. Debemos confiar aunque tengamos miedo. Porque cuando siento miedo, yo confío en ti Señor, Salmos 56:3. El miedo es la primera reacción humana ante el ataque, el peligro y las circunstancias que acorralan, eso es normal, pero no podemos quedarnos con el miedo sino que debemos vencerlo, poniendo toda nuestra confianza en el Hacedor de maravillas, Aunque ande en valles de sombra de muerte, no temeré mal alguno porque Tú Señor, estarás conmigo, Salmos 23:3-4.

Si tengo mi confianza puesta en Cristo, nada podrá destruirme. Como David, también nosotros somos frágiles y nos atemorizamos ante el mal, pero así como el salmista se fortaleció en Dios, nosotros también podemos llenarnos de espíritu de valentía para sobreponernos ante las circunstancias, porque éstas pueden ser cambiadas por nuestra fe y confianza en el Poderoso Dios de Israel. Él abre caminos, cumple promesas, nos da luz en las tinieblas y hace milagros, ¡Ten confianza en el Señor! Ten valor, no te desanimes! ¡SÍ, ten confianza en Dios! Salmos 27:14.

2. Debemos estar seguros de la fidelidad de Dios, En ti confían los que conocen tu nombre. Por cuanto Tú, Oh YHWH, no desamparas a los que te buscan, Salmos 9:10, La palabra de Dios y su Espíritu Santo nos infunden aliento y confianza para ser guerreros valientes.

Estar seguros en Dios es tener claridad de su grandeza, conocer su señorío y comprender que Jesucristo es Rey de reyes y Señor de señores, sabiendo que nuestro Dios es el poderoso vencedor en batalla. Es necesario conocer a Dios para poder confiar en Él; no podemos confiar en alguien que no conocemos, ni hemos caminado ni compartido con esa persona. Jesucristo y su evangelio es nuestra referencia de confianza en Abba Padre; su palabra es vida y poder, Porque las misericordias del Señor jamás terminan, pues, nunca fallan sus bondades; son nuevas cada mañana; ¡grande es su fidelidad! Lamentaciones 3:22-23. Si Dios cuida de las aves y su creación, ¡cuánto más hará por mí y por ti! Mateo 6:26.
Como la mujer embarazada no ve cómo crece su hijo en el vientre, Dios está a nuestro favor en medio del fuego de la opresión y la tormenta de la prueba aunque nuestros ojos no lo vean, Él está obrando a nuestro favor y pelea nuestras batallas, Eclesiatés 11:5.

3. Confiemos en las promesas de Dios. El Señor cumplió su promesa, y les dio paz en todo el territorio. Sus enemigos no pudieron hacerles frente, porque el Eterno entregó en sus manos a todos sus enemigos y les dio la victoria. No faltó palabra de todas las buenas promesas que el Señor había hecho a la casa de Israel; todo se cumplió. Josué 21:44-45. ¿Cómo podemos tener apoyo y fuerzas en el día del conflicto y contra el asedio del enemigo, si no conocemos las promesas de Dios?

Debemos leer mínimo dos veces al día la palabra de Dios y meditar en ella todo el tiempo, necesitamos mantenernos alineados con el cielo, mantener el fuego ardiendo en el altar, orar y adorar juntos para levantar nuestras nuevas generaciones con el alimento de la palabra de Dios. Todas las promesas que Abba Padre nos ha dado se cumplirán. Confiemos en Él y su palabra, el Señor será honrado en toda bendición, todo lo bueno que nos sucede y en todas las batallas ganadas, Pues en Cristo se cumplen todas las promesas del Padre, en Él todas son Sí y por Él son, amén por medio de nosotros, para gloria de Dios, 2 Corintios 1:20. Así que cuando somos libres del mal y bendecidos, Dios es exaltado y glorificado.

Necesitamos ser formados en diversas formas y áreas de nuestra vida para aprender a confiar en Dios, su fidelidad y su palabra para poder confesar sus promesas; no seremos avergonzados si a YHWH hemos invocado. Debemos enseñar y entrenar nuestra mente para responder rápidamente con la palabra ante cualquier ataque y situación de conflicto. Si vencemos y somos bendecidos, seremos testimonio para que otros vengan a rendirse a Dios. Él nos ha dejado un legado de promesas y somos herederos de ellas en Cristo, porque lo que vale ante el fuego del asedio y la prueba es el poder de las promesas de YHWH.

Nuestro amado Salvador pudo vencer al enemigo y lo enfrentó en el desierto con el poder de la palabra y diciendo escrito está. Si no conocemos la biblia y recibimos promesas de Dios, no podremos enfrentar al enemigo ni vencer en momentos de dificultad. No podemos ser perezosos en este tiempo, no podemos dejar de leer la palabra, orar y adorar, no podemos apartarnos del altar, debemos llenar nuestra vida de Dios y fijar sus promesas en nuestra mente para declararlas en el momento oportuno, Y estas señales seguirán a los que creen: en mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas; tomarán en las manos serpientes, y si beben cosa mortífera, no les hará daño, sobre los enfermos pondrán sus manos y sanarán, Marcos 16:17-18. Dios es fuerte en nosotros, y el campo de batalla es la mente, la iglesia juega a ser iglesia, pero el diablo no juega a ser diablo, ese viene a destruir.

4. Confiemos en que Dios es bueno, El Señor nos espera, para tener compasión de nosotros; Él está deseoso de mostrarnos su amor, el Todopoderoso es Dios de justicia y será exaltado teniendo misericordia de nosotros. ¡Dichosos todos los que esperan en Él!  Isaías 30:18. La naturaleza del Eterno es bondad, por sus atributos su misericordia es infinita, y para asegurarnos en Él, Dios tiene que formarnos y entrenarnos para ser sus valientes soldados, sus aguerridos discípulos en quienes quiere derramar sus bendiciones y el poder de su presencia.

Cristo ya lo dio todo en el calvario, ¿cómo no va a querer defendernos y bendecirnos, si el Padre no escatimó ni a su propio Hijo para darnos vida y libertad? Confiemos nuestra vida a Dios, entreguemos todo en sus manos porque Él es bueno; cuando hay un llamado El Padre perfecciona y entrena en el campo de batalla para que aprendamos a enfrentar con valentía al enemigo y las circunstancias contrarias; YHWH nos guardará si confiamos totalmente en Él humillándonos y adorando a sus pies. El Buen Padre nunca nos dejará solos ni desamparados, YHWH Gibor-Zabaot pelea nuestras batallas con poder. No dejemos de dar gracias por todo y mencionando a todos en oración, para que el Padre de nuestro Señor Jesucristo, nos de su sabiduría y nos dé espíritu de sabiduría y de revelación en su conocimiento. Efesios 1:16-17.

Comparto este hermoso mensaje en que Dios me habló, me fortaleció, y me ha dado su victoria a través de la palabra dada al siervo en la reunión de hoy.

Oremos: Abba Padre danos de tu presencia y rodéanos de tu gloria, escóndenos de las acechanzas y los dardos del maligno, alumbra nuestro entendimiento, para que sepamos a qué nos has llamado y que conozcamos la riquezas de tu herencia; ayúdanos y defiéndenos para ver las grandezas de tu poder a nuestro favor para los que creemos en Ti, en tu palabra y la fidelidad de tu amor en medio de la opresión y las sombras del mal; cúbrenos con tu preciosa sangre Amado Señor y llenamos más y más de tu Espíritu y que el poder de tu palabra sea nuestra espada y nuestro escudo. Amén. 

Mg. MEHC, Hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino.



4 nov 2018

DIOS HABLA, TRATA Y TRANSFORMA



DIOS TRATA, HABLA Y TRANSFORMA

He aquí mi confianza es que el Omnipotente testificará por mí, aunque el adversario me forme proceso, Job 31:35.

Dios trata al ser humano, una y otra vez, lo sana y lo libra de la muerte, para sacar su alma del hoyo, y para iluminarlo con la luz de los vivientes, Job 33:29-30.


Cuando estamos abatidos y en grandes pruebas, deseamos escuchar la voz de Dios indicándonos una salida, esto fue exactamente lo que sucedió con el mensaje que Eliú dio a Job, son palabras admirables que revelan los más profundos principios del gobierno y de la bondad de Dios. El mensaje de Eliú no sólo nos enseña sino que nos muestra que no hay ninguna discusión acerca del trato que Dios da a sus criaturas, además que con su amor y apropiada disciplina nos llama la atención hacia Él hablándonos constantemente de diversas formasen una o en dos maneras habla Dios; pero el hombre no entiende, Job 33:14.

El problema está en que los seres humanos no hacen caso, no ven y no oyen, por consiguiente no pueden entender la voz de su Padre celestial que les enseña y corrige de manera amorosa, pero como el ser humano sigue en sus propios razonamientos y terquedad, Dios tiene que hablar por medio de las pruebas y la enfermedad, …Tienen tapados los oídos, Señor, y no pueden escuchar; se burlan de tu palabra, no les agrada, Jeremías 6:10b. Ellos no escucharon ni inclinaron sus oídos, sino que endurecieron sus cerviz para no oír ni recibir corrección, Jeremías 17:23.

El cuadro de Job es el de un hombre enfermo y afligido por el dolor, hundiéndose más y más cada día en su agotamiento, casi a punto de entrar en el sepulcro, pero alguien que amaba y temía a Dios y retenía su confianza en su Hacedor, He aquí mi confianza es que el omnipotente testificará por mí. Aunque el adversario me forme proceso, Job 31:35. Esa confianza agradó al Eterno, por eso Él envío palabras de poder transformador para Job; Dios necesitaba de un verdadero mensajero que llevara las palabras precisas, y ese era Eliú, uno entre mil, y ¡Cuán rara vez se encuentra el verdadero mensajero que de las palabras precisas de parte de Dios!

El joven Eliú había esperado que sus mayores hablaran, pero al ver que no había respuesta en los tres, entró a dar su mensaje. Las palabras de Eliú enseñan la justicia de Dios y la amorosa ternura del castigo divino, con el propósito de guiar al ser humano al arrepentimiento, llevarlo a la reflexión para luego revelar salvación; Con lo cual Eliú exclama: Dios tuvo misericordia de Job y lo libró de descender al sepulcro pero Job halló redención, Job 33:24. Al pasar Job por este proceso tan doloroso sin quejarse y alabando a Dios, hubo una respuesta maravillosa de parte de Dios a través de los labios de Eliú, su carne sería más tierna que la de un niño, y volvería a los días de su juventud, Job 33:25; esto me recuerda Salmos 92:12-15. Dios se gozo en renovar y restaurar a sus hijos enseñables, dóciles y que lo adoran en medio del dolor.

Desde estos tiempos tan antiguas ya estabamos viendo el maravilloso mensaje de la propiciación de Cristoque llevando en su cuerpo llagado todas las enfermedades humanas y el peso del pecado, es un mensaje que despierta la fe y que conduce a la oración y la espera en Dios para hallar respuesta a nuestras más duras necesidades del alma y del cuerpo; este mismo mensaje continua inalterable para todo aquel que recibe a Cristo y cree a las promesas de Dios consignadas en la biblia, Así trata Dios al ser humano, una y otra vez, lo sana y lo libra de la muerte, para sacar su alma del hoyo, y para iluminarlo con la luz de los vivientes, Job 33:29-30.

Cuando el ser humano persiste en el pecado de su obstinado corazón, debe estar seguro que los castigos de Dios vendrán como rayos salidos del firmamento, que caerán sin que sepamos dónde ni cuándo; a pesar del castigo, y el trato amoroso y correctivo del Padre Eterno, Él nos hará comprender por qué ha permitido y envíado la aflicción; su palabra nos exhorta y conduce a examinarnos y reflexionar en sí mismos para hacer loa cambios respectivos y volvernos al parecer de Dios, pero si nos examinamos bien diariamente y dejamos el yo crucificado, el Padre no tendría que castigarnos. Pero cuando el Señor nos castiga, es para disciplinarnos y que aprendamos, y no vayamos a ser condenados juntamente con el mundo, 1 Corintios 11:31-32.

Dios nos ama tanto que nos corrige para sacarnos del error y del pecado, para que hagamos su sagrada voluntad y que asimilemos la lección que quiere enseñarnos cada día; Él es el primero en desear aliviarnos de las presiones que nos agobian; cuando Dios nos reprende, está mostrando claramente que esta a nuestro favor y desea bendecirnos, para sanar tanto el cuerpo como el alma. Su amoroso carácter de Padre nos revela su fiel bondad, ese el mensaje de Eliú para Job, el soplo del Omnipotente hará al hombre entender, Job 32:8b. Esas fueron las palabras de Jesús a sus discípulos, El Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, Él les enseñará todas las cosas, y les recordará todo lo que les he dicho, Juan 14.26.

Job nos representa a todos, y Eliú nos hace ver lo mejor del Padre Dios. Podemos ver en Job esa clase de persona recta, a un ser humano bueno y el mejor que pueda producir la gracia divina entre muchos mortales, hasta que llega el momento de morir a su propio yo-ego y muere su propio carácter para que empiece a gozar de una genuina comunión con su Creador. Parecía que todo estaba bien en Job, hasta que Dios derrama su luz reveladora, y con su bisturí divino empieza a arrancar el prepucio de su humano corazón. Todo el falso auto concepto se derrumba y aparecen todas las debilidades e indignidades de nuestra perdida humanidad carnal, Eliú dice: mis razones declararán la rectitud de mi corazón. Y lo que saben mis labios, lo hablarán con sinceridad, Job 33:3.

Dios no señala ni convence a Job de ningún pecado atroz, sino de sus propias flaquezas, de su propia falta de rectitud, y del erróneo concepto que tenía de sí mismo y su valor propio. Nos queda difícil ver lo que realmente somos, no debemos inflarnos ni ufanarnos de nosotros mismos, sino que debemos mantener crucificado y colgado el yo, inmolando nuestra humana voluntad, para que sea todo lo de Dios, lo que gobierne y dirija nuestra vida, Eliú reconoció que no debemos lisonjearnos ni engrandecernos a nosotros mismos, Porque no se hablar lisonjas, de otra manera, en breve, mi Hacedor mi consumiría, Job 32:22.

Esto no es algo que aprendamos por las buenas, antes de llegar a reconocerlo, tendremos que pasar por muchas pruebas, desiertos y hoyos cenagosos de dolor y desesperación para que nuestro yo, sea humillado y reconozcamos que somos pecadores necesitados del Dios Santo, Respóndeme si puedes; ordena tus palabras, ponte en pie. He aquí, a mí, en lugar de Dios, conforme a tu dicho…tú dijiste, y yo oí…yo soy limpio y sin defecto; soy inocente, y no hay maldad en mí. He aquí que Dios buscó reproche contra mí, y me tiene por su enemigo. Puso mis pies en el cepo, y vigiló todas mis sendas. He aquí, Job, en esto no has hablado justamente; yo te responderé que mayor es Dios que el hombre, Job 33:5-12.

Job aparece tal cual es, se puede ver su incredulidad, tratando de justificarse ente sí mismo culpando a Dios por su aflicción; Job descubre que los argumentos de sus tres amigos son solo falacias y los rechaza hasta el momento que aparece Eliú; el propio Dios se reveló a Job a través de este joven con un mensaje inspirador, y transformador; luego, la misma presencia de Dios vino sobre Job como un torbellino y una dulce voz cálida, Job 38.

Ante la luz del propio Creador, Job puede ver su indignidad y cae postrado a los pies del Eterno Padre y por primera vez puede hablar reconociendo su desconocimiento de Dios: Señor, solo te conocía, por lo que había oído de Ti, pero ahora mis ojos te ven. Por eso me retracto de todo lo que he dicho, y me arrepiento en polvo y ceniza, Job 42:4-6. Fue esta la primera vez que Dios aprobó la actitud de Job, perdonando a su siervo sus errores y sus flaquezas, y vindicándolo ante sus amigos. Y sucedió que después que el Señor habló estas palabras a Job, el Señor dijo a Lifaz temanita: Se ha encendido mi ira con ti y contra tus dos amigos, porque no han hablado de Mí lo que es recto, como siervo Job, Job 42:7.

¿Qué fue lo correcto que dijo Job? Fue su humillación ante Dios y sus palabras reconociendo su indignidad, su auto justificación y desconocimiento de su Creador, por consiguiente ahora Su Hacedor podía comenzar a obrar en él; de tal manera que ante la muerte del yo de Job, Dios responder inmediatamente, concediéndole a Job no solo sus favores y bendiciones, sino que le devolvió toda su prosperidad y bienestar que había tenido y perdido a causa del enemigo, ¿Acaso es sabio contender con el Omnipotente? El que disputa contra Dios que responda. Entonces continuó el Señor y dijo a Job: Tú, que querías entablar juicio contra Mí, el Todopoderoso, ¿Insistes todavía en responder? ¿Qué puedo responderte yo, que soy tan insignificante? Prefiero guardar silencio ante Ti porque soy vil. Ya he hablado una y otra vez, y no tengo nada que añadir,  Job 40:1-5.

Desde ese momento, Job renace a una nueva vida tanto material como espiritual; esa es la resurrección que Jesucristo nos ha dado en la cruz y que la ha confirmado al darnos de su Espíritu, sacándonos de la muerte y resucitándonos a una vida en Cristo Jesús. El Padre está deseando llenar a muchos que se dispongan a Cristo, aquellos que como Job mueran a sí mismos, Dios desea revelar y destruir toda esa sutileza que se esconde en los corazones, y muchos esconden con miles de disfraces, y que les cuesta tanto hacer que muera en su yo, Y Jesús decía a todos: Si alguno quiere venir en pos Mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame, Lucas 9:23.

Dios muchas veces, no solo tiene que hacernos sufrir y ponernos en lecho de enfermedad y dolor, sino que tiene que ponernos en circunstancias en que podamos ver que no somos tan buenos como lo imaginamos y que nuestra reputación se hace pedazos. Esto es para llevarnos a la humillación y reconocimiento de que nuestra vieja naturaleza debe ser totalmente crucificada, solo en esa condición estaremos verdaderamente a los pies de Jesús. Y solo entonces, aprenderemos a depender únicamente de Él, sólo el Omnipotente nos da las fuerzas y la vida necesaria para vencer cuando Cristo es nuestra Cabeza viva, Porque todo el que se ensalce, será humillado; y el que se humille será enaltecido, Lucas 14:11.

Pedro fue salvó después de su caída, el yo del apóstol tuvo que morir para que pudiera vivir perfectamente en su Mesías y Señor.Debemos morir de una vez por todas a nosotros mismos y renunciar a confiar en si mismos; solo así contaremos con los recursos de Jesucristo y Él podrá darnos lo que le dio a Job, todas las riquezas de su bondad y todos los planes de su buena voluntad para nuestra vida. Aunque comenzamos la vida con cosas terrenales, debemos terminar con las cosas espirituales.

La preciosa exposición y enseñanza de Job es una hermosa conclusión a las tribulaciones, maduramos en la muerte al yo y en el dolor del alma rendidos de corazón a los pies de Cristo, Este es el mayor y vivo goce que alguien pueda experimentar en una relación directa y personal con Dios; ahí está el Espíritu Santo para llenarnos de su fuego y de su fruto para conducirnos a la senda de la vida, conociendo de manera personal y cara a cara al Dios vivo, real y verdadero, YO conozco que todo lo puedes, y que no hay pensamiento que se esconda de Ti, Job 42:1.

Así es como el Omnipotente nos hace ascender por la escalera de la vida, primero nos hace bajar, nos derriba del caballo, y luego nos hace ascender en el ascensor de su gracia salvadora, hasta las alturas de su reino, Les aseguro que si el grano de trigo al caer en la tierra no muere, quedará solo; pero si muere, dará una abundante cosecha, Juan 12:24.

Bendito sea tu poderoso nombre Abba Padre, pues solo Tú eres quien nos ayuda a morir al viejo hombre, y en el lecho del dolor nos sostienes y nos hablas, solo Tú unges nuestra cabeza con el aceite fresco de tu presencia, y nos haces rebosar de gozo en el Espíritu cuando hemos aprendido la lección. Amén.


Mg. MEHC, hija del Dios vivo, real y verdadero y servidora de su reino.